LUNES Ť 9 Ť JULIO Ť 2001
Ť Forma parte del rescate del Centro Histórico
Realiza López Obrador visita privada a obra en la Alameda
Ť Demandan inversionistas subsidios y menor costo de la tierra
RICARDO OLAYO GUADARRAMA
La obra más avanzada de entre las que están en curso para la recuperación de la Alameda Central, el hotel Sheraton Centro Histórico, recibió una visita privada por parte del jefe de Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, quien considera la construcción como "importante" dentro del proceso de reactivación de las inversiones en la zona.
En el complejo, que ya levanta 105 metros de altura, el gobernante recibió dos solicitudes del dueño de la inmobiliaria Interpres, Siahoui Sitton: bajar el costo de la tierra para fomentar la inversión y continuar con los subsidios.
El inversionista planteó en entrevista que es necesaria la colaboración del gobierno federal para generar confianza y alentar inversión privada en la Alameda.
Con el apoyo de los gobiernos federal y capitalino, "el rescate será a corto plazo", comentó el inversionista al final del recorrido por la construcción.
López Obrador dijo por su parte que será en enero próximo cuando se inaugure el hotel, de 457 habitaciones. El gobernante realizó la visita antes de su reunión con el presidente Vicente Fox y ahí, en entrevista con este diario, se refirió a las obras del hotel como parte de un proyecto integral, y mencionó una coinversión del gobierno con el grupo canadiense Reichmann en la misma Alameda.
En este último caso dijo que el GDF participa con siete predios, y que el propósito es el rescate del "corazón de la ciudad y del país". Precisamente, López Obrador también visitó en privado hace dos meses las obras de la Torre Mayor en Reforma, construida mediante coinversión ICA-Reichmann International.
En du reciente visita al hotel Sheraton Centro Histórico, López Obrador subió hasta la cima, desde donde se dominan todos los puntos cardinales de la ciudad, visitó los cuartos muestra, estacionamiento y sótano, donde se ubican los pilotes que nivelan el inmueble en caso necesario.
La inversión efectuada para la construcción es cercana a los 60 millones de dólares, con capital ciento por ciento nacional, y opera bajo franquicia de la cadena Sheraton, que con esta sede, tendrá tres inmuebles en el Distrito Federal.
Los organizadores le anunciaron la inversión como la primera de importancia desde hace cuatro décadas y expusieron con detalle las características de las habitaciones y de los salones.
Los cuartos del hotel serán un poco mayores que, por ejemplo, los del Nikko. Se podrá elegir el color de la decoración entre cinco tonalidades y los televisores tendrán un tablero inalámbrico para navegar por Internet.
El Centro de Convenciones tendrá, según indicaron, la mayor capacidad de metros cuadrados, 6 mil, para albergar hasta 5 mil personas; el más grande de los salones es de 2 mil metros cuadrados.
En el nivel 24, que estará al aire libre, habrá una réplica a escala de la Alameda Central y un restaurante, y en otros pisos oyster bar, Spa, un mirador, "un carril de nado" y "adicionalmente se cuenta con nueve hoyos de Putting Green".
Sitton, presidente de la inmobiliaria Interpres, declaró que la inversión ya no es de Danhos, como originalmente la conoció el ex jefe de gobierno Cuauhtémoc Cárdenas, aunque ese grupo mantiene interés en la zona y tiene un proyecto en la contraesquina, también sobre avenida Juárez.
"Estamos en la parte medular de los corredores turísticos, sentimos que va a haber un apoyo total, y nosotros estamos comprometidos con la zona", dijo Sitton.
Indicó que se buscan "subsidios y apoyos para que los inversionistas tengan negocios redituables y accesibles; que baje el valor de la tierra, pues de otra forma no habrá precios atractivos para que la gente regrese al Centro Histórico", como es el planteamiento de las autoridades capitalinas.
Comentó que ya recibió subsidios de licencia de la DGCOH, y que está en puerta el del predial, "pero lo importante es el precio de la tierra, que limita el desarrollo de nuevos negocios", subrayó.