Ť Diana Krall inauguró el jueves el 22 Festival Internacional; participará también Prince

Durante diez días inundarán de jazz la capital canadiense

AFP

Montreal, Canada, 29 de junio. La locura veraniega del jazz se apoderó de Montreal la noche del jueves, con la apertura del 22 Festival Internacional, que verá desfilar durante diez días a los maestros del género junto a los creadores de ritmos más eclécticos, como Prince, George Benson, Buena Vista Social Club y Manu Chao.

Hasta el próximo 8 de julio están programados unos 500 espectáculos, dos tercios de ellos serán gratuitos y en escenarios al aire libre.

Al amparo de una noche agradable, miles de personas invadieron las calles del centro de Montreal el jueves, donde los sonidos de jazz, blues o zydeco daban al ambiente un aire digno de Nueva Orleans o Brasil.

La canadiense Diana Krall abrió la fiesta con un brillante concierto en una sala. Navegando entre una falsa indolencia y la energía comunicativa, la cantante y pianista de 35 años se ganó el premio Ella Fitzgerald, por su originalidad de improvisación y calidad del repertorio, entregado por los organizadores del festival. El saxofonista estadunidense Michael Brecker recibió a su vez el premio Miles Davis por el conjunto de su obra.

El festival promete además ser un éxito para los organizadores, que anunciaron el jueves un récord de venta de boletos en relación al año pasado, sin duda por la atracción ejercida por los internacionales Prince, el francés Manu Chao, Rachid Taha o los cubanos de Buena Vista Social Club.

Críticas puristas

Pero las críticas también se han dejado escuchar. Los puristas ven en algunas elecciones un insulto al género musical. Aunque los organizadores responden con una definición más amplia del jazz, basada en la idea de la improvisación.

"Presentar a Prince en un festival de jazz es natural", afirma André Menard, vicepresidente y co fundador del encuentro, para quien el cantante estadunidense es "un músico imprevisible con un talento múltiple que ha logrado sorprender al público".

La consigna de los organizadores es no hacer del festival "un éxito sectorio", dijo Ménard. Su apertura a la música del mundo no es más que un justo "regreso a las raíces, el jazz se nutrió en gran parte en las raíces africanas y latinas".

Desde el jazz puro a los ritmos emparentados, los aficionados están de parabienes. El compositor y trompetista Wynton Marsalis; la Reina de Cabo Verde, Cesaria Evora; el guitarrista John McLaughlin o el padre del bossa nova, el brasileño Joao Gilberto y su hija Bebel, tendrán un lugar en Montreal.

El jazz italiano tendrá un lugar aparte, con Enrico Rava, Enrico Pieranunzi y Marco Zurzolo, mientras que el gran concierto gratuito exterior será confiado a un grupo de Estambul, que ha prometido un ''groove a la turca'' el 3 de julio.