MIERCOLES Ť 4 Ť JULIO Ť 2001
Ť Inicialmente los planteles de bachillerato se concentrarán en 5 inmuebles, informa
Prepas y Universidad del DF sólo atenderán 10% de la demanda educativa: Raquel Sosa
Ť El próximo día 9 se dará a conocer su ubicación, adelanta la titular de Desarrollo Social
RAUL LLANOS SAMANIEGO
Las 15 preparatorias y la Universidad de la Ciudad de México que empezarán a operar en agosto y septiembre próximos, sólo podrán absorber a 10 por ciento de la demanda de ingreso, afirmó ayer la secretaria de Desarrollo Social del DF, Raquel Sosa, quien reconoció que aún no se cuenta con todos los predios necesarios para instalar esos centros de estudios, por lo que las prepas se concentrarán en cinco grandes inmuebles.
Al ser la segunda funcionaria en comparecer ante los medios de comunicación, a petición del jefe de Gobierno, Sosa Elizaga abundó en el tema de esas escuelas de niveles medio superior y superior, aunque insistió en que los detalles de la convocatoria, los requisitos de ingreso y las direcciones de los inmuebles se darán a conocer el próximo 9 de julio.
De entrada, la titular de Desarrollo Social comentó que los cinco locales alternos donde comenzarán a funcionar las 15 preparatorias "se van a equipar a lo largo de este mes" y así iniciarán cursos; posteriormente, conforme se vayan terminando las sedes propias de cada escuela -lo que está previsto para diciembre próximo- se irán asignando los planteles.
Comentó que se tendrá 150 estudiantes por preparatoria en esta etapa inicial; "entonces, reunir en un primer semestre a 300 estudiantes en un plantel no representa para nosotros ningún problema, porque van a ser espacios que tengan suficiente capacidad para albergar a mil 500 personas".
Las delegaciones donde se ubicarán esos cinco inmuebles son Iztapalapa, Cuajimalpa, Milpa Alta, Tlalpan y Azcapotzalco, los cuales con excepción del de Cuajimalpa, son propiedad del gobierno local.
La Universidad de la Ciudad de México trabajará de inicio en un inmueble en Iztapalapa, conocido como la Casa Libertad, además de un edificio localizado en la avenida Fray Servando Teresa de Mier, que pertenecía al ITAM; "ahora va a ser utilizado por la universidad, y ya tiene aulas y todas las condiciones que se requieren para la tarea académica".
Respecto a la demanda estudiantil, dijo que esperan que sea "muy grande. Estamos calculando que sólo en las zonas de media, alta y muy alta marginación, haya una demanda de estudios de preparatoria de alrededor de 56 mil interesados; si tomamos en cuenta toda la zona metropolitana, son 250 mil estudiantes. Estamos hablando de jóvenes que están ahorita en tercero de secundaria; nosotros, en nuestro mejor momento, vamos a poder atender a 5 mil 600 personas, es decir algo así como 10 por ciento de la demanda".
Raquel Sosa dijo que en estos planteles no habrá exámenes de admisión, sino un procedimiento completamente distinto al tradicional; "el nuestro será saber cuáles son los niveles de conocimiento de los estudiantes y dónde tenemos que trabajar con ellos más intensamente, en qué materias, en qué áreas".
Aunado a ello, planteó que sea en el seno de las comunidades donde los mismos vecinos "nos ayuden a seleccionar a los estudiantes y no sea un proceso de exclusión sobre la base de promedios o de quienes tienen condiciones económicas para estudiar".
Insistió en que el sistema de selección en las 15 prepas y la Universidad de la Ciudad de México "va a ser sobre la base de requisitos mínimos: vivir en las inmediaciones de los planteles, y tener el certificado de secundaria" o de bachillerato, según el caso.
Sobre la planta docente, detalló que la UNAM ya imparte un curso especial a los profesores de esos centros de estudios, y será gente con alto nivel de preparación. que también tendrá percepciones muy aceptables, aunque declinó precisar el monto de los salarios.
A pregunta expresa sobre las quejas por el supuesto manejo clientelar de algunos apoyos sociales, la funcionaria comentó que se está luchando contra ello y que se han dispuesto todos los controles posibles, incluso hay varios "filtros" entre los mandos medios y superiores de la dependencia para evitar que se distorsione el objetivo final de la ayuda pública.
"Hemos sido muy duros, muy terminantes, y tenemos un control muy grande sobre la gente que trabaja con nosotros"; de detectarse ese tipo de situaciones, dijo, se sanciona a los responsables.