JUEVES * 26 * JULIO * 2001

* Insiste el Vaticano

Inmoral, toda investigación con embriones humanos

REUTERS Y AFP

Ciudad del Vaticano, 25 de julio. El Vaticano enfatizó este miércoles que considera inmoral, sin excepción, toda investigación que utilice células troncales tomadas de embriones humanos. En días pasados agencias señalaron que la santa sede sólo condenaba el empleo de embriones creados para ser destruidos, y no a embriones de clínicas para la fertilización in vitro, que pudieran ser donados a la ciencia.

El pasado lunes, en una reunión con el presidente estadunidense, George W. Bush, el papa Juan Pablo II afirmó que son "perversas" las investigaciones que emplean células troncales de embriones creados especialmente para el desarrollo científico. El uso de células troncales podría llevar a la cura de enfermedades como cáncer, Alzheimer, Parkinson, diabetes, y a la reposición de la médula espinal.

Funcionarios estadunidenses citados el martes por el diario The Washington Post, indicaron que las palabras del Papa fueron "suficientemente ambiguas" como para que Bush no tenga cargo de conciencia si decide aprobar el financiamiento de estas investigaciones.

Para disipar estas ideas, el vocero del Vaticano, Joaquín Navarro Valls, citó la encícilica papal de 1995, Evangelium Vitae (el Evangelio Vital), que condenó específicamente la destrucción de embriones producidos para la inseminación artificial de mujeres.

"Esta condena moral también considera los procedimientos que explotan a los embriones vivos y fetos humanos, en ocasiones producidos específicamente para el propósito de la fertilización in vitro, lo mismo para su utilización como material biológico o como proveedores de órganos o tejidos para trasplantes en el tratamiento de ciertas enfermedades".

"El asesinato de inocentes criaturas humanas, aun si se lleva a cabo para ayudar a otros, constituye una acción totalmente inaceptable", concluyó el comunicado de Navarro Valls.

Mientras, el Comité de Asuntos Judiciales de la Cámara de Representantes aprobó esta martes normas legales que prohíben la clonación humana y castiga hasta con 10 años de prisión y multas de al menos un millón de dólares a quienes lo practiquen.

"Abrir la puerta a la clonación humana --aunque sea con la mejor de las intenciones-- inevitablemente llevará a la experimentación con niños en el futuro", comentó el presidente del comité, James Sensenbrenner.