JUEVES Ť 21 Ť JUNIO Ť 2001
Ť Hasta hoy, 23 empresas solicitaron dictámenes provisionales para constituirse
Las Instituciones de Seguros Especializados en Salud comienzan a funcionar en septiembre, anuncia la Ssa
Ť Ssa, SHCP y CNSF intervendrán en su creación y funcionamiento: Bailón González
CAROLINA GOMEZ MENA
Será "a principios de septiembre cuando empiecen a funcionar formalmente en el mercado" las Instituciones de Seguros Especializados en Salud (ISES), reveló Mauricio Bailón González, director general de Protección Financiera de la Secretaría de Salud (Ssa), quien agregó que en julio la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) comenzará a dar las autorizaciones correspondientes para que los interesados se constituyan en aseguradoras médicas.
El directivo del departamento de la Ssa encargado de las ISES reveló que, hasta diciembre del año pasado, 26 empresas solicitaron a la dependencia en la que labora dictámenes provisionales (solicitudes) para constituirse en ISES, pero como tres de ellas desistieron de continuar con el trámite, sólo 23 podrían --si cumplen con todos los requisitos-- recibir su dictamen definitivo.
En plática informal con reporteros, Bailón González agregó que en el proceso de certificación y de funcionamiento posterior de estas aseguradoras privadas no interviene únicamente la Ssa, sino también, y en mayor grado, la SHCP y la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF), la primera "como regulador" para garantizar la procedencia de los recursos, y la CNSF por ser el "órgano supervisor del componente financiero", debido a las reformas a la Ley de Seguros en 1999.
Según el funcionario, aún no se puede saber con certeza cuántas ISES funcionan en el país, porque de esas 23 empresas solicitantes algunas "se han unido", otras podrían ser rechazadas, e incluso --deslizó-- podrían sumarse nuevas en el futuro. Lo que sí se sabe es que algunas tendrán alcance nacional, mientras que otras sólo cubrirán ámbitos "regionales".
Asimismo, según las estimaciones de Protección Financiera de la Ssa el costo de la compra de un seguro en estas instituciones --dependiendo del número de miembros de la familia-- podría "ser muy similar a las actuales pólizas de gastos médicos mayores".
Es decir, para una familia de cuatro personas (dos adultos jóvenes y dos niños pequeños), adquirir este seguro les significará erogar cerca de 20 mil pesos al año.
Tras subrayar que la Ssa "no regulará" los precios de los seguros, sino la CNSF, Bailón González refirió que para abaratar gastos a los núcleos familiares --puesto que el seguro de gastos citado de manera individual cuesta cerca de 30 mil pesos-- se buscará que sean "grupales".
"Si entran dos familias o diferentes familias en ese grupo, podría bajar (el costo) porque el riesgo se empieza a compensar", dijo.
Como las ISES cuentan con el componente comercial además del de salud, es obvio que como cualquier tipo de aseguradora apuesta a la no ocurrencia del daño, y a medida que el perfil del usuario incrementa la posibilidad de hacer uso del seguro, el monto a pagar tendrá la misma tendencia.
Así, mientras mayor en edad sea el asegurado, aumenta su riesgo de enfermedades imprevistas, o desarrolla males crónicos que le obligarían a hacer válido el seguro, y como ninguna aseguradora quiere perder, el camino será pagar más, opinó Gustavo Leal Fernández, investigador de políticas de salud de la Universidad Autónoma Metropolitana plantel Xochimilco.
En entrevista, Leal Fernández expuso que para hacer atractivas las ISES, el gobierno federal tiene que explicar, en primer lugar, cómo piensa conciliar dos finalidades contrapuestas que pueden llevar al "fracaso" a las ISES, ya que "mientras una aseguradora gana con la ausencia porque su negocio es el riesgo, un hospital gana con la presencia del paciente, porque el suyo es el daño", comentó.
Es justamente esta inconsistencia la que genera dudas a Leal, y más aún cuando Bailón afirma que, aunque las ISES "no dejan de ser un negocio financiero, para ellos lo más importante debe ser el componente médico", por lo que deben instar a sus asegurados a acudir a consultas regulares.
A esto --prosiguió-- se suma el hecho de que las ISES le apuestan a la existencia de una cultura de la prevención, que en México "no existe"; tan es así que "de los casi 100 millones de nacionales, menos de 2 por ciento cuenta con algún tipo de seguro de vida". Además "Ƒcómo se va fomentar la cultura de la prevención --se preguntó-- si a la mayor parte de la población no le alcanza el dinero ni siquiera para vivir, menos para los imprevistos o para pagar por si se enferma?"
Al parecer lo anterior no es para la Ssa un impedimento para el arranque y para asegurar una larga vida a las ISES, porque un ingrediente que las hará atractivas será la eventual calidad con que se desempeñarán, la cual la Ssa prevé que se garantizará con numerosos procesos de escrutinio constante.
Y al respecto, Bailón González detalló que ante la Ssa las empresas tienen que demostrar "capacidad y suficiencia en su red para dar servicios de salud". Ejemplificó que si una ISES piensa darse de alta como especialista en pediatría, debe demostrar a la dependencia que cuenta con una red de pediatras adecuada al número de asegurados que proyecta captar, y sus médicos deben estar certificados y actualizarse continuamente.
En el caso de los hospitales, éstos también deben ser suficientes y estar certificados por el Consejo de Salubridad General. También las ISES deberán entregar por escrito sus mecanismos de quejas internos ante cualquier inconformidad del paciente.
De la misma forma serán vigiladas para que eviten la sobreutilización o subutilización de los servicios y deberán regirse por un programa de mejora continua.