LUNES Ť 16 Ť JULIO Ť 2001
Crearán la Guardia guadalupana
Un cuerpo policiaco de elite vigilará la basílica y las inmediaciones del Tepeyac
RAUL LLANOS SAMANIEGO
En 30 días más estará operando en la Basílica de Guadalupe un grupo policiaco especial denominado Guardia guadalupana, el cual será adiestrado por la Policía Federal Preventiva (PFP) para resguardar el atrio, las riquezas del museo guadalupano -que alberga vastas obras de arte sacro-, el cerro del Tepeyac y, en general, la seguridad de millones de católicos que acuden cada año al mayor templo mariano de América Latina. Incluso habrá algunas áreas donde estos elementos podrán estar armados.
Serán unos 300 miembros de la Policía Bancaria e Industrial (PBI) quienes formarán este nuevo grupo, que estará de manera permanente en la Basílica de Guadalupe. Su uniforme será el mismo, pero habrá de identificarlos un escudo, un distintivo especial como integrantes de la guardia del Tepeyac.
Este cuerpo habrá de constituirse como un "grupo de elite de reacción inmediata para alguna contingencia en el propio templo", expresó el subsecretario de Gobierno del Distrito Federal, Francisco Garduño Yáñez, quien precisó que estos policías deberán "combatir el ambulantaje y someter a la prostitución y a la delincuencia".
De hecho, la Guardia guadalupana va a estar bajo coordinación de la Secretaría de Seguridad Pública Federal y del Gobierno del Distrito Federal, instancias que, junto con la máxima jerarquía católica del país, no sólo crearon este grupo especial, sino que aportaron los recursos necesarios para su funcionamiento.
Se tiene un presupuesto de 18 millones de pesos para la operación de esta guardia, de los cuales 8 millones los aportó la Federación, 4 millones la administración del DF y poco más de 6 millones el cardenal Norberto Rivera Carrera.
Saldrá la PFP
Actualmente a la Basílica de Guadalupe y la zona del Puente del Peregrino están asignados unos 800 elementos de la Policía Federal Preventiva y de la Secretaría de Seguridad Pública de esta capital, a quienes se suman agentes de seguridad de la delegación Gustavo A. Madero, así como del Ministerio Público y socorristas del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM).
A ellos correspondió recibir a una peregrinación de Querétaro, cuyos integrantes empezaron a llegar desde el pasado viernes y sólo hasta ayer arribaron los últimos de de un contingente aproximado de 140 mil católicos. Los integrantes de la PFP fueron apenas asignados a la vigilancia de la zona al ponerse en marcha el operativo para la recepción de esas personas, y el martes, una vez que termine el acto religioso, habrán de retirarse.
Frente a esta situación, el subsecretario de Gobierno capitalino comentó que los policías que habrán de formar parte de la Guardia guadalupana serán capacitados en los próximos días para que en un plazo no mayor de 30 días estén ya actuando de manera permanente en la Basílica de Guadalupe, "para que antes los festejos de octubre esté limpio el atrio".
Entrevistado luego de la reunión de los gabinetes de Gobierno y Seguridad Pública, el funcionario comentó que se tendrá un cuidado especial en la operación de esa guardia, de manera que no sean sorprendidos por nadie para que entren en colusión con ningún grupo de interés, fundamentalmente con los vendedores ambulantes.
Garduño Yáñez reconoció que son dos los problemas principales que se dan con mayor frecuencia en la Villa de Guadalupe: uno es el robo a transeúntes y el otro es el ambulantaje. De hecho, puntualizó, hay un programa oficial para retirar a los comerciantes de vía pública, pero siempre deben estar lidiando con los toreros.
-Además del ambulantaje, Ƒse combatirá la prostitución alrededor de la basílica?
-Sí, todos los problemas que actualmente se están dando. En el caso de los ambulantes se contempla una segunda fase para reordenarlos. Esperamos tener la comprensión aquellos que quieran someterse a un programa de reordenamiento y los que no, pues lo sentimos mucho... No es posible poner en riesgo la seguridad de miles de peregrinos, pues hay vendedores que a tres metros del templo guadalupano ponen tanques de gas y están sirviendo garnachas y eso pone en riesgo la seguridad de los peregrinos.
Trescientos agentes especiales
De acuerdo con el subsecretario de Gobierno, la Guardia guadalupana, al ser policía complementaria, tiene derecho de portar armas. Sin embargo, precisó que esos serán aspectos que habrán de detallar los responsables de la SSP federal, en este caso Alejandro Gertz Manero, y las autoridades del gobierno capitalino.
Añadió que los 300 elementos que estarán permanentemente en la basílica habrán de recibir un adiestramiento especializado por parte de la PFP, de manera que tengan la capacidad para atender situaciones de resistencia de particulares, sometimiento de civiles o resistencia de conglomerados (grupos de ambulantes, por ejemplo).
-Es decir, estarán preparados para enfrentar posibles actos violentos o choques con ambulantes
-Sí, con los comerciantes (pero también) someter a la prostitución, a la delincuencia. Hay que desarrollar acciones preventivas para atenuar los delitos que se registran en la zona.
Finalmente expresó que el objetivo de esta acción de las autoridades locales, federales y de la Iglesia católica es garantizar la integridad de los miles de peregrinos que llegan a la basílica y que no sean extorsionados, robados y sean atendidos de mejor manera en su visita a uno de los mayores centros religiosos del país.