Ť Podrá pactar con otros partidos o con el Presidente
Autorizan a dirigencia del PRD a realizar acuerdos políticos
Ť Votaron sólo 100 de 303 consejeros Ť Raymundo Cárdenas se destapó como candidato para la presidencia del sol azteca
ENRIQUE MENDEZ
El Consejo Nacional del PRD autorizó ayer a la
dirigencia -con el voto de apenas 67 de los 303 consejeros- para realizar
"acuerdos políticos múltiples" con otros partidos, e incluso
con el presidente Vicente Fox. Sin embargo, el debate político en
el consejo fue rebasado por las discusiones paralelas de las corrientes
que continúan en la disputa por el liderazgo del partido.
Por ejemplo, este sábado la corriente que encabeza
la presidenta del PRD, Amalia García Medina, y la que coordinan
el senador Jesús Ortega y el secretario general, Jesús Zambrano,
acordaron convocar a una reunión entre ambos grupos para constituir
una "nueva expresión" interna, que además postulará
un solo candidato a la presidencia perredista.
El cónclave entre chuchos y amalios está previsto para agosto próximo, después de que se realicen las elecciones extraordinarias para gobernador de Tabasco, y una vez que hayan avanzado las negociaciones con los mandatarios perredistas, a quienes ambas corrientes se refieren como Los coroneles.
Ayer, el senador Raymundo Cárdenas afirmó que él y nadie más debe ser el candidato de ambos grupos unificados, y advirtió que si no hay un acuerdo entre los dirigentes, él "de todos modos" se presentará por su cuenta al proceso interno de marzo de 2002.
Durante el sexto Congreso Nacional de Zacatecas, Raymundo Cárdenas se presentó como primer aspirante de los amalios -que el ex secretario de Gobierno de ese estado prefiere llamar reforma radical o foristas-- a la dirigencia del partido, con el "apoyo" de distintos delegados.
Sin embargo, durante el consejo de ayer, el diputado federal Silvano Aureoles Conejo se destapó también como aspirante de los amalios, con el respaldo de la propia dirigente del PRD y de la estructura del partido.
Este nuevo destape generó una controversia interna en la corriente amalista, pues durante el receso del consejo, un ala se reunió a comer en el hotel donde se realizan las sesiones de trabajo, y ahí se designó a la secretaria de Asuntos Electorales del CEN, Martha Dalia Gastélum, como coordinadora de la campaña de Raymundo Cárdenas.
Además, se cuestionó el autodestape de Aureoles Conejo, y criticaron el "oportunismo de que surjan otros precandidatos dentro de la corriente, porque ello debilita la expresión y el liderazgo de Amalia".
El legislador federal por Michoacán había convocado a un grupo de reporteros para expresar su interés en registrarse como candidato a la presidencia del partido, y presentó un discurso de "relevo generacional".
Con esa carta, Aureoles Conejo afirmó que en el PRD ya no caben los llamados "liderazgos morales", y que los viejos dirigentes del partido deben entender que ya cumplieron con su labor en la transición, pero deben dejar paso a las nuevas generaciones de políticos. "Hay que sacudir la capa de los liderazgos", sostuvo.
El partido, afirmó, tiene que cambiar de discurso
y hacerlo menos radical. "No tenemos que decir no a todo, como aquellos
que cuando nos llegó la iniciativa de reforma fiscal, salieron y
dijeron: ¡hay que enviarla al archivo de la ignominia!".
-¿Martí? -se le preguntó para precisar
si se refería al coordinador de los diputados del partido.
-Martí.
Aureoles Conejo no sólo cuestionó esa respuesta de Martí Batres Guadarrama a la iniciativa fiscal de Fox, sino que también deslizó que más que coordinar a los diputados perredistas, "le quedaría mejor el papel" de cuidar niños. Auroles se refería al hecho de que ayer Batres llevó a su hija a la sesión del consejo.
La unificación, pronto
Mientras, Raymundo Cárdenas confirmó que entre chuchos y amalios se convocará "pronto" a una reunión para iniciar una consulta entre ambos grupos que permita constituir un solo frente para competir por la dirigencia del partido.
"Lo más seguro es que vayamos juntos" a la elección de marzo de 2002, dijo. Para él, es una decisión que las dos corrientes debieron haber asumido "desde hace mucho tiempo", esto es, en 1995, cuando constituyeron la denominada corriente Arcoiris, que surgió durante el tercer Congreso Nacional.
Durante el debate, recordó, surgió una propuesta de transición pactada con el entonces presidente Ernesto Zedillo, mientras que Cuauhtémoc Cárdenas defendió la constitución de un gobierno de salvación. Finalmente ganó la primera propuesta, y de ahí surgió la participación del PRD en las negociaciones para la reforma electoral de 1996.
"En ese año debimos ir juntos, pero hubo tres candidatos: Heberto, Amalia y Jesús, quien finalmente declinó. Las dos expresiones siempre hemos coincidido en la línea ideológica, y nada se ha concretado por los desencuentros", dijo el senador.
Para Raymundo Cárdenas, más que una elección con voto directo y secreto ?imposible porque si el CEN no cuenta con un padrón de militantes, las corrientes no lo tienen de simpatizantes?, los dos grupos debieran negociar quién sería el candidato común. "Podemos llegar a un acuerdo, como cuando postulamos a Amalia", expresó.
-Pero tú eres el candidato de Amalia...
-Yo no he dicho que soy el candidato de Amalia ?cortó?, y a mí me ayuda que otros compañeros digan que sí lo son.
-¿Y si no hay acuerdo, y el abanderado es otro, alguien de los chuchos, por ejemplo?
-¡Yo voy de todos modos! Porque eso implicaría que no hay acuerdo, y si no nos ponemos de acuerdo, pues no y ya, pero yo voy. ¡Yo voy!
Debate con fantasmas
Mientras, en el segundo día del Consejo Nacional, que hoy concluye, el debate principal se centró en si el PRD debía o no suscribir el pacto al que convocó el presidente Vicente Fox Quesada el 2 de julio.
El vocero del partido, Carlos Navarrete, afirmó que nadie en la dirigencia ha planteado un "cogobierno con Fox, ni para salvar la imagen del Presidente por sus escándalos o para lavarle la cara. Aquí se maneja que estamos a favor para ver qué nos entrega a cambio de aprobarle el IVA. Pero nadie en el PRD está planteando un cambalache o un acuerdo grosero. Eso no va ocurrir con un Presidente que hace de todo, hasta bodas, para tratar de mejorar su imagen deteriorada".
Así es que, resumió, dejemos de seguir discutiendo con fantasmas.
El secretario de Asuntos Agropecuarios del CEN, José Antonio Rueda, descalificó el documento que el viernes presentó Amalia García, en el que se proponía realizar acuerdos con el gobierno, y afirmó que "el pactito es para las cúpulas, no para la sociedad".
Una de las consejeras le preguntó por qué, si el documento había sido aprobado por el CEN, ayer lo descalificaba. Rueda respondió que él no participó en el debate previo para consensuar el texto, porque estuvo ocupado en una reunión con productores de piña a los que abandonó el sector campesino del PRI.
El coordinador de los diputados en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, Armando Quintero, calificó de intolerante el tono usado por la dirigencia, cuestionó que el documento omitía "la caracterización del gobierno de Fox", y calificó de "inaudita" esa laguna, cuando el partido debía ocuparse no sólo de los acuerdos con el gobierno, sino también de señalar los errores y los conflictos generados en esta administración, como la crisis de productores de maíz en Sinaloa.
Poco antes de las dos de la tarde, el presidente del consejo, Javier Hidalgo, sometió a votación el documento, y como sólo acudieron 100 de los 303 consejeros, el CEN y las corrientes afines ganaron con 67 votos contra 33 de los consejeros "antidialoguistas".
La víspera, este sector del PRD había insistido en que el partido no debía dialogar con la administración foxista, y Gerardo Fernández Noroña afirmó que en el perredismo no había más que dos caminos irreductibles con el gobierno: la confrontación o el colaboracionismo.
Jesús Zambrano respondió que si en efecto había dos posiciones irreductibles, entonces en el PRD "ya no cabemos dos expresiones", y que si así era, la corriente que gane las elecciones internas de marzo de 2002 bien podría "mandar al diablo" al otro grupo.
Asimismo, el CEN acordó anoche realizar una magna concentración en el Zócalo capitalino en rechazo a la aprobación de las reformas constitucionales en materia de derechos y cultura indígenas, y presentar una controversia constitucional, para que los cambios no entren en vigor.
Por la noche, Amalia García convocó a los candidatos del partido a cuidar más el perfil de sus campañas y ocuparse menos de hacerse promoción en los medios, y ejemplificó con el caso del llamado Rey del Tomate, que será alcalde de Jerez, Zacatecas. "Esos ?reconoció? no son los perfiles para el PRD".