JUEVES Ť 21 Ť JUNIO Ť 2001
Ť El ex dictador Jorge Videla se niega a declarar en juicio sobre el Plan Cóndor
Ocupa la policía fronteriza argentina la ciudad de General Mosconi para acallar protestas
Ť Movilizaciones populares en la capital del país contra la represión en la provincia de Salta
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 20 de junio. La Gendarmería Nacional (policía de fronteras) ocupó la ciudad de General Mosconi, Salta, y allanó casi todas las casas y detuvo, hasta ahora, a 23 personas, después que el pasado 18 de junio al desalojar una carretera cortada por desocupados del lugar provocó dos muertos y más de 14 heridos, algunos muy graves.
Una de marchas y protestas en rechazo a la represión en Salta paralizó varias calles de Buenos Aires, e incluso se cerraron va-rias carreteras de acceso a esta capital, mientras que el tema se debatió en el Congreso y las centrales sindicales integraron una comisión de dirigentes y notables, en-tre los cuales figuran Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la Paz, y Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo, para viajar urgentemente al lugar ante la necesidad de proteger a la población.
Los gobiernos nacional, de Fernando de la Rúa, y provincial a cargo del justicialista Juan Carlos Romero, continúan considerando que los incidentes fueron originados por "infiltrados armados", y este día ya había escalado esta posición hasta hablar de "activistas extranjeros" en el lugar.
Romero mencionó al Partido Obrero y al líder de la Corriente Clasista y Combativa, Carlos Santillán, como responsables de "in-citar a la violencia y la lucha armada", discurso que puso en alerta a todos los partidos políticos y organismos de derechos humanos, que advirtieron su similitud con los de la pasada dictadura militar y "otros momentos donde la democracia perdió el rumbo".
Esta madrugada tropas de gendarmería desalojaron nuevamente con balas de go-ma y gases lacrimógenos la ruta 34 que había sido reocupada durante la noche por piqueteros (manifestantes) y sus familias.
Después se dispersaron como en un estado de guerra por toda la ciudad, pauperizada en extremo, y comenzaron a allanar casa por casa con rompiendo puertas para llevarse a algunos detenidos, lo que originó una airada y desesperada protesta de los 18 mil pobladores de General Mosconi.
También impusieron el registro de autos y solicitaban documentos a todos los habitantes, incluyendo a los escolares, lo que indignó a la población y al periodismo.
Según los partes de los jefes de la gendarmería, con estas acciones se apagaban "los últimos brotes de rebeldía", mientras otros comandos se introdujeron a los montes aledaños buscando "subversivos".
Podrían citar a Kissinger como testigo
En este marco de situación, el ex dictador Jorge Rafael Videla, que guarda detención domiciliaria por la causa que investiga el robo sistemático de niños nacidos en cautiverio durante la pasada dictadura (1976-1983), se negó a declarar en la indagatoria citada por el juez Rodolfo Canicoba Corral, quien lleva adelante el primer juicio global contra la Plan Cóndor en este país, bajo la fiscalía de Miguel Angel Osorio.
Videla está acusado de pertenecer a una asociación ilícita junto con otros dictadores de la región como Augusto Pinochet y Al-fredo Stroessner, entre otros, para coordinar un plan de muerte que funcionó entre los años 70 y 80, bajo el nombre de Operación Cóndor, para detener, secuestrar y ma-tar a disidentes políticos en uno y otro país en actuaciones conjuntas.
El juez Canicoba Corral admitió a La Jornada que podría trasladarse a Brasilia para interrogar a Stroessner, asilado allí, y cuya extradición ha solicitado. Lo mismo sucede con Pinochet.
También dijo que Henry Kissinger, ex secretario de Estado estadunidense, podría ser citado como testigo, como solicitaron los querellantes en esta causa.
Videla guardó silencio cuando se le interrogó sobre la desaparición de ciudadanos chilenos y uruguayos en Argentina durante la dictadura.