SABADO Ť 14 Ť JULIO Ť 2001
Ť Es la última oportunidad para la paz: Blair y Ahern
Se reanudaron en Birmingham las negociaciones para Irlanda del Norte
REUTERS, AFP Y DPA
Weston Park, 13 de julio. Las pláticas de paz entre los partidos enfrentados en el Ulster se reanudaron hoy en la ciudad inglesa de Birmingham, luego de violentos disturbios de la noche anterior en Belfast que dejaron heridos a más de un centenar de policías.
Previamente los primeros ministros de Gran Bretaña e Irlanda, Tony Blair y Bertie Ahern, que se concentraban en el castillo de Weston Park desde varias horas antes, de-clararon que ésta es la última oportunidad de revivir el proceso de paz.
Blair también calificó de "totalmente inaceptable" la violencia en la capital norirlandesa mientras la policía intentaba proteger a un centenar de militantes protestante de la Orden de Orange que regresaban de su tradicional marcha del 12 de julio.
Durante la noche del jueves al viernes unos 200 jóvenes católicos consiguieron romper las vallas colocadas para garantizar la seguridad a lo largo de la ruta por donde pasarían los orangistas. El resultado fue de 113 agentes heridos, luego de que los católicos lanzaron 260 cocteles molotov y de ácido contra la policía, que respondió con chorros de agua y balas de goma.
Poco antes de reanudarse las conversaciones, que concluyeron sin avance el miércoles pasado bajo la mediación de Blair y Ahern, un portavoz del gobierno británico dijo que el primer ministro no asistirá a las pláticas si no se produce un avance.
La nueva ronda de conversaciones fue convocada tras la dimisión, el primero de julio, del primer ministro norirlandés, el protestante David Trimble, en protesta por la negativa del Ejército Republicano Irlandés (ERI) de entregar sus armas.
Fuentes cercanas a las negociaciones di-jeron que un proyecto de acuerdo estaría siendo redactado por altos funcionarios de ambos gobiernos, que incluiría el desarme del ERI, la reforma de la policía (protestante en 96 por ciento) y el desmantelamiento de instalaciones militares británicas.
Los unionistas protestantes exigen que el ERI comience ya su desarme, pero los católicos lo condicionan a un acuerdo sobre la retirada de las tropas británicas y una reforma de la policía pro británica en la isla.
En voz del vocero, Blair dijo claramente a los partidos Unionista del Ulster -el principal protestante- y Sinn Fein, brazo político del ERI, que las próximas horas serían la última oportunidad para revivir el proceso.