MIERCOLES Ť 27 Ť JUNIO Ť 2001

Ť El acuerdo ha desmantelado el sustento de la comunidad rural: Public Citizen

Desde el inicio del TLC, 15 millones de campesinos han abandonado sus tierras

Ť Critica la apertura de la frontera mexicana a la importación de granos de Estados Unidos

AGENCIAS

Washington, 26 de junio. El incremento de las importaciones mexicanas de maíz proveniente de Estados Unidos ha ocasionado que al menos 15 millones de campesinos de México abandonen sus tradicionales formas de subsistencia en busca de nuevos trabajos que les permitan sobrevivir, según un reporte de la organización estadunidense Public Citizen.

De acuerdo con el grupo defensor de los derechos de los consumidores, desde hace siete años, fecha en que entró en vigor el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), se ha desatado una guerra contra los agricultores de los tres países integrantes del acuerdo y en el caso específico de México ha arruinado a los campesinos y dañado la diversidad genética del maíz que cultivan.

En el documento Siete años de Tratado de Libre Comercio: Una guerra contra los agricultores de Estados Unidos, México y Canadá, Public Citizen explica que entre 1994 y 1998 la importación mexicana de maíz estadunidense barato forzó a trabajador_agricolaque uno de cada seis mexicanos abandonaran sus tierras y se concentrara en las ciudades del centro y norte del país o bien emigrara a Estados Unidos en busca de un trabajo redituable.

El precio real que se paga a los productores mexicanos de maíz cayó 46.2 por ciento entre 1993 y 1999 como resultado del ingreso de maíz barato de Estados Unidos a México, precisa el documento.

Public citizen, organización fundada por Ralph Nader, un duro crítico del TLCAN, refiere que tras la vigencia del acuerdo comercial y la consiguiente desaparición del subsidio provisto por Conasupo a los agricultores mexicanos, éstos fueron dejados a merced del libre comportamiento del mercado, controlado por un puñado de grandes empresas multinacionales comercializadores de granos, a las que no les interesa la seguridad alimentaria del país ni las economías rurales.

El reporte agrega que al mismo tiempo que los agricultores mexicanos han sido rebasados por los bajos precios del maíz, el costo de las tortillas se ha incrementado, lo que prueba la equivocación del repetido argumento del libre comercio de que gran cantidad de importaciones y precios bajos de materias primas benefician a los consumidores con bajos precios.

Public Citizen apunta que aunque el TLCAN preveía la liberación de las importaciones de maíz en 15 años, el gobierno mexicano decidió abrir este mercado en tan sólo dos años. Lo peor, cita el documento, es el exceso de confianza de México en el suministro de maíz estadunidense. Ejemplifica que en 1996, cuando las importaciones estadunidenses se redujeron, México tuvo que enfrentar una carestía del grano que contribuyó a la desnutrición de uno de cada cinco niños en el país.

La organización civil precisa que la inversión gubernamental en proyectos agrícolas cayó 90 por ciento en siete años, a pesar de que 39 por ciento de la población vive en las comunidades rurales.

Destaca que la balanza comercial de México en materia agrícola también ha declinado desde que entró en vigencia el tratado de libre comercio y agrega que la actividad agrícola ha caído de aportar 10 por ciento del Producto Interno Bruto en 1980 a contribuir con sólo 5 por ciento actualmente.

Menciona que lejos de preocuparse por proveer un sustento a las familias campesinas, el diseño del TLCAN ha desmantelado el sustento de la comunidad rural y eliminado los limites a las importaciones necesarios para proteger a las familias, beneficiando a las agroindustrias y no a los agricultores independientes

Agrega que la caída de precios de los productos agrícolas causada por la avalancha de importaciones y la eliminación de programas nacionales de apoyo al campo, han incrementado la pobreza rural.

Más de 80 por ciento de la población rural mexicana (unos 25 millones) vive en pobreza y 15 por ciento de esta cantidad se sumó a partir de 1994, mientras la extrema pobreza creció 23 por ciento. Desde 1986 México se sometió a un proceso de desregulación de sus políticas de agricultura como parte del Acuerdo General de Aranceles y Comercio (GATT).