VIERNES Ť 20 Ť JULIO Ť 2001
MEXICO S.A.
Carlos Fernández-Vega
UNA VEZ MAS, el aparato mexicano de procuración de justicia demostró su eficiencia: Carlos Cabal Peniche, ejemplo del empresariado nacional (Salinas de Gortari dixit), consiguió la libertad provisional en Australia, luego de cubrir una fianza de un millón de dólares, y dejará la prisión en el transcurso de este día.
LA PROCURADURIA General de la República ya apeló (con a) la decisión de los tribunales australianos, aunque su función era, justamente, evitar que el proceso contra el ex dueño de Banco Unión llegara a esta etapa. Cabal Peniche fue detenido y encarcelado en la tierra de los canguros y los koalas en noviembre de 1998, es decir, hace 2 años y 9 meses, y la fiscalía mexicana no pudo actuar en consecuencia.
DE HECHO, el empresario de origen yucateco obtuvo, en abril pasado, un amparo de la justicia mexicana contra la acusación de lavado de dinero, toda vez que la PGR no presentó pruebas y argumentos "contundentes" sobre la participación de Cabal Peniche en esta actividad. Después de que su ex socio Scott Perry cubrió la fianza de un millón de dólares, el abogado del ex vendedor de quesos, Murria Gerkens, declaró que "los cargos criminales más graves de los que se le acusa en México ya han sido descartados".
EL JUEZ DE la causa, Michael Kirby, ordenó a Cabal Peniche su comparecencia ante la autoridad policiaca dos veces al día, permanecer en su casa de Melbourne con su esposa y no alejarse más de 50 kilómetros del edificio del tribunal, situado en el centro de dicha ciudad. Aún así, no sería nada raro que, en breve, el ex dueño de Banco Unión celebre junto con su colega Angel Isidoro Rodríguez Sáenz, El Divino, ex dueño de Banpaís y vivo aval de la eficiencia de la justicia mexicana.
CABAL PENICHE se convirtió en prófugo de la justicia mexicana en noviembre de 1994, cuando el gobierno salinista intervino Banco Unión y lo acusó de diversos delitos. Con el tiempo se documentaron distintos ilícitos, entre ellos la creación de empresas fantasma, mediante las cuales no sólo defraudó al fisco y saqueó el dinero de los ahorradores, sino que financió las campañas políticas del partido tricolor. De hecho, en 1999, el ex banquero reconoció, en declaraciones a The Miami Herald, que "invirtió" 25 millones de dólares en dichos procesos electorales: 15 millones para Luis Donaldo Colosio, 5 millones para Ernesto Zedillo y 5 millones para Roberto Madrazo Pintado.
Y MIENTRAS Cabal Peniche hace maletas para regresar al país y ejercer de nueva cuenta todo el poder de su generosa chequera, la Cámara de Diputados mantiene su política de "paso a pasito" en torno al expediente Fobaproa. El miércoles, los coordinadores parlamentarios en San Lázaro acordaron hacer público el contenido del disco compacto resultante de la auditoría de Michael Mackey, efectuada hace poco más de dos años.
HASTA AHI LAS cosas no pintaban mal. Pero una vez tomado el acuerdo, surgió uno nuevo: "la decisión definitiva respecto del procedimiento será tomada en dos semanas más". En el documento respectivo se establece que "la Junta de Coordinación Política determina que el acceso por parte de los miembros del Congreso a la información contenida en el disco compacto, relativa a la lista completa de las operaciones clasificadas por el auditor Michael Mackey como reportables en la ejecución del Programa para la evaluación integral de las operaciones del Fobaproa en el saneamiento de las instituciones financieras de México 1995-1998, no constituye violación al secreto bancario y es del interés de los integrantes del Congreso de la Unión". Por ello, cada partido político representado en San Lázaro obtendrá una copia del mencionado disco compacto, "para los efectos a que haya lugar".
LENTOS, PERO SEGUROS, los legisladores sustentaron su decisión en el hecho de que "toda vez que el gobierno federal destinó recursos fiscales cuantiosos al rescate financiero, el acceso a la información relativa a los créditos reportables no debe estar sujeta al sigilo ni puede ser restringida a legislador alguno, en virtud de que los diputados, al tener las más amplias facultades constitucionales para revisar la cuenta pública y ser representantes de la nación, tienen el deber y el derecho de obtener cualquier tipo de información relativa al destino que se le diera a los recursos públicos empleados como consecuencia de la crisis bancaria".
TODO BIEN, aunque surgió otro pero: el IPAB y otras autoridades competentes "serán las encargadas de investigar la ilegalidad o ilicitud de las operaciones y proceder en consecuencia a ejercitar las acciones legales a que haya lugar para fincar las responsabilidades jurídicas y económicas que en su caso procedan, correspondiéndole, en todo caso, al Ministerio Público y al Poder Judicial Federal, perseguir y determinar respectivamente, si existiesen actos u omisiones delictivas que sancionar". Así es, la Iglesia en manos de Lutero.
LOS "OPTIMISTAS" PODRIAN argumentar que si la ciudadanía ha aguantado alrededor de dos años para conocer el uso de los recursos públicos destinados al "rescate" bancario y la apertura total del expediente Fobaproa, entonces, qué más da esperar otras dos semanitas.
QUIEN NO SE ha mostrado "optimista" ha sido el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Alan Greenspan. En su informe bianual a la Cámara de Representantes, advirtió que el debilitamiento de la economía de su país no ha concluido y que, de hecho, no se vislumbra mejoría por lo menos en lo que resta del 2001. Y advirtió que las economías de los socios comerciales clave de Estados Unidos en Europa, Asia y América Latina se han debilitado recientemente: "esto ha complicado los esfuerzos para mantener la expansión; la interacción de desaceleraciones en varios países ha magnificado simultáneamente el debilitamiento que cada una de las economías individuales hubiera experimentado por sí misma", dijo a su voluminoso auditorio internacional.
MIENTRAS QUE EN Estados Unidos el dueño del circo advertía sobre los riesgos y la continuidad de la desaceleración, en México el secretario de Economía, Luis Ernesto Derbez, salió a contar chistes: la economía nacional ya llegó al "punto más bajo" en cuanto a desaceleración; a finales de 2001, nuestro país presentará un repunte basado en la generación de plazas laborales, con motivo de la temporada navideña y el comienzo del proceso de recuperación en el mercado estadunidense; "no se puede hablar" de una crisis económica en México; las industria manufacturera y el sector exportador han mostrado un impacto negativo en sus operaciones, pero la situación no se ha generalizado; el "modelo económico" del gobierno foxista, permite conservar la estabilidad ante la crisis financiera por la que pasa Argentina y "nos ha hecho independientes del factor externo". Contó más chistes, pero ya son conocidos.
Las rebanadas del pastel:
FUENTES GENERALMENTE bien informadas señalan que en Morelos hubo cambio de gobernador, pero todo indica que no de actitud. Cuando Jorge Carrillo Olea era el mandamás en la tierra de mi general Zapata, se aferró (šy cómo le fue!) a la construcción de un club de golf privado en Tepoztlán, argumentando que los morelenses necesitaban inversión y empleo, aunque éste fuera de jardinero... Ahora el autodenominado gobernador del cambio, Sergio Estrada Cajigal, sostiene que Morelos necesita la inversión (30 millones de dólares) y el empleo que generará la empresa Costco, mediante la construcción y puesta en marcha de un centro comercial exclusivo para socios, en lo que fue el Casino de la Selva, aunque para ello se destruya parte del acervo cultural del estado y, desde luego, del país. Viva el cambio.
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