DOMINGO Ť 22 Ť JULIO Ť 2001
Xóchitl Gálvez
Debemos reconocer fortalezas y debilidades de la reforma indígena
Ahora el gobierno "corre el riesgo de no poder responder a las demandas" de las comunidades indias
ROBERTO GARDUÑO
La aprobación de la ley indígena "no dejó satisfechas a las etnias del país", reconoce Xóchitl Gálvez, quien advierte que ahora el gobierno "corre el riesgo de no poder responder a las demandas" de las comunidades indias.
De regreso de la Montaña de Guerrero, la responsable presidencial de la atención a los pueblos indígenas responde a las interrogantes sobre la aprobación fast track de las controvertidas reformas constitucionales en la materia, y se refiere a los legisladores federales: "este es el Congreso que buscamos durante tantos años... Ƒno?"
Una y otra vez dice que hay que olvidarse por un tiempo del EZLN, porque lo importante es "echarse para adelante" y atender a todos los indígenas. No obstante, los trae a colación: "nos guste o no, el Ejército Zapatista puso el tema indígena en la agenda nacional".
-ƑQué hará el gobierno federal una vez que se concretó el albazo?
-Esta ley se aprobó en medio de una enorme polémica, principalmente porque no dejó satisfechos a los grupos indígenas ni a los gobiernos de los estados donde hay mayor población nativa, como Oaxaca y Chiapas, lo que requiere que todos realicemos una reflexión profunda del proceso y nos atrevamos a hacer un análisis minucioso de las reformas, reconociendo dónde están sus fortalezas y aquellas debilidades e insuficiencias que no permitan el desarrollo de los pueblos indios. Y de las fortalezas encontrar, no sé si a través de la ley reglamentaria, una forma práctica para aplicarla. Y esto significa que empiece a tener efectos sobre el desarrollo de los pueblos indígenas.
"Algo muy cercano podría ser el presupuesto de 2002, porque necesitamos dinero para resolver el cúmulo de demandas de electrificación, de proyectos productivos, de comercialización de mercancías, de carreteras, de mejoras a la estructura de salud".
La funcionaria reconoce que la ley también es benéfica porque toca la atención a los indígenas migrantes y a los trabajadores agrícolas que en total suman 3 millones, "pero con esto no quiero decir que tengamos que cerrar el capítulo y no seguir analizando y debatiendo los demás elementos".
De Diego Fernández de Cevallos, uno de sus más ilustres detractores, recuerda: "dice algo muy cierto: 'Xóchitl Gálvez y yo no tenemos, no compartimos los mismos puntos de vista', y así es, la visión que tenemos sobre los pueblos indígenas es diferente, y esto se traduce en expectativas distintas".
-ƑEsas diferencias no afectarán aún más la posibilidad de mantener abierto el debate de la conflictiva ley?
-Tenemos que encontrar una forma de convivencia. Finalmente, los pueblos indígenas forman parte de todo esto, y el resto de los actores tendrán que hacer un esfuerzo para conciliar sus intereses con los de los nativos que, hoy por hoy, parece que incomodan al resto de la sociedad. Busquemos un mecanismo. El segundo punto será ponernos de acuerdo en una reforma fiscal, porque ahorita en el país hay 40 millones de mexicanos que la pasan mal, y de ellos, 17 millones que la pasan más mal que nadie. Hay que ser realistas: por más voluntad que se tenga en la ley indígena, por más voluntad que tenga el Presidente, si no se aprueba la reforma fiscal no habrá recursos suficientes para cubrir las enormes carencias de los pueblos indígenas. Es vital lograr un consenso entre los pueblos indios y los legisladores. Las comunidades piden soluciones a gritos.
-Como en el caso del café...
-Este es un problema grave, porque ocurre fundamentalmente en las regiones indígenas; está en las selvas, en las montañas, en las sierras. Nos están pidiendo un fondo del café. ƑY de dónde va a salir? Se requieren recursos. Y los cañeros y los maiceros reclaman apoyo para resolver sus problemas, y la bolsa es una, y no se puede repartir a todo mundo como debería hacerse.
-ƑQué opinas de la aprobación de la ley indígena en el Congreso?
-Tengo que ser franca: dimos la pelea, argumentamos, defendimos a los pueblos indios, tuvimos posiciones muy claras, de eso no debe haber duda, y finalmente el Congreso manda... y eso es lo que buscamos durante muchos años, un Congreso autónomo, independiente, que tuviera la capacidad de no dictaminar únicamente sobre lo que mandara el Ejecutivo. Eso es lo que buscamos durante muchos años... Ƒno?
-ƑQué encuentras en las comunidades indígenas ante el crecimiento de la pobreza?
-Hay de todo. Las comunidades de la Montaña de Guerrero son sumamente combativas, radicales, contundentes en lo que quieren, te exigen respuestas concretas: cuándo y cómo. Hay otras más pacientes, finalmente saben que cualquier cosa que logren es ganancia. Esto es bueno, porque ha habido un empoderamiento de los pueblos indígenas, un despertar, un crecimiento de la autoestima, es una necesidad de organizarse. Finalmente, nos guste o no, el levantamiento armado de Chiapas puso el tema indígena en la agenda nacional.
-ƑHay riesgos?
-El riesgo es que no tengamos capacidad de respuesta a esas demandas. Que todo quede en una posibilidad más. Esperamos que el Congreso sea sensible el año próximo para que asigne recursos para iniciar y resolver los principales problemas de los indígenas en el país.
-ƑEl tema indígena podría representar un riesgo para la seguridad nacional si no se atiende?
-Yo creo que la pobreza y la marginación son focos rojos para el país en todos sentidos, porque son lugares donde más niños se mueren por hambre y por desnutrición, y eso debería ser un foco rojo para los mexicanos. El atraso y la marginación a la larga son el caldo de cultivo para la violencia.
-ƑQué temas son los que no se abordaron en la ley indígena?
-El cuarto nivel de gobierno, y no limitarlo a población indígena, sino para todo el país. El problema fue hacerlo para pueblos nativos, y con justa razón hubo gente que protestó, por lo que yo creo que debemos analizarlo. Que las comunidades indígenas puedan tener mayor capacidad de administración.
"La remunicipalización es un asunto que tarde o temprano vamos a tener que abordar, y aunque haya quedado en un transitorio, que se obligue a los estados a trabajar en él. Hay una confusión terrible en la interpretación de lo que es tierra y territorio. Yo creo que tierra es la propiedad privada, y nunca estuvo a discusión el 27 constitucional, y territorio es el espacio sobre el que se asienta una cultura.
"El tema del usufructo de los recursos naturales no queda claro todavía. El de si los pueblos indígenas son sujetos de derecho o de interés público, que parece lo mismo, pero jurídicamente no es así, hay que precisarlo. Lo que yo sé es que las comunidades indias querían ser parte del Estado. Hay muchas confusiones jurídicas. No se pierde nada si seguimos analizando, si seguimos discutiendo. Espero que esto sea sólo el primer indicio de la ley indígena y que en un futuro haya consensos con los que todos estén contentos y no quede sensación de malestar. Hoy pareciera que no ganamos todo, pero bueno, hubo algo de ganancia".