Ť También administrará crédito de 2 mil 400 millones otorgado por instituciones japonesas

Heredará una deuda de $900 millones quien gane la gubernatura en BC

Ť La población que sufragará el próximo domingo, mayoritariamente joven

JORGE A. CORNEJO Y CIRO PEREZ SILVA CORRESPONSAL Y ENVIADO

Tijuana, BC., 4 de julio. El ganador de la elección para gobernador de Baja California ?a efectuarse el 8 de julio? heredará un Ejecutivo estatal con una deuda que asciende a 900 millones de pesos, más el compromiso de administrar un crédito garantizado por 2 mil 400 millones que otorgaron instituciones financieras de Japón, que se utilizará para abatir el gran rezago en infraestructura hidráulica y drenaje que existe en la entidad.

El sucesor del panista Alejandro González Alcocer contará además con un presupuesto comprometido en aproximadamente 95 por ciento, entre gasto corriente, pago del servicio de la deuda, gasto educativo, obra pública pendiente y procuración de justicia.

El servicio de la deuda pública asciende a más de 113 millones de pesos al año, lo que representa uno por ciento del presupuesto total de la entidad, que en este año fue de más de 13 mil millones de pesos, conformado en 50 por ciento por aportaciones federales, aproximadamente 15 por ciento por el cobro de impuestos y derechos estatales, y el resto procedente del ramo 33, destinado al combate a la pobreza.

Asimismo, el gobernador para el periodo 2001-2007 deberá destinar 62 por ciento del presupuesto anual al pago de la nómina de los maestros de la entidad y a aportaciones para los centros de educación superior del estado.

Distribuirá 8 por ciento del presupuesto en justicia

De igual manera, encontrará que la nómina total de la administración, sin incluir el pago al magisterio, equivale a 10 por ciento del presupuesto. Otro 8 por ciento lo tendrá que distribuir entre la Procuraduría General de Justicia del Estado y la Secretaría Jurídica y de Previsión Social, más 4 por ciento que corresponderá a los poderes Judicial y Legislativo para su funcionamiento.

Adicionalmente existe el compromiso de aplicar aproximadamente mil millones de pesos para obra pública, lo que ubicará a la próxima administración en una situación de difícil disposición de recursos para programas nuevos.

Baja California ocupa el lugar 15 en población, con 2.5 millones de habitantes, y tiene una de las tasas de crecimiento más aceleradas. La población aún es predominantemente joven. La mitad de los habitantes tiene 23 años o menos.

Datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) establecen que Baja California ocupa el segundo lugar en porcentaje de inmigrantes a nivel nacional. Los residentes nacidos en una entidad distinta equivalen a casi la mitad de su población.

Aquí, la tasa de alfabetismo ?porcentaje de la población de 15 años y más que sabe leer y escribir? aumentó de 95.1 a 96 por ciento en los últimos 12 años de gobiernos panistas.

El nivel de asistencia escolar de la población de seis a 14 años se incrementó en 3.5 puntos porcentuales, al pasar de 88.9 por ciento en 1990, casi al inicio de la administración de Ernesto Ruffo Appel, a 92.4 por ciento en 2000.

Estas mismas cifras indican que hoy en día 95 de cada 100 bajacalifornianos hacen uso de los servicios de salud existentes, tanto públicos como privados.

95 por ciento de las viviendas bajacalifornianas tiene televisión y casi 16 por ciento de los hogares en la entidad cuentan con al menos una computadora. En este último rubro, la media nacional es de 9.3 por ciento.

Existe una cobertura de 96.5 por ciento en el servicio de energía eléctrica en las viviendas de la entidad, mientras que hace 12 años sólo 89.5 por ciento de los hogares contaba con ese servicio.

Más de 90 por ciento de las viviendas en la entidad dispone de agua entubada en el interior o por lo menos dentro del terreno.

La edad media, 23 años

En el estado, poco menos de 129 mil mujeres son jefas de hogar, 360 mil personas se declararon no católicas y cerca de 45 mil son discapacitadas.

La población residente en el estado todavía es predominantemente joven; sin embargo, el descenso de la fecundidad ?experimentado en la década de 1970?, la disminución de la mortalidad y la migración han propiciado su envejecimiento paulatino. Ello explica que la edad mediana en 2000 sea de 23 años o menos, cuando en 1990 era de 21 y en 1970 de 16 años.

La información censal de 2000 registró 2.5 millones de habitantes en el estado, de los cuales 33 por ciento son menores de 15 años. La población que se encuentra en edad laboral ?15 a 64 años? representa 62.8 por ciento, y de la de edad avanzada 3.9 por ciento de los habitantes de la entidad. En 1990 la participación de estos grandes grupos de edad era de 34.2, 60.4 y 3.4 por ciento, respectivamente.

El volumen, la composición por sexo y edad y el patrón de distribución territorial de la población están determinados no sólo por el crecimiento natural, resultante de la diferencia entre natalidad y mortalidad, sino también por el crecimiento social producto de los flujos migratorios, que en el caso de Baja California son el principal componente del incremento de la población.

De acuerdo con el Consejo Estatal de Población, 36.2 por ciento de los inmigrantes recientes a la entidad llegaron para buscar trabajo o porque ya contaban con él; 28.1 lo hizo para reunirse con la familia, contraer nupcias o unirse con su pareja, y 3 por ciento llegó a la entidad por motivos de estudios, salud o por habitar en zonas inseguras donde radicaban con sus familias.

Cabe señalar que las causas de la migración varían según el sexo de los migrantes.

La mayor parte de los hombres de la entidad declaró haber cambiado su lugar de residencia a Baja California por motivos laborales, mientras que las mujeres lo hacen por razones de tipo familiar.

Desde la llegada del PAN al gobierno, la proporción de solteros, al igual que la de casados, ha experimentado una disminución, mientras que la unión libre parece ser cada vez más aceptada como forma de vida conyugal, presentándose también un incremento en la proporción de separados, divorciados y viudos.

La estructura por estado conyugal de la población de la entidad muestra que 35.1 por ciento es soltera, 40.7 es casada, 15.3 vive en unión libre y 8.5 es separada, viuda o divorciada.

Similar grado de escolaridad de mujeres y hombres

El grado promedio de escolaridad de los hombres y las mujeres es muy similar; 8.3 y 8.1 años, respectivamente:

El promedio de años de estudio de la población de 15 y más años de la entidad se incrementó de 7.8 a 8.2 durante las administraciones panistas.

Lo anterior es reflejo de la disminución de la proporción de personas en esta franja de edad, que no tiene instrucción alguna o algún grado de estudio inferior a secundaria completa, mientras que el de los que poseen nivel medio o superior se ha incrementado.

La población residente en la entidad continúa siendo mayoritariamente católica, 82.4 por ciento de los habitantes son reconocidos como tales; sin embargo, este porcentaje registra un decremento de 3.7 puntos porcentuales en la última década, que se traduce en el incremento en la proporción de las personas que son protestantes y evangélicos, ateos y bíblicos no evangélicos.