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México, D.F. sábado 28 de julio de 2001
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Editorial
 
ZONAS CON LITORALES EN VENTA

SOLEl Programa de Atención a Zonas con Litorales puesto ayer en marcha, mediante el cual se pretende combatir el uso ilegal de la tierra, conservar los recursos naturales y promover la entrada de capitales extranjeros, resulta particularmente delicado. 

Si bien el mercado ilegal de tierras, la ocupación irregular y la contaminación ambiental en las zonas costeras son asuntos que merecen una presta solución legal, el programa presentado ayer por el presidente Vicente Fox pareciera estar enfocado principalmente a la promoción de inversión nacional y extranjera, utilizando como telón el compromiso social y ecológico. 

No cabe duda de que la regularización anunciada es un primer e importante paso para que los ejidatarios tengan un respaldo legal sobre la titularidad de sus tierras, pero si no se dan las condiciones y los apoyos necesarios para el desarrollo de las mismas se corre el riesgo de que los propietarios se vean obligados a malbaratar su patrimonio y terminen --si bien les va-- trabajando de peones para alguna cadena hotelera internacional.

De lo expuesto ayer por el Presidente, nada asegura la equidad en la distribución de los beneficios económicos que deriven del mercado legal de tierras en zonas costeras. Por el contrario: ante la realidad económica que aqueja a la población en esas zonas, el programa se muestra cual traje a la medida para que los beneficiarios sean los grandes inversionistas, mismos que han explotado las tierras a sus anchas y, en algunos casos, sin la menor responsabilidad en materias ecológica y de justicia social.

Durante años, por su riqueza en recursos naturales y potencial turístico, las tierras costeras nacionales han sido pretendidas por empresas extranjeras. Ante la evidente falta de oportunidades para los propietarios legales, es previsible un mayor asentamiento de consorcios foráneos en tierras nacionales. La reflexión no cuestiona los beneficios de la inversión externa, sino obliga a preguntarnos: ¿de qué sirve que los ejidatarios cuenten con documentos legales que los acrediten como propietarios de sus tierras, si no se les brindan los apoyos para trabajarlas? En la lógica de competencia del mercado, tarde o temprano tendrán que vender su patrimonio.

Finalmente, llama la atención que el programa haga alusión a las "zonas con litorales", las cuales se definen como áreas donde interactúan los medios marino, atmosférico y terrestre, mientras que en nuestra legislación se habla de manera genérica de playas, terrenos ganados al mar, y la denominada Zona Federal Marítimo Terrestre, sin definir en ningún apartado el término "zona con litoral". 

Si además de las tierras, la inversión esta abierta a las áreas marina y atmosférica, el innovador programa anunciado ayer por Vicente Fox no es más que la puesta en venta de parte de nuestra soberanía nacional. Este es el tipo de "alianzas estratégicas" a las que con tanto entusiasmo se refiere el Presidente.
 

 

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