SABADO Ť 23 Ť JUNIO Ť 2001

Ť Música popular de seis estados de la República

Comenzó en Xicotepec de Juárez el encuentro de la Huasteca

LA JORNADA DE ORIENTE

puebla, Pue., 22 de junio. Un aguacero pertinaz primero y luego una cálida neblina que le imprimieron un sello mágico a la ciudad de Xicotepec de Juárez saludaron el inicio de la versión sexta del Festival Nacional de la Huasteca, el viernes por la noche, donde luego de la inauguración oficial, seis grupos de huapangueros interpretaron con violín, guitarra y jarana la alegre música de esta región que comprende seis estados de la República: Querétaro, San Luis Potosí, Hidalgo, Tamaulipas, Veracruz y Puebla.

El representante del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes, Armando Herrera Silva, director de Vinculación Regional, expresó en su discurso que la tradición huasteca se lleva más en el corazón que en el pensamiento, y con este tipo de festivales se ha logrado un proceso amplio de vinculación, diálogo y difusión de esta cultura.

El secretario de Cultura del gobierno del estado de Puebla, Pedro Angel Palou, destacó que las Huastecas no son sólo tres, como nos hicieron creer en la película Los tres huastecos, de Pedro Infante, sino seis, por lo que es evidente que estos actos no nacen de la escritura, sino de la tradición de los pueblos.

El fandango, sin espacio

Luego del acto inaugural, las autoridades otorgaron un reconocimiento a maestros de la Huasteca poblana que han hecho aportaciones a la cultura local, en las áreas de música, medicina tradicional, artesanía y artes plásticas. También se entregó un diploma al veracruzano Román Güemes, por su trayectoria en la investigación y difusión de la cultura huasteca.

Después se fue la lluvia y llegó la música, con el arribo al escenario de los tríos representativos de los seis estados: los poblanos Chava y sus Huastecos, el Trío Pahuatlán, Tradición Serrana de Querétaro; el trío Huazalingo, de Hidalgo, Alegría Huasteca, de Tamaulipas, y el doctor Chessani y sus Huapangueros de Rioverde, San Luis Potosí, los cuales durante dos horas y media, que se pasaron sin sentir, hicieron gala de sus facultades interpretativas.

A diferencia de festivales anteriores, en esta versión los espectadores no tuvieron oportunidad de bailar los huapangos que escuchaban, pues el espacio que se acondicionó para el efecto, dado lo reducido de su tamaño, sirvió sólo para que bailaran algunas parejas de un ballet folclórico y no para el fandango popular.

Ayer en el transcurso del día se realizaron diferentes actividades, como talleres de versificación, y de ejecución de jarana y de violín huasteco, así como de baile de huapango huasteco y de tintura tradicional, enfocado a los artesanos. Se realizó, además, el Primer Encuentro de Médicos Tradicionales con el intercambio de conocimientos entre parteras, hueseros y curanderos de los seis estados.