Ť La cancillería de la isla presentó un informe a la ONU para su análisis

Pérdidas por casi 2 mil mdd provocó el bloqueo el año pasado, denuncia el gobierno cubano

Ť La Habana insistirá en una condena al embargo en la próxima asamblea del organismo

Ť La Comisión Europea, satisfecha con el aplazamiento del capítulo III de la Helms-Burton

AFP Y AP

La Habana, 17 de julio. El bloqueo estadunidense contra Cuba provocó en el año 2000 pérdidas por más de mil 900 millones de dólares, de acuerdo con un informe que la cancillería cubana entregó el lunes al secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Kofi Annan.

El documento, de 30 hojas, denuncia además que "la política agresiva contra nuestro país se ha recrudecido desde el 20 de enero" pasado, cuando George W. Bush asumió el poder y cuya "administración ha hecho de la retórica anticubana y de los compromisos asumidos con la mafia anexionista con sede en Miami (los anticastristas) el fundamento de sus acciones contra Cuba".

El texto, al que tuvo acceso Afp, servirá como referencia en la próxima Asamblea General de la ONU en noviembre próximo, en la que La Habana exigirá, una vez más, la condena internacional al bloqueo que Washington impuso a La Habana hace casi cuatro décadas.

De acuerdo con el reporte oficial, sólo en el año 2000 Cuba pagó 38 millones de dólares más para comprar alimentos como consecuencia de "las diferencias de precios ocasionadas por tener que recurrir a mercados afirmativos". Además "los costos de financiamientos que cubren alrededor de 63 por ciento de las importaciones de alimentos realizadas demandaron erogaciones superiores a los 50 millones de dólares, cuando en condiciones normales no debieron superar los 19 millones de dólares".

En el rubro avícola el costo directo del embargo fue de 59.6 millones de dólares y la industria azucarera perdió 155 millones de dólares, a los que se suman otros 17 millones por ventas que no pudieron realizarse. En el sector marítimo perdió 12 millones de dólares en importaciones y 1.8 millones en exportaciones por concepto de gastos extraordinarios de fletes, y en la industria petrolera la nación caribeña debió gastar 332 millones de dólares por no poder comprar en Estados Unidos los insumos necesarios, y otros 116.2 millones de dólares al aumentar su capacidad de almacenamiento debido a que sus proveedores se encuentran demasiado lejos.

También el sector turístico se vio afectado el año pasado debido a que el bloqueo impide a los estadunidenses viajar a la isla. De acuerdo con estimaciones oficiales, Cuba recibiría 900 millones de dólares anuales tan sólo por recibir turistas estadunidenses.

El rubro del tabaco, afectado en 51 millones de dólares anuales

Otro rubro afectado es el del tabaco, ya que al no vender a Estados Unidos se pierden 51 millones de dólares anuales por la venta de habanos y 18.7 millones por la exportación de tabaco en rama.

En otro informe la empresa estatal Tabacuba señaló que la producción de puros es de 80 millones de unidades en lo que va del año. El año pasado Cuba obtuvo 150 millones de dólares por la venta de este producto en el mercado internacional, y este año se espera recibir entre 250 y 280 millones de dólares.

Bush suspendió ayer por seis meses más el capítulo III de la polémica ley Helms-Burton, sancionada en 1996 y que pretende nternacionalizar el bloqueo. Ese apartado permitiría a estadunidenses y cubanos naturalizados estadunidenses presentar demandas judiciales contra las empresas extranjeras que operan en Cuba con bienes expropiados al triunfo de la revolución en 1959, y que afectaría especialmente a empresas de Europa y Canadá.

La Comisión Europea recibió con agrado la decisión de Bush y subrayó que el objetivo de la Unión Europea "sigue siendo el mismo: anular esta legislación (la Helms-Burton) extraterritorial y unilateral".

El gobernador de Florida, Jeb Bush, aseguró que su hermano mantendrá su oposición a la represión en Cuba y no descartó que en un futuro George W. Bush decida aplicar la totalidad de la ley Helms-Burton, al iniciar una visita oficial a Chile, en la cual el mandatario estatal pretende fomentar la relación económica y social entre la ciudad que gobierna y el país andino.