Ť La comisionada inaugura albergue infantil en Atliaca

Pide Xóchitl Gálvez "no cerrar el capítulo" de la ley indígena

Ť Visitó diversas comunidades de la Montaña guerrerense

Ť Narcos que cultivan amapola presionan a los lugareños

ROBERTO GARDUÑO ENVIADO

Atliaca, Guerrero. En la puerta de entrada a la región de la Montaña de Guerrero, donde ayer fueron inauguradas las obras de remodelación del albergue para niños del Instituto Nacional Indigenista ?cuyo costo íntegro, de un millón 300 mil pesos, fue cubierto por la Fundación Coca-Cola? Xóchitl Gálvez pidió no cerrar el capítulo de la ley indígena, porque el tema de las etnias se sobrepone a la votación generada en el Congreso de la Unión.

"El Congreso ha decidido, y a nosotros como Ejecutivo no nos queda más que acatar las instrucciones del Congreso. Sé que está por plantearse la posición oficial muy pronto; hubo ya una reunión en el Ejecutivo, y hay que esperar".

--¿Cuál sería la solución?

--La solución sería no cerrar este capítulo. Yo creo que la solución, independientemente de la decisión que se tome en el Congreso, es seguir discutiendo el tema indígena. Ojalá el Poder Legislativo le permita a los pueblos indígenas manifestar sus opiniones mediante un diálogo respetuoso, para seguir trabajando en los conceptos que permitan que haya una ley que realmente satisfaga a todos los pueblos indígenas.

La carretera Tlapa-Marquelia, demanda ignorada por 50 años

La encargada de la oficina presidencial para Asuntos Indígenas visitó ayer los poblados de Malinaltepec y Atliaca, en la Montaña guerrerense.

Acompañada por el director del Instituto Nacional Indigenista, Marcos Matías, y el gobernador René Juárez, Xóchitl Gálvez, acudió a la primera de estas comunidades, donde escuchó las demandas de los habitantes de ese lugar, quienes exigieron la construcción de un hospital, así como el inicio de las obras de la carretera Tlapa-Marquelia.

Esta última petición ha sido ignorada desde hace cincuenta años, y su puesta en marcha y conclusión podrían significar un importante motor de desarrollo para los pueblos tlapanecos, objeto de las presiones de los narcotraficantes que se dedican a cultivar la flor de amapola.

Los lugareños también demandaron la edificación de siete albergues indígenas del INI y la ayuda gubernamental para reconstruir mil quinientas viviendas.

La estancia de los funcionarios en ese sitio fue de poco más de una hora. Y el siguiente lugar que visitaron fue Atliaca, donde la fundación Cola-Cola reconstruyó el albergue para niños indígenas del INI.

En ese sitio, Viviana Alegría prometió una nueva inversión, calculada en un millón doscientos mil pesos, para construir un salón de usos múltiples, biblioteca y centro de cómputo.

Con este, suman doce los albergues que la empresa refresquera ha construido y rehabilitado en el país durante los últimos años.

Xóchitl Gálvez anunció que el gobierno federal liberó cincuenta millones de pesos más para rehabilitar los albergues del Instituto Nacional Indigenista, más de mil en todo el país y cuya mayoría sufre los estragos del descuido y la falta de presupuesto para atenderlos.

El presupuesto del INI para este año sólo alcanza para $1.40 por indígena

El director del Instituto Nacional Indigenista, Marcos Matías, también les dijo a las mujeres y hombres congregados en la comunidad de Atliaca que el presupuesto autorizado para dicha institución durante el presente año sólo alcanzaría para darle a cada indígena que vive en el país un peso con cuarenta centavos durante todo el año.