MARTES Ť 3 Ť JULIO Ť 2001
Un beso que le dará la vuelta al mundo
El presidente Vicente Fox Quesada y la señora Martha Sahagún Jiménez contrajeron matrimonio ayer a las ocho de la mañana. La ceremonia tuvo lugar en la residencia oficial de Los Pinos ante el vigésimo séptimo juez del Registro Civil de esta ciudad, Gustavo Lugo Monroy.
La boda del Presidente de la República y quien fuera su vocera durante más de seis años se celebró en un día muy especial para ambos: el cumpleaños 59 del mandatario y el primer aniversario del triunfo electoral de Fox. Ayer, pues, en la residencia oficial hubo tres motivos para festejar.
Presenciaron el histórico enlace matrimonial 12 personas. Por parte de la ahora primera dama del país, su padre, don Alberto Sahagún de la Parra; sus tres hijos, Manuel, Fernando y Jorge, y su nuera, Mónica Jurado Mayacotte. Del lado del primer mandatario, su hermano mayor, José Luis Fox Quesada, y su esposa, Luz María Lozano Fuentes.
Además, el sacerdote jesuita Enrique González Torres, rector de la Universidad Iberoamericana y amigo de la familia Fox Quesada; el asesor jurídico del Ejecutivo federal, José Luis Reyes; el fotógrafo oficial de la Presidencia de la República, Alfonso Murillo; el director de Cepropie, Alberto García, y el camarógrafo presidencial, Jorge Pérez Dasa.
Nadie más estuvo en la sala de la casa del mandatario, incluyendo a sus hijos.
Como testigos del Presidente firmaron el acta matrimonial su hermano y su cuñada, mientras por la contrayente lo hicieron su padre y su nuera.
"Don Vicente... doña Martha, en el nombre de la ley y de la sociedad los declaro unidos en legítimo matrimonio, con todos los derechos y todas las obligaciones que esto trae como consecuencia, con todo lo bueno y todo lo malo que también trae como consecuencia un matrimonio porque... quizás de vez en cuando haya algunos pequeños conflictos, algunas pequeñas dificultades entre ustedes, pero yo espero que sean muy pocas... para hacerse mutuamente felices y espero que a través del tiempo, cuando recuerden esta fecha: š2 de julio... con alegría! Que este matrimonio sea para bien de ustedes dos... šfelicidades!", expresó el juez Lugo en su mensaje a la pareja que, a lo largo de toda la ceremonia, mantuvo unidas sus manos...
Lo que siguió al acto legal fue un beso del Presidente a su esposa. Y las felicitaciones, los aplausos, los abrazos, algunos "švivas!" y un sonoro "šbravo!" de Vicente Fox.
Por primera vez en la historia moderna del país, un presidente se casó en la residencia oficial... el camarógrafo Pérez Dasa entendió el momento: pidió a García y a Reyes que solicitaran otro beso a la pareja. Empezó el asesor jurídico: "šbeso... beso... beso!".
La pareja los complació. "Para que le dé la vuelta al mundo... šotro beso!", dijo la primera dama del país, feliz, emocionada.
El momento quedó grabado. "šBravo!", se volvió escuchar al Presidente.
Desde el domingo por la tarde los rumores de la boda de Vicente Fox y Martha Sahagún empezaron a circular. Nadie, con voz autorizada, los confirmaba.
La mañana de este lunes, cuando en Palacio Nacional el presidente de España, José María Aznar, felicitaba a su homólogo mexicano por su tempranera boda, a los periodistas españoles les cayó el veinte: con un poco más de atención, ellos habrían tenido la primicia.
Y es que desde la semana pasada, cuando ellos conocieron de la agenda del mandatario de su país en México, ahí se anticipaba que entre los asistentes a la cena de Estado en Palacio Nacional asistiría "la señora de Fox". Pero a nadie se le ocurrió reparar en que en la ciudad de México, desde hacía tres semanas, se venían haciendo los preparativos para la boda del jefe del Ejecutivo mexicano.
El mismo juez Gustavo Lugo Monroy lo confirmaría: hace tres semanas recibió en sus oficinas a enviados del Estado Mayor Presidencial para iniciar los trámites del enlace civil. El cobraría por ir a Los Pinos 3 mil 373 pesos, que a las ocho de la mañana de ayer el propio Fox sacó de su bolsa. JUAN MANUEL VENEGAS