MARTES Ť 24 Ť JULIO Ť 2001

Ť Asegura el líder del sindicato de la armadora que sólo cesarán a 350 trabajadores

Afectada por la desaceleración en EU, la Ford despedirá a 10% del personal

Ť El ajuste se hará mediante un programa de retiro voluntario, que concluirá en agosto

ELIZABETH VELASCO CONTRERAS

La desaceleración económica también "golpea" a la Ford Motor Company en sus tres plantas de México, pues en una primera fase se liquidará a casi 10 por ciento del personal, según información de trabajadores despedidos, la cual fue confirmada por el propio dirigente sindical del gremio, Juan José Sosa.

José Concepción Sotelo, Juan Alfredo Solís, Miguel Angel Cedillo, José Sánchez Reyes y José Luis Rueda Urbina, despedidos hace poco por "negarse a la aplicación del programa de ajuste y criticar la antidemocracia sindical y desaparición de materia de trabajo", aseguraron que en una "primera fase serán recortados 500 obreros de la planta de Cuautitlán Izcalli, estado de México".

En entrevista aparte, Sosa sostuvo que sólo serán liquidados 350; de éstos, 200 eventuales. La plantilla de la trasnacional asciende a 3 mil trabajadores repartidos en las plantas de Sonora, Chihuahua y la del estado de México.

"Lamentablemente nos ha golpeado la desaceleración económica de Estados Unidos, pues ha decaído entre 30 y 40 por ciento la exportación de unidades; 90 por ciento del total" se envía a aquel país, argumentó Sosa.

Por separado, los informantes refirieron que los ajustes de personal se harán mediante un programa de retiro voluntario que concluiría en agosto.

Al respecto, el líder nacional del sindicato de la Ford (SNTFMC) aseguró que "para evitar que la gente sea perjudicada y paliar esta dificultad se les otorgará una liquidación adicional a lo normal, además que se procura que se inscriban trabajadores de menor antigüedad y eventuales".

En contraparte, los despedidos dijeron que el retiro va dirigido a personal con más de 30 años de antigüedad, "ya que la empresa prefiere contratar jóvenes en forma eventual para ahorrarse el pago de prestaciones".

En la convocatoria correspondiente, dirigida por el SNTFMC -cuya copia obra en poder de La Jornada- se indica que el plan del retiro está dirigido al "personal sindicalizado de planta con 55 años o de más edad, que considerando su condición especial hemos acordado con la empresa, una liquidación de acuerdo con la siguiente fórmula:

"Cuatro meses de salario, más 20 días de salario por cada año laborado a razón de salario diario integrado (aguinaldo, cupones de despensa, fondo de ahorro y bono de vacaciones), prima de antigüedad por 12 días al doble del salario mínimo por cada año laborado, y a la cantidad que resulte de lo anterior se le adicionará un bono equivalente a 33 por ciento, como gratificación por sus servicios".

En la convocatoria se señala que a partir del 29 de junio causará baja el personal temporal. Si una vez agotado el plazo para el retiro no se llegara a cumplir con las 350 bajas, se "complementará con el personal de menor antigüedad".

En tanto, los trabajadores despedidos aseguraron que hay un clima de inconformidad hacia su líder, debido a que "ha permitido la desaparición de materia de trabajo; no ha rendido en 11 años cuentas sobre las cuotas sindicales -estimadas en más de 30 millones de pesos-, y acepta la subcontratación de trabajadores por agencias de la propia empresa".

Sosa admitió que han desaparecido los departamentos de tableros y llantas; el primero, negociado en la gestión sindical anterior; el segundo, durante su gestión, "porque si nos cerramos a los nuevos conceptos de producción, afectaríamos en su totalidad la fuente de trabajo". Por último, aceptó que tiene una demanda por un presunto fraude de 25 millones de pesos, interpuesta en su contra por el comité local de Cuautitlán, "encabezado por Hilario López, recientemente desconocido por el CEN porque no cumplió con proteger los intereses del sindicato y de los trabajadores".

A decir de Sosa, es falso que haya cometido fraude, haya antidemocracia sindical en la organización que dirige y carezca de la toma de nota, como aseguran sus oponentes.