Ť Transcurrió sin incidentes la marcha gay; organizadores calcularon 15 mil asistentes
La homofobia fue derrotada en la capital tapatía
Ť ¡Provida, no te metas en mi vida! y ¡no
más Santa Inquisición!, entre las consignas
JENARO VILLAMIL ENVIADO
Guadalajara, Jal., 14 de julio. Los malos augurios no se cumplieron. La homofobia sufrió hoy en las calles de la capital tapatía una significativa derrota, al realizarse por segundo año consecutivo la Marcha Lésbico-gay 2001, cuya asistencia los organizadores calcularon en poco más de 5 mil personas, mientras la policía registro 2 mil, sin ningún incidente de violencia y con una avenida Hidalgo abarrotada de poco más de 15 mil personas, entre jóvenes curiosos, familiares, amigos, niños y familias que observaban el derrotero de los contingentes, que gritaban "¡no que no!, ¡sí que sí!, ¡ya volvimos a salir!"
Con consignas como "¡soy gay y mis padres me aman!", o "¡Provida, no te metas en mi vida!" y el tradicional "¡banqueteras, únanse!" -en referencia a los observadores de las aceras-, la marcha de Guadalajara se convirtió en la segunda más numerosa de este año después de la realizada en la ciudad de México, la de Monterrey, a la que acudieron poco más de 500 personas y la Marcha del Silencio, en Mérida, con 300 asistentes.
Se rompió el veto de Provida y del ayuntamiento a los travestis y transexuales. Estos no sólo desfilaron en dos carros alegóricos y en una calandria, que transportaba a una sensual Lorena Herrera, sino que convivieron por primera vez con contingentes de heterosexuales amigos, afiliados a la intersindical democrática de la universidad y al tianguis cultural que aglutina a diversas organizaciones no gubernamentales. Los trasvestis concentraron la atención y los transgéneros estrenaban una nueva agrupación llamada Guadalajara en busca del paraíso.
Junto con las vestidas, estuvieron, por primera vez, los punks, y marcharon los integrantes de la Iglesia Metropolitana. El Club de Osos Tapatíos, formado por una decena de robustos gays varones, declaraba con orgullo su hombría y su homosexualidad, al tiempo que acompañaba a un personaje disfrazado con el traje conocido de los Ku Kux Klan. quien portaba un cartel que demandaba "No más Santa Inquisición".
Uno de los pocos momentos de tensión que se vivieron en la marcha fue al paso del Mercado Corona, ubicado unos metros antes del palacio municipal. Ana Buenrostro, activista sindical que marchó en apoyo de "todos mis amigos gays", recordó que en ese sitio el año pasado se registró un conato de pleito ante la agresión contra los trasvestis. Uno de los organizadores comentó que en este sitio es donde tradicionalmente "se esconden los miembros de Provida".
El maestro de ceremonias, Rodolfo Contreras, destacó la participación de contingentes de Chiapas, Monterrey y Sinaloa. "Lesbianas y homosexuales estamos en todos lados -arengaba Contreras-. Estamos en el PRI, en el PAN, en el PRD y ¿por qué no? Hasta en Provida. Así que únanse a nosotros".
La diputada local capitalina Enoé Uranga destacó en su intervención que "nadie que aspira a la democracia puede evitar la diversidad sexual. La inclusión y el respeto es la única realidad posible para vivir en armonía".
La primera legisladora abiertamente lesbiana subrayó que el voto de la comunidad gay es una realidad. Paulina Millán lanzó, provocadora, la pregunta desde el micrófono: "¿por qué no podemos tener nosotros una presidenta municipal lesbiana o, por qué no, una presidenta lesbiana?"
Piden frenar crímenes contra homosexuales
Armando Díaz, del Grupo Diversidad Sexual, propuso declarar esta marcha como un camino hacia el respeto para "todos aquellos que nos criticaron". A su vez, Rodolfo Ruiz, dirigente de Checcos, organización de atención a personas que viven con VIH, exigió que los grupos fundamentalistas dejen de agredir a la población homosexual.
Subrayó que no se cuenta con cifras exactas sobre los crímenes de homofobia ocurridos en Jalisco en los últimos cinco años, pero consideró que "desgraciadamente, éstos siempre se disfrazan como crímenes entre narcos o delincuentes".
La representante de Platatonalli, Ana Isabel, destacó que esta organización cumplió 15 años de existencia en la entidad, y convocó a que se sumen los bisexuales a las próximas marchas.
Los contingentes de jóvenes lesbianas eran los más aguerridos durante el recorrido que atravesó la avenida Chapultepec y la calle de Hidalgo. Gritaban: "¡ser gay, ser gay, ser gay es un gran placer!, el odio es para los machos, pa' la gente que no anda bien!" o, "¡plancha, plancha, plancha, no dejes de planchar, con una mujer lesbiana, lo vas a disfrutar!".
Las alusiones a Provida fueron escasas, pero cada vez que se pronunciaba el nombre de esta organización de ultraderecha, se escuchaban fuertes chiflidos entre los participantes y los miles de curiosos. Una señora no se aguantó y, molesta, le gritó a la calandria de los trasvestis: "a ese caballo ya lo hicieron gay". "¿De quién habla? -ironizó un participante-: ¿Del cardenal?".
Los temores de los comerciantes establecidos no surtieron ningún efecto. Días antes demandaron al ayuntamiento que prohibiera la marcha porque sus ventas podían bajar hasta en un 50 por ciento. Todos comentaban que, en realidad, los comerciantes hoy habían hecho su agosto.