El inicio de la fiesta de Corpus en México se ubica en los primeros años de la colonia; en ella tomaban parte el pueblo y los religiosos. Posteriormente la procesión fue presidida por los gigantones, el diablo cojuelo, cuadrillas de danzantes y la tarasca (personaje mitológico de gran tamaño, entre serpiente y dragón).
La fiesta se ha transformado con el paso de los años. Sabemos que aumentó su esplendor y llegó a tener un estricto ceremonial. En ella participaban las cofradías, con sus magníficos estandartes pintados o bordados artísticamente; los trajes y los uniformes de los agemiados limpios y bien planchados para la ocasión. En este acto tomaban parte tanto la sociedad, como las autoridades civiles, militares y religiosas.
Poco se sabe sobre las fechas exactas del origen de las expresiones populares; entre ellas está la de obsequiar "mulitas" en esta festividad.
FABRICACION DE LAS PRIMERAS MULITAS
Conocemos que la costumbre hacia 1850, era poner en la plaza del zócalo, frente al atrio de catedral, puestos para la venta de frutas que venían unas de tierra caliente y otras de tierra fría, pues se vendían sandías, melones, capulines, chabacanos, dátiles, peras de San Juan y duraznos, entre muchas otras. Se empacaban en pequeños y blancos huacalitos y se entregaban con flores puestas en el tule utilizado para rellenarlos.
Entre esos puestos, se vendían también "pantles" de plátano deshidratado y prensado con su propia miel; se traían de Apatzingán, Mich. Allá en tierra caliente, se envolvían con tramos de la corteza seca del tallo principal del árbol del plátano, formando un paquete rectangular, que sirvió de cuerpo a las primeras mulitas. Con el mismo material se hacía la cabeza y la cola; se les colocaban cuatro patas de madera de pino, encajadas en el cuerpo.
DIFERENTES MATERIALES PARA SU FABRICACION
En la actualidad las mulitas se hacen además con
otros materiales; las más difundidas son las elaboradas con las
hojas secas de la mazorca del maíz, (a este material se la conoce
como totomoxtle en el centro del país y como joloche en el sureste).
Las hay pequeñitas de apenas un centímetro y medio de alto;
otras miden casi un metro. Las de cerámica son muy coloridas, se
manufacturan en Las Huertas y Tlaquepaque Jal., y en Amozoc Pue.
Agradeceremos que nos envíen datos acerca de las celebraciones que se realizan en su comunidad, así como descripciones de sus costumbres y tradiciones. También serán bienvenidos sus comentarios y correspondencia a: La Jornada, Francisco Petrarca 118, Col. Chapultepec Morales, Miguel Hidalgo, C.P.11570, sección Cultura, página Tradición y Cultura. |