DOMINGO Ť 15 Ť JULIO Ť 2001
Ť Ecologistas de México, Canadá y EU presentarían una controversia constitucional
Rechazo a que se instale el aeropuerto en Texcoco
Ť La trayectoria de las aves migratorias no se puede modificar con letreros, dicen
TRIUNFO ELIZALDE
Más de 20 organizaciones ecologistas de México, Canadá y Estados Unidos advirtieron que en caso de que se decida construir el nuevo aeropuerto internacional en Texcoco, utilizarán todos los recursos legales para presentar una controversia constitucional ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, debido a que se estaría violando la ley general de vida silvestre y el acuerdo de Cooperación Ambiental de América el Norte.
Además, aseguraron que el proyecto del gobierno del estado de México "no cumple la normatividad ambiental vigente".
Uno integrante de uno de estos organismos, Carlos Alvarez Flores, dijo que el acuerdo de cooperación ambiental permite a los ciudadanos exigir el cumplimiento de la ley en materia ecológica en México, Estados Unidos y Canadá, ya que es una resolución de la Comisión de Colaboración Ambiental del Tratado de Libre Comercio.
Manifestó que el gobernador Arturo Montiel no conoce "ni la política ambiental ni la ley general de la vida silvestre en nuestro país, ni está tomando en cuenta que la trayectoria de aves migratorias no se puede modificar con letreros ni anuncios, como lo plantea al pretender crear nuevos cuerpos de agua en otros lugares en detrimento del hábitat natural del lago de Texcoco, el cual ha albergado desde hace miles de años aves procedentes de Norteamérica".
Otro ecologista, Eduardo Carrera González, indicó que el hombre no puede controlar el hábitat histórico y productivo de las especies migratorias, por lo que el solo anuncio de crear el aeropuerto en Texcoco causa alarma.
Los ecologistas de Estados Unidos y Canadá, presentes en la conferencia de prensa, apoyaron las posturas de sus compañeros mexicanos. También se dijo que sería inconveniente que se ampliara el actual aeropuerto, porque se desarrollaría sobre un terreno que presenta los mismos problemas que el ex vaso de Texcoco.
Criticaron también los gobiernos de Carlos Salinas y Ernesto Zedillo porque "no tuvieron el valor de afrontar el problema y lo dejaron latente".