DOMINGO Ť 24 Ť JUNIO Ť 2001
Ť El Lince llevó a la PGR al lugar en Zapopan
Era de El Chapo laboratorio de drogas desmantelado en Jalisco
Ť Hacía tiempo que Guzmán se dedicaba también a producir enervantes sintéticos; 30 millones consumen anfetaminas: ONU
GUSTAVO CASTILLO GARCIA
El laboratorio más grande de drogas sintéticas que ha localizado la Procuraduría General de la República (PGR) en los últimos cinco años fue desmantelado el pasado 16 de junio en Jalisco. Era propiedad de Joaquín El Chapo Guzmán Loera
La detención de Martín Rangel León, El Lince, quien transportaba 116 pastillas de éxtasis y semillas de mariguana, llevó a agentes de la Policía Judicial Federal (PJF), adscritos a la Unidad Especializada en Delincuencia Organizada (UEDO), a desarrollar una investigación paralela a lo que era su principal objetivo: la recaptura de El Chapo Guzmán Loera, quien se fugó del penal federal de Puente Grande el 20 de enero de este año.
Parecía una bodega semivacía
El 16 de junio, El Lince llevó a los agentes federales hasta lo que parecía una bodega semivacía, donde había tambos aparentemente arrumbados, básculas corroídas, bultos de cal, algunos matraces y pequeños costales.
También, una estufa de gas de dos quemadores, pero en realidad era lo que los narcotraficantes llaman una "cocina", es decir, un laboratorio de drogas sintéticas.
Fuentes de la PGR explicaron que "durante las investigaciones para recapturar a El Chapo Guzmán se obtuvieron diversas órdenes de cateo, y además se contó con la suerte de detener a El Lince, uno de los integrantes de la banda de Guzmán Loera".
Así es como se inició una investigación que permitió obtener la orden de cateo número 4/2001, la cual fue proporcionada por el juzgado quinto de distrito en materia de procesos penales, con sede en Jalisco.
Los agentes de la Judicial Federal se introdujeron en el domicilio marcado como lote 24 de la calle prolongación Iturbide, de la colonia Jardines de Santa Ana, municipio de Zapopan, y detuvieron a Jorge Sydney Berumen Ornelas, encargado del laboratorio, quien ahora se encuentra sujeto a proceso penal por delitos contra la salud y delincuencia organizada.
Las fuentes consultadas aseguraron que El Chapo Guzmán "tiene tiempo que se dedicaba, además del tráfico de cocaína y mariguana hacia Estados Unidos, a la producción y comercialización de drogas sintéticas. Este laboratorio es el más grande descubierto en los últimos cinco años, y era propiedad de él".
La información oficial, dada a conocer por la PGR el 20 de junio, indica que "el laboratorio clandestino es una casa habitación en la que se encontraron sustancias químicas que por sus características se utilizan para la elaboración de éxtasis, como son ácidos, químicos en polvo, matraces y enfriadores, así como el siguiente material:
"Cinco tambos de 200 litros con hidróxido de amonio; 3 tambos de 200 litros con ácido clorhídrico; 3 tambos de 200 litros con tolueno; 7 cuñetes de 100 kilos con óxido de aluminio; 2 cuñetes de 100 kilos con hidróxido de sodio; 1 cuñete de 70 kilos con elitium; 4 garrafones de 19 litros con hidróxido de amonio; 1 cilindro metálico con cloruro de hidrógeno en gas; 4 recipientes de 3 kilos con hidróxido de amonio; 1 garrafón con 19 litros de metanol; 22 garrafones color ámbar de 19 litros cada uno con diversas sustancias, entre ellas ácido sulfúrico, ácido clorhídrico, éter etílico, metanol, clorometano dimetil, formamida y tetrahidrofurano".
Además, "113 paquetes con 117.67 kilogramos de combinación de sustancias en polvo, paso previo para la elaboración de pastillas de éxtasis".
Según las cifras oficiales contenidas en el Informe estadístico uniforme para el control de drogas (IEUCD), desde el primero de diciembre del año 2000 y hasta el 10 de marzo de 2001, la PGR, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Secretaría de Marina, la Policía Federal Preventiva (PFP) y otras dependencias encargadas de combatir el crimen organizado habían logrado asegurar 163 kilos de metanfetaminas, 38 de anfetaminas y menos de 100 gramos de éxtasis.
El uso de drogas sintéticas como crack, crystal, tachas, hielo o speed ha crecido en los últimos años. Tan sólo en 1997, el Centro de Información de Naciones Unidas para México, Cuba y República Dominicana advertía: "ahora hay indicios de que está aumentando el uso indebido de drogas sintéticas en otros lugares de Asia, Europa y América del Norte".
México y EU, entre los más afectados por el tráfico
En su informe señala que entre los principales países afectados por este tráfico se encuentra México, y que en Estados Unidos "el número de personas adictas a estas sustancias es cinco veces superior al de los heroinómanos, mientras que los adictos a la anfetamina representan ya la mitad del número de cocainómanos".
En el informe mundial sobre las drogas, elaborado por ese mismo organismo de la ONU en 1997, se señala que "en los últimos años, el aumento más acusado en el uso indebido de enervantes ha correspondido a los estupefacientes sintéticos. Se trata aquí de los estimulantes de tipo anfetamínico. Consumen esas sustancias unos 30 millones de personas en todo el mundo (0.5 por ciento de la población total), cifra superior al número de heroinómanos y probablemente de cocainómanos".