MARTES Ť 17 Ť JULIO Ť 2001
Ť Autoridades y ONG verificarán autenticidad de reportes, adelanta Enrique Ruelas
Probará la Ssa plan estadístico para mejorar calidad
CAROLINA GOMEZ MENA /II Y ULTIMA
La rendición de cuentas de las acciones que desarrolle la Secretaría de Salud (Ssa) tiene como objetivos principales ser un medio para mejorar la toma de decisiones y con ello aumentar la calidad, identificar nuevos retos y sobre todo mantener informada a la ciudadanía y al Congreso de la Unión.
Es por ello que en octubre próximo la Ssa emprenderá un proyecto piloto en seis hospitales de la dependencia, en los que se comenzará con el desarrollo del sistema de grupos relacionados por el diagnóstico (GRD), un instrumento estadístico estadunidense que permite generar indicadores de calidad, informó Enrique Ruelas Barajas, subsecretario de Innovación y Calidad de la Ssa, quien dijo desconocer el monto de la partida que costeará esta prueba.
En entrevista con La Jornada, el funcionario adelantó que, a fin de que las cifras que arrojen estos indicadores sean creídas por la ciudadanía, además de la presentación de informes periódicos de los logros ante la Asamblea Nacional de Salud, el Poder Legislativo y el Consejo de Salubridad General -órgano dependiente de la Presidencia de la República- serán las instituciones académicas (universidades, por ejemplo) y las organizaciones sociales, como las ONG especializadas en la materia y con "autoridad moral" las que comprueben "si en efecto el resultado (reportado por la Ssa) es cierto".
Incluso en el Programa Nacional de Salud (PNS) 2001-2006 se establece textualmente que "los medios masivos de comunicación recibirán información sobre el sistema nacional de salud a libre demanda y únicamente con las restricciones que implican la protección de la confidencialidad de los usuarios y el respeto de la vida privada".
Para monitorear los datos se llevarán a cabo encuestas de opinión periódicas entre los usuarios de los servicios "con la intención de atender mejor las inquietudes", y los resultados de estos sondeos "se difundirán de manera masiva por los medios impresos y electrónicos".
Según Ruelas Barajas, la finalidad es crear un sistema nacional de indicadores "confiable y efectivo", puesto que la experiencia mundial ha demostrado la existencia de estos esquemas de medición, que además de evidenciar los eventuales errores u omisiones, "tienden a evitar el desperdicio de recursos, debido a que tienden a producir ahorros en la producción de los servicios".
A razón de esto, el ISSSTE -el IMSS desde hace casi tres años lo practica- empezará el próximo año a desarrollar su sistema de GRD. En el caso del Sistema Nacional de Salud "tomará aproximadamente dos años" instaurarlo, debido a que el proceso es lento, citó Ruelas Barajas.
En un futuro la aplicación de mediciones continuas al sector público -también se espera que los hospitales privados generen su sistema de GRD- y su consecuente publicación -auguró el subsecretario- permitirán que la promesa del presidente Vicente Fox acerca de que cada mexicano podrá elegir a su médico se haga realidad, pues la población usuaria con indicadores en mano podrá optar por las clínicas y hospitales que le garanticen con números que su atención es de calidad.
Pero esto "no será en el corto plazo", porque además de que los GRD toman tiempo, "desquiciaríamos el sistema". Por tanto, "estamos construyendo las bases para que empiece a funcionar esto de una manera más racional" y, luego descartar la posible ocurrencia de aglomeraciones en ciertos nosocomios con altos índices de calidad.
El funcionario señaló: "Es lo mismo que ocurre en cualquier mercado donde los servicios tienden a autorregularse y la demanda también. Si usted conoce un restaurante que es excelente, pero que siempre está lleno, a lo mejor un día se atreve a hacer fila en otro que no es tan bueno, aunque el otro sea buenísimo...".
Sin embargo, esa regulación del mercado no es la que espera la Ssa -admitió-, sino más bien que "los niveles de calidad sean cada vez menos diferentes" entre los hospitales, para "que si usted escoge entre uno u otro la diferencia no sea tan grande".
Y para que las diferencias de calidad disminuyan, la Ssa tiene puestas sus esperanzas en tres elementos: que la competencia y la comparación pública en cualquier ámbito desarrolla en el ser humano la superación; estímulos financieros para el personal de los nosocomios con altas graduaciones, y los ascensos, que también se traducirían en mayores percepciones económicas.
En torno a este último punto en el PNS se establece que "diseñar y promover un servicio civil de carrera en el sector salud permitiría mejorar de manera continua y racional las habilidades de los profesionales de la salud que trabajan en el sector público". Por lo tanto se prevé "instaurar un sistema de incentivos que garantice un adecuado nivel de remuneración y un máximo de satisfacción de estos profesionales con su entorno laboral", de ahí que se pretenda diseñar "un sistema racional de promociones".
Ruelas afirmó que "hay una línea de acción en la cruzada nacional por la calidad de los servicios de salud que está enfocada a desarrollar sistemas de recompensa al desempeño, y esta es una pieza vital, porque así (los empleados del sector) perciben que su esfuerzo se premia".
Un primer estímulo, aunque no monetario, es que ahora en las reuniones del Consejo Nacional de Salud "se está dando más atención a quienes tienen mejor desempeño en la cruzada", concluyó.