ENTREVISTA
Guillermo Prieto Treviño
Atraer más inversión, el mayor reto de la Bolsa Mexicana de Valores
ANTONIO CASTELLANOS / I
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) no ha cumplido como mercado, reconoció su presidente, Guillermo Prieto Treviño. No ha tenido, dijo, la capacidad de atraer más empresas ni inversiones, porque la economía no ha crecido a ritmos adecuados, pero enfatizó que está lista para operar las privatizaciones de empresas públicas. La venta de Banamex a Citigroup, que se concretará en el mercado accionario, se dará a fines de julio, previa autorización gubernamental.
A la bolsa, recalcó, no le preocupa que Citigroup esté sujeto a investigación por lavado de dinero. No nos podemos guiar por especulaciones y sin duda la proyectada operación con Banamex ha traído signos de confianza, de optimismo que representan flujos importantes de inversión. Ello puede hacer que otras emisoras coticen en el mercado y haya una mayor diversificación.
Ahora, dijo, se trabaja en el desarrollo del mercado doméstico y en aumentar la base de inversionistas. El objetivo es utilizar a la bolsa como un mecanismo a través del cual se privaticen las empresas públicas. Ahí está el caso de Aeropuertos del Pacífico. Por el momento se analiza con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, todo lo que sea necesario para poder colocar un porcentaje relevante en el mercado interno.
En entrevista con La Jornada, Prieto Treviño manifestó que otro proceso pendiente es el de Aseguradora Hidalgo, y más adelante se podrían hacer operaciones con el sector eléctrico y parte de la petroquímica. Ahí hay potenciales significativos, pero esa será decisión de las autoridades que deberán definir la participación de los inversionistas nacionales y extranjeros en ese sector.
Yo creo, precisó, que la parte de la electricidad sería importante, porque se podría utilizar la bolsa para ese propósito y también la parte de la petroquímica. Hay bastantes oportunidades y lo conveniente sería utilizar los mecanismos del mercado para hacer muy transparentes esos procesos. Estamos listos para operar las privatizaciones y las reglas del juego para que participen los particulares, las fijan las autoridades.
Licenciado en economía por el Instituto Tecnológico Autónomo de México con maestría en Administración Pública en la Universidad de Harvard, Prieto Treviño informó que se trabaja a "toda velocidad en el asunto de Banamex, para tener a la brevedad la oferta de las acciones. Ya entregaron tanto a las autoridades como a nosotros, toda la información.
De acuerdo con la nueva legislación, es la bolsa la que tiene que dar una opinión favorable en un ejercicio claro de autoregulación. Sería difícil precisar una fecha exacta, pero queremos hacerlo lo más rápido posible. Primero se tendrá que registrar Citigroup en el mercado para negociar como cualquier otra empresa. Esto podría ocurrir en un periodo de un mes o mes y medio, enfatizó.
?¿Cuál es la opinión de la bolsa respecto a Citigroup, que ha sido cuestionado en Estados Unidos por operaciones de lavado de dinero?
?La bolsa lo que tiene que analizar en un proceso de listado es la revelación de información de la emisora. Creo que en todos los mercados del mundo, lo importantes es que haya información suficiente para que los inversionistas tomen una decisión sobre si es adecuado o no comprar.
?¿No habría problemas con la autoridad judicial?
?Yo creo que todas las instituciones, y especialmente las más importantes en el mundo, tienen tantos millones de cuentas y operaciones, que en algunas ocasiones las autoridades realizan auditorías que no necesariamente derivan en la comprobación de esas cosas. A nosotros lo que nos importa es la cantidad y calidad de la información de la emisora.
Lo que si consideramos, dijo, es que dentro del mercado de valores, esta operación entre Banamex y Citigroup es un parteaguas. Es una operación importante, porque es la primera vez que se va a listar un valor extranjero dentro de la bolsa y ello hará que más inversionistas participen para ampliar las alternativas de inversión para los nacionales.
Definitivamente, agregó el dirigente del mercado accionario, no nos podemos guiar bajo sospechas. A nosotros lo que nos llega es la información relevante de quienes integran el consejo de administración; la política de las empresas, sus administraciones, sus estados financieros. En qué participan, su estrategia de negocios; qué hacen en cada país y si consideran importante revelar algo de ese asunto (lavado de dinero), lo harán.
Prieto Treviño manifestó que tampoco se puede hablar de que dejará de pagar el impuesto sobre la renta. Tampoco se puede hablar de 40 por ciento. Si se hiciera fuera de bolsa la operación, habría que actualizar los costos de adquisición de las acciones. No es sólo hacer una multiplicación.
Hay que considerar que puede la empresa actualizar de acuerdo con la inflación, el costo a que se adquirieron las acciones. Luego, sólo sobre la diferencia, habría alguna repercusión, pero no es nada más decir que la operación fue de tanto y hay que multiplicar por 40 del impuesto sobre la renta.
Dijo que no le preocupa la participación de inversionistas extranjeros en el sistema de pagos. En todo caso eso es responsabilidad del Poder Legislativo, que aprobó el cambio legal para que los capitales foráneos pudieran colocarse hasta ciento por ciento en la banca y, en el caso de la decisión de la bolsa sobre la operación, ésta se tendrá que dar después de la aprobación de las autoridades correspondientes como la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y la Secretaría de Hacienda.
A juicio del presidente de la bolsa, la política económica del presidente Fox es consistente en mantener finanzas públicas sanas. Continúa con la austeridad y lleva a cabo un combate frontal a la inflación. En la medida en que eso se mantenga, van a haber fundamentales económicos cada vez más sólidos que permitirán el crecimiento sostenido del país.
Por ahora, destacó, el Producto Interno Bruto mantiene un crecimiento, aunque menos rápido. Además los flujos de inversión extranjera en el mercado accionario siguen creciendo y se identifica estabilidad en las decisiones. La visión de los dueños del capital foráneo es de largo plazo, lo que representa confianza en el país.