JUEVES Ť 28 Ť JUNIO Ť 2001
Ť Monreal, principal activo del sol azteca en la entidad, afirma el líder estatal de ese partido
Epicentro 2006, sombra en los comicios del domingo en Zacatecas
Ť El PRD aspira a obtener la mayoría en el Congreso y triplicar las alcaldías en su poder
ALFREDO VALADEZ Y ALONSO URRUTIA CORRESPONSAL Y ENVIADO
Zacatecas, Zac, 27 de junio. Eran los albores de la campaña. Rodeado por unos dos mil militantes y los candidatos del PRD, en el teatro Fernando Calderón, el gobernador Ricardo Monreal soltaba entre broma y verdad su objetivo: "Buscaremos que la marcha de Zacatecas se escuche en el 2006 en Los Pinos".
Meses después, las elecciones para renovar alcaldías y Congreso local están marcadas por la sombra del proyecto personal de Monreal Avila y su Epicentro 2006. En realidad son, dicen, un referéndum para su gestión, que es definida por el propio mandatario como plural e incluyente.
Todos caben en el proyecto del gobernador, cuya personalidad e intensas relaciones públicas han terminado por desdibujar el escenario político estatal de 1998 para revertirlo aún más a su favor. Lo que las urnas no le dieron lo ha conseguido aprovechando las veleidades políticas de sus adversarios: de tener minoría en el Congreso local concluye la legislatura con una bancada monrealista -que no perredista- cercana a la mayoría absoluta, además de los 15 alcaldes priístas que ahora son priístas-monrealistas.
Lo cierto es que hoy, se dice con ironía, en el proyecto del gobierno están perredistas de viejo cuño, neoperredistas, monrealistas de cepa y neomonrealistas, en un escenario político estatal donde las ideologías partidistas parecen haber desaparecido para dar paso al pragmatismo político en torno al gobernador.
José Luis Medina, dirigente estatal del sol azteca, admite que el principal activo de su partido ha sido Monreal Avila, cuya personalidad "seductora" ha permitido al perredismo dar un "salto espectacular para tener hoy cien mil militantes".
Con esa base, el PRD aspira a obtener la mayoría en el Congreso, 40 por ciento del total de la votación, y triplicar el número de alcaldías que domina, incluyendo las ciudades principales del estado que hoy gobierna.
Hacia 2006
Los comicios de este domingo representarán la segunda ocasión en que un gobierno emanado del PRD se somete a las urnas, pero esta vez parece que la importancia va más allá del interés por refrendar el proyecto perredista. Nadie niega aquí que el proyecto Epicentro 2006 le da un sesgo particular a la contienda.
Más que anecdótico resultó ser el anuncio oficial de la creación de Epicentro 2006, "asociación civil" cuya presentación oficial corrió a cargo del secretario de Gobierno, Arturo Nahle, el 10 de junio, junto con su renuncia formal al PRI y la adhesión de 15 alcaldes y dos diputados priístas.
Su antecedente: la sangría incesante de políticos opositores devenidos en monrealistas de primera línea en los tres años de transición democrática en el estado. Diputados, alcaldes y dirigentes han engrosado las filas del monrealismo, y algunos ocupan hoy cargos importantes en el gobiernoy; otros ahora son hasta candidatos del PRD a diputados y alcaldes.
La dirigente nacional del PRD, Amalia García Medina, los define como desprendimientos de priístas progresistas, pero agrega: "No sólo del PRI han llegado al PRD, hay mucha sociedad civil que se ha sumado al partido". Ha sido una acumulación tan acelerada, que el PRD no ha tenido la capacidad organizativa para encauzar las nuevas bases del partido.
Y es que el PRD tiene 100 mil militantes en Zacatecas, demasiados proporcionalmente con el padrón electoral del estado, cercano a los 900 mil electores.
Amalia García hace un ejercicio de autocrítica y señala que el objetivo ahora será consolidar al partido a partir del atractivo que tiene Monreal Avila, y desdoblarlo más hacia una activismo de los movimientos sociales.
Zacatecana, García Medina luce más que optimista por los resultados que se darán el domingo próximo, en los que su partido, augura, obtendrá casi 40 por ciento de los votos, mantendrá las grandes ciudades que hoy gobierna -Zacatecas, Fresnillo y Guadalupe- y probablemente alcance la mayoría en el Congreso estatal.
Tres distritos electorales... en Estados Unidos
Confiada, García Medina piensa más en las reformas electorales que requiere la entidad, una serie de cambios que pasan por "otorgar los derechos políticos a 1.2 millones de zacatecanos que viven en Estados Unidos", casi la mitad de los oriundos de aquí, y a quienes, según la propuesta de Monreal Avila, habría que crearles circunscripciones para que puedan estar representados en el Congreso local con tres diputados, que saldrían de los "nuevos" distritos electorales de Zacatecas: Texas, California e Illinois, donde se concentran los miles de paisanos migrantes. Una especie de globalización de los comicios.
La dirigente señala que el gobierno de Monreal Avila ha sido de mucha obra pública y gestión social, y cita una encuesta promovida por el PRD sobre la evaluación de los 32 gobernadores del país. Los perredistas López Obrador y Monreal Avila tuvieron 70 por ciento de aceptación entre sus electores.
Los obstáculos a su gestión: la Federación -que regatea los recursos- y el clima -que ha sido mezquino en Zacatecas con una prolongada sequía que azota al campo.
Lo primero lo intentó resolver con una marcha pluripartidista hacia Los Pinos, en tiempos de Ernesto Zedillo, pero el asunto del clima le llevó más tiempo y creatividad.
Preocupado por la falta de lluvia, que origina pérdidas millonarias en la agricultura, contrató a un científico ruso que colocó una antena ionizante en Fresnillo -la tierra de Monreal Avila- para generar nubes que luego fueron bombardeadas con yoduro de plata.