MARTES Ť 31 Ť JULIO Ť 2001

Ť La PGJE no quería avalarlo; intervino la CEDH para su solución

Menor violada por su padre abortó en Sinaloa

JAVIER VALDEZ Y VICTOR GUERRA CORRESPONSALES

Culiacan, Sin., 30 de julio. Por la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y después de que especialistas de la Secretaría de Salud le practicaron estudios, la menor Lucila pudo abortar en un hospital de Culiacán el producto de una violación de su propio padre.

La niña de 12 años padece de sus facultades mentales. Ella es oriunda de Los Mochis, municipio de Ahome, y contaba con cuatro meses de embarazo.

Inicialmente, la PGJE no dio su aval para el aborto, por lo que los familiares acudieron al Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia y la CEDH para pedir apoyo.

El pasado fin de semana, el procurador general Ramón de Jesús Castro Atondo calificó como lamentable e infame el aborto que se le practicó a la menor.

Una vez que estudió el caso, Jaime Cinco Soto, presidente de la CEDH, recomendó a la Secretaría de Salud que practicara a la menor toda clase de estudios médicos especializados con el objetivo de determinar los riesgos que podría haber en caso de practicarle un legrado, y si fueran menores llevarlo a cabo.

Por lo que los doctores de Culiacán que le realizaron análisis a la adolescente dictaminaron que por problemas que padecía de anemia, baja presión y, principalmente por su minoría de edad, era necesario practicarle una microcesárea para extraerle el producto, ya que su vida corría peligro.

Fue así que se decidió practicarle el aborto a la menor el lunes 23 de este mes en un nosocomio de la capital sinaloense.

Fuentes allegadas a la familia indicaron que Lucila se encuentra en buen estado de salud, aunque no descartan llevarla a terapia psicológica por el daño sufrido.

En Sinaloa, el artículo 158 del Código Penal establece que el aborto está permitido sólo para aquellos casos en que el embarazo haya sido producto de alguna violación, y siempre que sea avalado por un dictamen médico y consentido por los tutores de la víctima.

En tanto, el presunto responsable de la violación, Rosendo Sánchez, fue puesto a disposición del juzgado cuarto penal, bajo el oficio 63/2001, una vez que el personal de la agencia tercera del Ministerio Público lo consignó por violación equiparada.

El titular del juzgado, Ramón Adolfo Armenta Rodríguez, le dictó auto de formal prisión, por lo que se encuentra recluido en el penal de Los Mochis.