Ť El líder político peronista está "enfurecido", aseguran sus allegados
Dictan prisión preventiva y embargo de bienes al ex presidente Menem
Ť Dispuso el magistrado un régimen más estricto del arresto domiciliario; se acaban las "fiestas"
Ť Se investigan también los vínculos del ex gobernante y sus amigos con el señor de los cielos
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 4 de julio. Dicen sus seguidores que el ex presidente Carlos Saúl Menem se enfureció este miércoles al enterarse de que el juez federal Jorge Urso le dictó la prisión preventiva y el embargo de sus bienes por 3 millones de pesos (dólares), noticia que recibió en una finca de verano, donde está detenido domiciliariamente desde el pasado 7 de julio acusado de ser el jefe de una "asociación ilícita" que manejó desde las sombras la venta ilegal de armas a Croacia y Ecuador (1991-1995).
El magistrado también dispuso un régimen más estricto en su prisión domiciliaria, que se había convertido ya en una parodia de detención por la acción desmedida de sus allegados.
Ahora en la casa sólo podrán vi-vir cuatro
personas y recibir visitas en un horario determinado (prácticamente
todo el día) pero de a dos por vez. Se acaban así las "fiestas
menemistas".
Debido a que Menem ha declarado "sólo" 2 millones
de dólares de patrimonio, aunque afuera se calcula su fortuna en
más de 2 mil millones de dólares, Urso tiene derecho a inhibir
todo movimiento de dinero del ex mandatario, ya que el embargo sobrepasa
su presunto capital.
En la misma resolución Urso tomó una decisión similar con el ex ministro de Defensa y de varias carteras Antonio Erman González, y el ex jefe del ejército general retirado Martín Balza, con embargo de bienes, como organizadores de esa asociación.
Asimismo, dictó el procesamiento del ex canciller Guido di Tella con el embargo de sus bienes, y el ex subjefe del ejército general Raúl Gómez Sabaini, como miembros de esta asociación ilícita, ambos sin prisión preventiva.
Decisiones de la cúpula del poder
En sus fundamentos el juez sostuvo que "la totalidad de maniobras investigadas no se desarrollaron como eventos aislados, sino que fueron implementándose en for-ma metódica, lo cual implicó la comisión de diversos delitos con el fin de ocultar el verdadero destino de los materiales a exportar".
Agrega Urso que "no fue la Dirección de Fabricaciones Militares el ámbito donde tuvieron origen las maniobras, sino que las decisiones pasaron desde los niveles superiores del Estado y desde allí a los ámbitos encargados de su ejecución".
En una resolución de 500 cuartillas, el magistrado también avanza sobre los movimientos ocultos que llevaron al ejército a entregar cañones a Fabricaciones Militares, que fueron enviados a la fábrica de Río Tercero, destruida por una sospechosa explosión en no-viembre de 1995, en la que murieron varios vecinos y arrasó prácticamente una ciudad, lo que ahora se investiga como un atentado para borrar huellas.
La decisión judicial se anunció en momentos en que varios políticos del oficialismo y diversos sectores de la producción y la economía salieron a apoyar al gobierno del presidente Fernando de la Rúa, ante lo que se consideró una campaña de desestabilización.
El ex gobernante Raúl Alfonsín advirtió sobre esta situación, después de que algunos sectores dispersaron ayer el rumor de una po-sible renuncia del mandatario.
Desde el exterior, algunos economistas opinaron negativamente sobre el país, disparando así una cantidad de versiones que, en medio de la movilización social que se ha tomado las calles ante la severidad de la crisis, alientan los temores sobre una desestabilización institucional.
Un país a la deriva
Muchos políticos reclamaron a esos sectores financieros externos, a los que se atribuye un "golpe de mercado" y que "nunca dijeron nada sobre la corrupción que se abatió sobre el país durante la pa-sada década, lo que dejó una Ar-gentina a la deriva".
El vicejefe del gabinete, el cavallista Armando Caro Figueroa, señaló que "son economistas desplazados del poder que quieren recuperarlo y sectores minoritarios del Partido Justicialista que, para apoyar a Menem, pretenden desestabilizar al gobierno" del presidente De la Rúa.
Las versiones sobre las presuntas renuncias del presidente argentino, como la semana pasada del ministro de Economía Domingo Cavallo, "forman parte de una misma manipulación de la opinión pública que se trata de hacer desde algunos sectores", añadió Caro Figueroa.
En el caso de la prisión de Me-nem, en estos días se sugirió que había ciertos movimientos en el gobernante radicalismo (Unión Cívica Radical) tendiente a atenuar la acción contra él.
Sin embargo, el gobierno se abstiene, hasta ahora, de intervenir ante la justicia en un proceso que llevó seis años y acumuló pruebas, por la decisión del fiscal Carlos Stornelli, que fue severamente presionado durante el pasado go-bierno peronista, y una Cámara Federal que resistió los embates menemistas desde 1996.
A decir de muchos analistas políticos, Menem pareció precipitar estas medidas, con su fuerte exhibicionismo, su desesperada carrera para volver como candidato presidencial en el 2003 y el publicitado casamiento con Cecilia Bolocco, la ex mis Universo chilena y simpatizante del ex dictador Augusto Pinochet.
En su ambición dejó por fuera a muchos de los dirigentes justicialistas que tenían derechos electorales e intentó mover a la prensa (una buena parte de la cual está bajo su control y de algunos ex funcionarios de su entorno) para volver al ruedo de la política co-mo un ganador.
La herencia menemista
El menemismo dejó al país en 1999 con un déficit fiscal de casi 10 mil millones de pesos (igual cantidad en dólares), un endeudamiento trepado a más de 160 mil millones de dólares, una situación social en emergencia y destruido el aparato social y productivo, a pesar de lo cuál el establishment exterior, favorecido totalmente durante la pasada década, hablaba de una nación que entraba al Primer Mundo.
En suma, dejó un campo minado, y lo que se señala como "debilidad" del gobierno de la Alianza (coalición integrada por la Unión Cívica Radical y el Frente País Solidario), que asumió a fines de 1999, es no haber mostrado a la opinión pública del país sudamericano la verdadera situación y tomado medidas enérgicas y profundas que calmaran la enorme deuda política y social heredada, y terminara con la recesión y acabara con todos los nichos de corrupción y de mafias.
Por ahora se ha profundizado la crisis social y el gobierno del presidente De la Rúa aparece en un atolladero, cuando la situación se agrava, además, con la represión a sectores populares que sólo demandan justicia.
Se anticipa que Menem tratará de accionar judicialmente para eludir a la justicia y continuará con sus operaciones políticas, pero es cierto que el juez Urso no podía mantener a Menem en su prisión de lujo, donde nuevamente el exhibicionismo de sus seguidores (escasos y algunos de ellos pagados) puso en situación crítica a la justicia argentina.
Sin embargo, sobre Menem y su entorno político
pesan todavía muchas causas y no menores, como el enriquecimiento
ilícito, las que están surgiendo de las investigaciones que
se llevan a cabo sobre lavado de dinero de la corrupción
y la droga, que co-rrieron por los mismos canales.
Las vinculaciones de las rutas del dinero sucio,
los bancos of shore, las empresas fantasma que prosperaron de la
mano del principal banquero del ex presidente peronista, Raúl Moneta,
están apareciendo cada día con documentos irrefutables que
lo hunden cada vez más.
La telaraña de los cárteles
Junto con la causa del tráfico clandestino de armas se investigan los vínculos con el cártel de Juárez, de México, y con los de Medellín y Cali, de Colombia.
En su reciente paso por Buenos Aires, el ex jefe de la oficina de Interpol de México, Juan Miguel Ponce Edmonson, declaró a la prensa sobre las sumas de dinero del cártel de Juárez que habrían favorecido a amigos y banqueros de Menem, bajo cuyo gobierno los hombres de Amado Carrillo Fuentes, el señor de los cielos, compraron propiedades y terrenos.
Asimismo, los vínculos de Menem, su secretario privado Ramón Hernández y el ex secretario de la presidencia Alberto Ko-han, y otros, con Oscar Fernando Cuevas Cepeda, del cártel de Cali, quien fue detenido en Bogotá y recientemente secuestrado en un extraño operativo, están incluso documentados con fotografías.
Existe ya una causa promovida por una querella del ex contador Luis Balaguer, quien colaboró con las investigaciones de una comisión del Senado de Estados Unidos, conjuntamente con los diputados ar-gentinos Elisa Carrió y Gustavo Gutiérrez, sobre presunto lavado de dinero e involucramiento del Citibank en todos estos casos, para determinar una asociación ilícita destinada a cometer estos delitos.
Una comisión del Congreso argentino, presidida por Carrió, estudia ahora documentos provistos por el Senado estadunidense y también documentación mexicana que indicaría que el CitiGroup habría lavado dinero del menemismo, y que recomendó a Carrillo Fuentes a bancos argentinos para realizar inversiones y transferencias.
Las denuncias llueven en estos días y el círculo de la justicia se aprieta cada vez más en torno a Menem y sus allegados, quienes ostentaron un poder desmedido y también deberán responder por numerosos crímenes mafiosos que victimaron a decenas de testigos en las distintas causas abiertas, que nunca pudieron prosperar y que ahora crecen como hongos.