MIERCOLES Ť 27 Ť JUNIO Ť 2001
Ť Ensalza el trabajo en EU de la oficina para migrantes
Dignificar "al paisano", objetivo de la Presidencia, dice Juan Hernández
ROSA ELVIRA VARGAS
Para hacer justicia a los migrantes "debemos ser ambiciosos, soñar en grande" y pugnar por el reconocimiento de su existencia, de sus derechos humanos, del dinero que mandan a México a sus casas, para que se les cobre menos y, sobre todo, de sus garantías a recibir educación, salarios justos y servicios de salud en Estados Unidos.
Juan Hernández, encargado de la Oficina de la Presidencia para Atención a Migrantes, estuvo ayer con estudiantes de periodismo de la escuela Carlos Septién. Chanceó con ellos, hizo elogios sin par al presidente Vicente Fox y no quiso meterse en honduras sobre la economía nacional, pues "las broncas de Paco Gil son de él y las de los migrantes déjenmelas a mí".
Ante todo definió que la función de la instancia a su cargo es la de "dignificar al paisano".
-ƑPero cómo lograr eso, repartiéndoles cajitas felices o dándoles agua en el desierto? -lo interrogó un estudiante del taller de televisión.
-No, eso no dignifica, obviamente. A lo mejor salva algunas vidas pero no trae dignidad; al contrario, estas personas (los migrantes) están arriesgando su vida y tenemos que luchar por ellos.
Hernández admitió que ciertamente la migración se da, ante todo, porque el país no ha creado las oportunidades que merece la gente y que mientras a lo largo de mucho tiempo los gobiernos de México y Estados Unidos cerraban los ojos ante el fenómeno, hoy ya existe una actitud distinta, de "un buen diálogo".
Les debíamos esta oficina a los migrantes
Anunció, entonces, que su oficina impulsa proyectos productivos -padrinos- en las 90 regiones del país donde se registra mayor migración y pobreza, respaldados por mexicanos exitosos que viven en Estados Unidos o por asociaciones de migrantes que junto con los estados y la Federación apliquen el llamado esquema 3 x 1 (tres dólares del gobierno por cada dólar que inviertan los mexicano-estadunidenses).
La idea, dijo, es trabajar en cuatro frentes donde sólo uno de ellos tendría que ver directamente con acciones en Estados Unidos y que tienen que ver con la dignificación que implica el pago justo de salarios, "el sacarlos de la oscuridad donde están viviendo como criminales y que tengan una vivienda que les permita levantarse, ir al trabajo, regresar a México, visitar a sus familiares y volver a su empleo".
El resto, aunque no las detalló, tienen que ver directamente con las condiciones en el país, donde "vamos a soñar en grande; vamos a cambiar a México no Fox ni su equipo de trabajo, sino todos los mexicanos y los 20 millones que viven allá''.
-Usted nos está planteando un panorama muy agradable de parte del gobierno para los mexicanos que viven allá, Ƒpero qué realmente sucede? ƑLa intención es que todo esté tan bien que todos los mexicanos deseemos estar en Estados Unidos? -le preguntó otra de las estudiantes a Juan Hernández.
-En primer lugar siempre hay críticas. Si no vela uno por los derechos de ellos, nos dicen que qué estamos haciendo, que somos unos criminales. Pero si empieza uno a velar por ellos, critican de que 'bueno, ya están con los VIP, los very important paisanos, por qué no están trabajando acá en México'. Entonces siempre habrá gente que critique.
"Sin embargo, esta oficina se ha dado a conocer entre los paisanos allá. Entras ya casi a cualquier restaurante, a cualquier lugar en el campo y preguntas de esta nueva oficina y ya empiezan a conocerla, porque estamos gritando fuerte por ellos, porque se las debemos a estos individuos tanto en México como allá".
Y como la idea era hablar de logros, ver todo en positivo, el funcionario se refirió a la reciente resolución del estado de Texas de permitir estudios de nivel superior a mexicanos, como equivalente al día en que los afroamericanos pudieron entrar a todas las escuelas que eran de los anglosajones. Dijo que se buscará que la medida se extienda a otros estados.