VIERNES Ť 27 Ť JULIO Ť 2001
Ť Pastor protestante
La actitud de José Espina, abuso de poder
BERTHA TERESA RAMIREZ
La decisión del jefe delegacional en Benito Juárez, José Espina Von Roehrich, de mantener símbolos religiosos en oficinas públicas atenta contra el artículo 130 constitucional, el cual garantiza la laicidad del Estado y la separación entre éste y las iglesias, afirmó el pastor protestante de la Iglesia presbiteriana, Abner López.
"La irresponsabilidad del funcionario y varios de sus subalternos podría generar una lucha de símbolos, Ƒo es acaso un mensaje precisamente en un territorio que lleva el nombre del Benemérito de las Américas?", cuestionó Abner.
Dijo que ignorar el artículo 130 constitucional es un abuso de poder de la administración panista en esa demarcación "y un signo preocupante de fanatismo, intolerancia y utilización de los signos de fe como propaganda política".
Indicó que el artículo 24 constitucional garantiza la libertad de credo, pero "jamás en los espacios públicos, pues se refiere a los templos y los hogares; en esto radica precisamente la deformación con la que pretenden manipular la ley los funcionarios panistas".
El pastor alertó sobre la posibilidad de que se avecinen negros signos de intolerancia. Para las iglesias evangélicas el asunto no es menor, ya que "sin duda tenemos que reunirnos porque esto pudiera conllevar a una lucha de símbolos".
Con cierto tono de ironía añadió: "también nosotros podríamos pedir a los pocos políticos protestantes que usen la Biblia; creo que ya deberíamos haber superado ese espacio, la religión es para vivirla en la intimidad del hogar y los templos".
Remató: "qué lástima que se identifiquen más con los símbolos religiosos que con los emblemas patrios. Es preocupante este fanatismo, el cual, si no se detiene en este momento, tendrá consecuencias", alertó.
Desde luego que Gobernación debe dar una explicación, porque ningún funcionario público puede tratar a los ciudadanos religiosamente; por lo pronto "nosotros estaremos alerta del delegado", advirtió.