MARTES Ť 3 Ť JULIO Ť 2001
CIUDAD PERDIDA
Miguel Angel Velázquez
Ť Informe de López Obrador
Ť Un rumor persistente
AL PASO de los primeros seis meses del muy personal estilo de gobernar de Andrés Manuel López Obrador, más allá de las poses bravuconas y la enorme dosis de prepotencia, podríamos decir, en abono a su mandato, que algunos de los sectores más necesitados de la capital han recibido el beneficio de una guía segura y clara que se inició bajo el mandato de Cuauhtémoc Cárdenas, continuó con Rosario Robles y se consolida ahora en la administración actual.
LAS CRITICAS al actual jefe de Gobierno provienen, como debe ser, del PAN, desde el sentido conservador del quehacer público y desde la visión neoliberal enquistada en el gobierno federal desde hace 19 años, que no encuentra un argumento de peso y lo acusa de "populista" con la simpleza de la impotencia argumental.
PESE a ello, nadie puede decir hasta ahora que el gobierno de López Obrador ha decepcionado. No hay muchos que puedan gritar su arrepentimiento por el voto confiado al jefe de Gobierno ni se le podría tachar de mentiroso.
EL ANDAMIAJE construido por el gobierno que le antecedió le permite ir a fondo en acciones de protección a los más desvalidos y encuentra entre la gente el enorme capital de confianza y credibilidad que construyeron la honestidad y el rumbo definido sustentados por el primer gobierno electo en la ciudad de México.
ESO, ENTRE otros aspectos, le permite abusar, en ciertos momentos, de la paciencia de la gente y de la generosidad de algunos de sus colaboradores y le limita también las tentaciones, de las que habrá muchas, de cambiar de rumbo.
PARA EXPLICAR esto, para explicarse a Andrés Manuel, se debe hablar de su ser práctico, en el cual no existe ni moral ni ética capaces de frenar el deseo de poder, pero que ahora se halla acotado, sujeto a una idea bien sembrada por los principios de la izquierda, desde la cual se mira más allá del momento alucinante de la elección.
ES POR ello que López Obrador habla de un gobierno sin ocurrencias. La gente aprobó el rumbo en 1997 y pese a las tentaciones prometidas por un ejercicio guiado nada más por la encuesta y el capricho, el gobierno se ancló en un puerto seguro mientras el mar vive momentos de tormenta.
ASI SE mira, hasta ahora, a este gobierno, pero donde nacen las dudas es en sus cuentas para el futuro con respecto de su trabajo político en el interior del PRD. Hoy corre la especie, alimentada desde lo más oscuro de las malas prácticas partidistas, de que López Obrador tendría un acuerdo bien cimentado con las corrientes del desastre.
SI FUERA cierto el rumor, el jefe de Gobierno habría establecido alianzas con los Chuchos y los Amalios, las dos tribus perredistas que comparten, por ahora, el poder en ese partido; decisión que finiquitaría, por decirlo de alguna manera, el acuerdo con sus aliados de siempre: Cuauhtémoc Cárdenas y Rosario Robles.
EN EL llamado círculo interno del jefe de Gobierno se comenta que para Andrés Manuel la alianza con el grupo de Cárdenas ya no es redituable y es el momento preciso para desligarse de él.
EL ASUNTO, dicen algunos, tiene que ver con la tregua unilateral que se le brindó a Fox y el espíritu colaboracionista de Chuchos y Amalios hacia el gobierno federal; además, claro, de la oportunidad para el jefe de Gobierno de impulsar una candidatura totalmente suya para la presidencia del PRD.
PARA NADIE es un secreto la actitud de López Obrador en el caso Robles, y aún antes, con las críticas hechas en contra de las labores administrativas del gobierno que le ha servido de sustento.
ASI, LOPEZ Obrador quiere volar sólo, a su modo, y nadie mejor que Chuchos y Amalios para servirle sin la menor crítica de por medio. Hay quien dice que Andrés Manuel ya tiene candidato y que ese no saldrá de las filas del cardenismo.
POR LO pronto todo esto no es más que un rumor, pero muchos juran por Dios y los santos que sí, que ya hay acuerdo. De ser así, López Obrador podrá dejar el puerto, levar anclas y lanzarse a la mar. Entonces habrán vencido las tentaciones y habrá que empezarse a preocupar.
ƑQuién es la voz de la Presidencia?
SEGUN SE supo anoche la directora de Comunicación Social y vocera de la Presidencia presentó su renuncia a los dos cargos desde el fin de semana pasado.
Y COMO también ya es del conocimiento público, Francisco Ortiz fue nombrado director de Comunicación Social, Ƒpero quién en la vocería?
DURANTE LA reunión de Acción Nacional para celebrar el triunfo de Vicente Fox en las elecciones de hace un año se lanzaron muchos buscapiés con respecto a quién será el vocero de la Presidencia, pero sólo un nombre se dio como seguro.
SE TRATA de Juan Ignacio Zavala, hombre de Acción Nacional y cuñado de Felipe Calderón Hinojosa. Interprete usted los silencios.
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