JUEVES Ť 19 Ť JULIO Ť 2001
Ť La empresa habría cometido negligencia en la aplicación de la ley ambiental
Investigará la CCAN a Metales y Derivados
Ť El organismo dijo que hará públicos los documentos secretos de ese y otros casos
ANGELICA ENCIS0 L.
Pese a la petición que hizo la entonces Semarnap a la Comisión de Cooperación Ambiental de América del Norte (CCAAN) para considerar improcedente la solicitud de investigación a la empresa Metales y Derivados, el organismo decidió establecer un expediente de hechos y dar a conocer los documentos del caso.
Ciudadanos de Tijuana solicitaron a la comisión indagar a dicha firma por presunta negligencia en la aplicación de la ley ambiental.
Por ello, la CCAAN acordó hacer públicos otros documentos secretos sobre solicitudes ciudadanas de investigación, entre las que se cuenta la petición de Aquanova, en la cual habría violación a la normatividad en el establecimiento de una granja camaronícola en San Blas. También, las peticiones relacionadas con Estados Unidos sobre Aves Migratorias y con Canadá sobre la Ley de Pesca.
Además, la Coalición de Salud Ambiental de San Diego, California, promueve la extradición a México del dueño de Metales y Derivados, José Kahn, quien durante 20 años recicló baterías de automóvil en la planta localizada en Tijuana y dejó abandonadas miles de toneladas de residuos peligrosos con riesgo para la salud de la población y al medio ambiente de la región, informó un despacho de AFP. El martes alrededor de 75 residentes de esa colonia fueron a protestar a las puertas de la empresa New Frontera, propiedad también de Kahn.
En las instalaciones de la empresa, ubicada en la colonia Chilpancingo en medio de una zona popular de esa ciudad fronteriza, quedaron alrededor de 6 mil toneladas de escorias de plomo, ácido sulfúrico y metales pesados como arsénico, cadmio y cobre provenientes de las operaciones de reciclaje de los acumuladores.
Metales y Derivados, empresa de origen estadunidense, fue clausurada en 1998 por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y los peticionarios recurrieron a la CCAAN, pues aseguraron que no se aplicaron la legislación ambiental mexicana y el Acuerdo de la Paz, leyes que establecen la obligatoriedad de regresar a Estados Unidos los residuos peligrosos.
En la petición de Environmental Health Coalition, el comité ciudadano Pro Restauración del Cañón del Padre y Servicios Comunitarios se argumenta que México no aplicó "sus leyes ambientales por su incapacidad o falta de voluntad para proseguir con los procesos penales iniciados en contra del propietario para lograr su extradición formal".
La respuesta que la Semarnap envió a la CCAAN el 31 de mayo de 1999, que había sido confidencial hasta hace unos días, establece que comparte la preocupación de los peticionarios, pues la situación ambiental es grave, pero que las autoridades nunca cesaron de buscar una solución a la problemática que originó la empresa, aun cuando la situación no se ha resuelto.
Resalta también que en 1993 la Profepa presentó ante la Procuraduría General de la República una denuncia penal formal contra los propietarios y operadores de las empresas Metales y Derivados. En 1995 un juez federal dictó órdenes de arresto en contra de José Kahn, pero huyó a Estados Unidos para evitar la acción judicial, y hasta el momento las autoridades mexicanas no han podido enjuiciarlo.
La dependencia estimó infundada la solicitud de los peticionarios al secretariado para que preparara un informe de evaluación de este caso, porque no hubo omisiones por parte de las autoridades para aplicar la legislación ambiental ni tampoco se apartaron de la aplicación de las leyes.