Ť La obra de Tepito Arte Acá se presenta en el Jiménez Rueda

Noche de guerreros y chamanes, unión de la cultura popular con la indígena

ARTURO CRUZ BARCENAS

Tepito Arte Acá llevó a sus obras de teatro a más de 40 mil jóvenes de 16 a 19 años, durante 2000. Ahora espera seguir en esa línea -iniciada en 1981- con la puesta en escena de Noche de guerreros y chamanes, de Virgilio Carrillo y Susana Meza, con la dirección del primero, que se presenta desde ayer en el teatro Julio Jiménez Rueda.

Noche de guerreros... tiene los ingredientes de las obras de Tepito Arte Acá: groserías, escenas de desmadre, muchachas jóvenes de carne fresca que se contonean levantando el ánimo hasta a los de espíritu gélido. Greñudos y vagos que sólo buscan tirarse a las susodichas.

Los ensayos fueron arduos y meticulosos. Luces bajan, luces suben. Son unos profesionales y por eso ahora cuentan con el apoyo del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, por medio del Instituto Nacional de Bellas Artes. Hacen teatro para públicos no atendidos. "¿Que a quiénes no se atiende? ¡Pues a casi todos!", comenta Virgilio, cuya cabellera recuerda a aquel futbolista que llamaban El León de la Metro, Leonardo Cuéllar.

Entre tostadas de frijol, con su respectiva crema y rajas de jitomate, más unos tragos de chesco, los actores ensayaron. "¡Echale ganas! Así cómo vas a llegar a ser estrella", decían unos a las otras. La escenografía es austera y para reforzar el futurismo hay que imaginar a Neza, a Mi- ne-zo-ta, dentro de 50 años. ¿Qué será eso? Aparece un gay que más bien parece un Cepillín de colores. También el típico macho supertestosterona. Histiamina pura de la cintura para abajo. Tambos de los que usan las familias pobres para almacenar agua en Iztapalapa o en La Mancha, en el estado de México. Defensas de autos cuelgan. Son lo que queda de lo que un día fue moderno.

Sin buscar el realismo

Virgilio habla rapidísimo, lo cual refiere su lucidez: "Yo comencé haciendo teatro en las escuelas, en Tepito, y en las vecindades. No somos una organización monolítica ni cerrada. En Noche de guerreros... unimos la cultura popular urbana con la cultura popular indígena. Se trata de recobrar el origen y el destino de ambas culturas".

?¿Qué hay del realismo dentro del teatro?

?En Tepito Arte Acá no estamos por un realismo, pero sí por una función metafórica de lo que es la cultura. Creemos que estamos formando un público para el futuro, que se divierte. Nos ven y siguen; siendo netamente populares, nos entienden.

?En el barrio se dicen groserías, como va...

?Nos gusta decir las palabras altisonantes, nos gusta cómo suenan y su significación en el escenario.

Tepito Arte Acá ha llevado sus obras "de Tijuana a Yucatán, tanto en grandes teatros como en zonas no atendidas, como las marginadas. El teatro es popular en el grado que tú quieras, si buscas lenguajes. No podemos competir, claro, con los recursos económicos de empresas como Ocesa, y nuestro público es más específico. Ocesa es una gran productora que solamente mediatiza. Son los mismos montajes hollywwoodenses traídos a México".

?¿Seguirán con su propuesta y en underground?

?Somos consecuentes y sabemos que venimos de los barrios. Respecto del teatro, estamos haciendo un punto de vista. Aquí te diviertes. El teatro me ha dejado un gran rencuentro con la realidad. Cada día hacemos las cosas con mejor juicio. ¿Eh? ¿Dinero? Lo suficiente para vivir, solamente eso.

Noche de guerreros y chamanes. Teatro Julio Jiménez Rueda, sito en Plaza de la República 154, colonia Tabacalera, cerca del Monumento a la Revolución. Boleto: 100 pesos. Funciones: jueves y viernes, 20:30: sábados, 19, y domingo, 18 horas.