MIERCOLES Ť 25 Ť JULIO Ť 2001

Ť El país "superó el momento crítico", según De la Rúa

Burócratas argentinos se declaran en rebeldía con paros y movilizaciones

DPA, AP, AFP Y REUTERS

Buenos Aires, 24 de julio. Los empleados públicos argentinos se declararon hoy en rebelión, con paros y movilizaciones, contra el re-corte de 13 por ciento a sus salarios y anunciaron para mañana una huelga de actividades por 24 horas, al tiempo que el presidente Fernando de la Rúa aseguró que Argentina "superó el momento crítico" y la "economía se está recuperando".

El paro previsto para mañana se realizará en coincidencia con el tratamiento en el Senado del proyecto gubernamental, que busca alcanzar el déficit cero en las cuentas fiscales mediante el recorte a los haberes de los jubilados y empleados estatales que perciban más de 500 dólares (pesos).

Al hacer el anuncio, Pablo Micheli, titular de la Asociación de Trabajadores del Estado, convocante del paro de este miércoles, acusó al gobierno de descargar el mayor peso de la crisis económica sobre los sectores de menos recursos, y amenazó: "Vamos a rodear el Congreso para que los senadores no aprueben la vergonzosa ley".

También unos 2 mil piqueteros, como se conoce a los desempleados que cortan ca-rreteras en Argentina, anunciaron un plan de lucha en las 50 ciudades más importantes del país sudamericano, en rechazo al ajuste decretado por el gobierno.

Los dirigentes de los piqueteros dijeron después de una asamblea que su movilización incluirá corte de caminos por 24 horas a partir del martes próximo, y luego durante dos días a partir de la segunda semana y de 78 la tercera.

Al finalizar la reunión, Víctor Gennaro, quien promueve la conformación de un Frente Nacional contra la Pobreza, llamó a construir un gran paro nacional para derrotar las política económicas neoliberales.

En la rebelión efectuada este día participaron desde la policía de la provincia de Buenos Aires hasta trabajadores del servicio penitenciario para repudiar los recortes a los salarios, horas extras y pago en bonos.

Pero De la Rúa declaró en una entrevista televisiva que la "situación está mejorando notablemente" y el país superó ya el "mo-mento crítico, muy peligroso para la economía, y ha bajado el riesgo país".

Ahora, añadió el mandatario socialdemócrata, "tenemos una economía consolidada y segura".

No obstante que se mostró preocupado por la situación social, este día agregó otra medida a su paquete de ajuste al anunciar un recorte del gasto en salarios de altos funcionarios de 35 por ciento, y bajará en 30 por ciento el destinado a personal contratado -que no tiene base- mediante reducción de salarios o despido.

De la Rúa, quien negó haber pensado en la renuncia y rechazó que tenga previsto cambios en su gabinete, afirmó que el objetivo es lograr la reactivación de la economía para generar empleo, además de que el gobierno trabaja para demostrar que el país "no ha llegado ni llegará al default" (cesación de pago de deudas).

Reiteró que otro objetivo de su gobierno es llegar al piso de mil pesos para aplicar el descuento de 13 por ciento en los sueldos de los jubilados y empleados estatales conforme se generen recursos.

De su lado, el ministro de Economía, Do-mingo Cavallo, trató de calmar los ánimo de los inversores en entrevista con el diario francés Le Figaro, al que aseguró que Ar-gentina no devaluará el peso ni entrará en cesación del pago de su deuda externa.