JUEVES Ť 5 Ť JULIO Ť 2001

Ť Primera incursión individual del artista mexicano en Europa

El creador se debe aceptar como un ser a quien le gusta jugar: Moisés Zabludovsky

Ť Exhibe pintura, escultura y cerámica en la galería Antoni Botey de Barcelona

Ť Propone un ''paralelismo fonético'' con El toreo de salón, libro de Camilo José Cela

MERRY MAC MASTERS

El pintor y escultor Moisés Zabludovsky (DF, 1959) considera que definirse en términos artísticos equivale a encasillarse. Sólo hay que ''aceptarse como una persona a la que le gusta jugar''. Explica: ''Me gusta el juego de principio a fin, los juegos de palabras, el juego de materiales, así como cuando estos dos se complementan. No sé si en alguna época tenía menos conciencia del juego y pintaba quizá con más libertad. Ahora de algún modo lo he retomado, pues veo la pintura como juego de seducirse uno mismo por la vibración de los colores y por la aplicación del pigmento''.

El pasado 6 de junio Zabludovsky inauguró una exposición de pintura, escultura y cerámica en la galería Antoni Botey, de Barcelona, España, que viene a ser su primera incursión individual en el escenario europeo. Y en México actualmente participa ''fuera de catálogo'' (no es el único caso) en la tercera parte de la muestra Escultura mexicana. Nuevas tendencias que culminará el día 15 en el Museo del Palacio de Bellas Artes. Y lo hace con uno de los ''velices desdoblables'' del arte objeto El libro del viaje (1995).

El toreo de latón, pieza anzuelo

De su exposición en Barcelona, que terminará el día 31, Zabludovsky señala que la pieza ''anzuelo'' fue El toreo de latón, una plaza de toros de dos metros de diámetro, que comprende 67 módulos con todo y la barrera. Un solo matador al centro, con su cuadrilla, dirige la lidia en el momento que pican al toro. El título de la pieza establece un ''paralelismo fonético'' con el libro El toreo de salón, de Camilo José Cela, y sus fotografías de Maspons y Ubiña. Ese ''diálogo entre la palabra y el objeto'', dice, fue lo que más interesó a los galeristas. En la muestra se incluye un ejemplar autografiado de El toreo de salón, pues el artista envió fotografías a color de su obra al escritor español resaltando dicha ''coincidencia fonética'' y éste correspondió con una copia del volumen.

Exhibe cerámica, sus ''platos del milenio''. La iconografía de los 12 platos de cerámica de alta temperatura aborda el arte, la gastronomía, la religión, la política, la ciencia, la televisión, la oceanografía, la música, el deporte, los toros, la guerra y la paz. Además se incluyen dos platos inéditos, uno de la creación y el otro de la procreación.

La tercera parte consiste en Variaciones sobre un tema de amor exhibidas el pasado marzo en la galería Arcos Ittati, divididas en dos: los óleos de la serie Pareja besándose, de los que cinco están en Barcelona, y la parte escultórica Mujer regando. De estas últimas incluyó dos pequeñas, una de impresión digital sobre acrílico y otra en bronce. La de impresión digital comprende una planta. A Zabludovsky le impactó ver que otros artistas activos en el panorama europeo de hoy, también juegan de esta manera con la naturaleza.

''Cuando se integra la naturaleza de un modo tan abierto en una pieza artística, parece una broma porque la historia del arte en mucho es copia de la naturaleza'', dijo.