Ť Javier Aguirre aceptó que el tricolor va a enseñar poco juego colectivo en el choque del domingo

Coraje y actitud, claves para enfrentar a EU, señala El Vasco

Ť Nuestros recursos son la picardía, el buen trato del balón y la malicia, acotó el timonel nacional

MARLENE SANTOS A.

A su estilo, el seleccionador nacional, Javier Aguirre, comprometió a su plantel en el "plan emergente" de cara al partido del domingo frente a Estados Unidos, donde México podría iniciar el rescate del boleto que está cerca de perderse rumbo al mundial del 2002.

Reveló lo sucedido en la concentración: "Abrí la puerta para que se fuera el que así lo deseara. Tuvieron chance. Les dije que quien decidiera irse podía hacerlo sin cuidado, no pasaría nada porque yo manejaría bien el asunto hacia fuera. Nadie se quiso ir, todos se quedaron y aceptaron el reto. 'El que se quede en cuanto cierre la puerta ya se chin... ya se amoló. Ahora de aquí hasta el domingo a romperse el alma'", les advirtió a los jugadores.

Manifestó que se habló fuerte en esa reunión. Luego, "viéndoles las caras, los ojos, a la hora de cenar", el Vasco se convenció de la disposición y entusiasmo de sus dirigidos. "A mí me gusta el diálogo de frente y si alguien se guardó algo, peor para ellos, porque no hay mañana", remató.

Tras ello, creció el entusiasmo para continuar preparando a marchas forzadas el crucial partido.

"La idea será poner a los 11 mejores porque es obligado ganar", dijo el entrenador, quien no descartó poner de inicio a algunos del Cruz Azul, que jugarán el jueves en Buenos Aires y estarían de vuelta el viernes por la noche, al explicar que si ganan vendrán muy motivados a contagiarnos más, y si pierden, llegarán con gran ritmo".

-¿Qué tanto podrá preparar en lo táctico?

-Poco o nada. No son niños, saben atacar y defender. Uno puede entender que va a haber poco juego colectivo. Apelar a ello con tan poco tiempo es muy difícil. Pero con lo que tenemos creo que nos la podemos jugar. Tiene que estar ahí el jugador número 12 porque lo vamos a necesitar.

Insistió en que el coraje y actitud de los jugadores pesarán mucho dadas las diversas condiciones físicas y futbolísticas de cada uno, pues algunos vienen de pretemporada en la playa, otros de Argentina y para colmo será la primera vez que jugarán juntos. "Hay que recurrir al espíritu, al entusiasmo, a la confianza y experiencia individuales, entonces, trataremos de buscar un orden, un hilo conductor que conjugue todo eso", explicó.

-¿Puede garantizar el buen ánimo durante el juego, pues a veces les anotan un gol y el equipo se derrumba?

-No lo sé. Mago no soy. Un proceso de recuperación requiere tiempo y hay que concederles el beneficio de la duda y apelar a su capacidad de reacción como equipo. Un partido dura 90 minutos y un gol no te puede descomponer.

Del equipo estadunidense aceptó su supremacía en el hexagonal, "va invicto, juega bien, está muy organizado, son fríos, calculadores, buenos atletas, individualmente los conozco y he visto los videos de sus cinco partidos. Pero México no tiene mañana, hay que ir por ellos, hay que tratar de ganarles, quitarles lo invicto y seguir con esperanza.

-En esas condiciones, ¿tiene México algo a favor?

-Seguramente eso, que ellos llegan relajados, mientras nosotros lo hacemos en un momento difícil, sin tiempo y tras un cambio brusco. Las crisis generan cambios y expectativas, yo estoy ansioso y el grupo también.

"Nuestros recursos son la picardía, el buen trato de balón, esa malicia natural del mexicano. Y encima, el enorme deseo. En el plano mental México debe estar por encima de los americanos que están a dos o tres puntos de ir al mundial. Hay que pegarles", acotó.