MIERCOLES Ť 20 Ť JUNIO Ť 2001
Ť Los trabajadores exigen aumentos salariales
Cancela la aerolínea Iberia 30% de vuelos debido a la huelga de pilotos
REUTERS
Madrid, 19 de junio. Los pilotos de Iberia comenzaron el martes una huelga en demanda de aumentos salariales, y pese a prestar los servicios mínimos requeridos por el Ministerio de Fomento, la empresa área española se vio obligada a cancelar casi 30 por ciento de los vuelos programados.
"Todavía es temprano para hacer un balance, pero de mil 7 vuelos previstos para hoy (martes), 287 se han cancelado, equivalente a un 28 por ciento", dijo una portavoz de la compañía.
La del martes es la primera de diez jornadas de huelga programadas por el sindicado de pilotos SEPLA en su campaña por lograr un aumento de sueldo.
El lunes en la noche terminaron sin acuerdo las negociaciones entre los representantes sindicales y la dirección de Iberia. El inicio de la huelga hizo bajar las acciones de Iberia, que perdían esta mañana otro 0.9 por ciento a un nuevo mínimo de 1.10 euros.
Iberia dijo el lunes que el aumento salarial reclamado por Sepla -de 20 por ciento según la aerolínea- supondría a la compañía pagar 4 mil millones de pesetas adicionales (20.6 millones de dólares) cada año para el gremio de pilotos, y llevaría a la aerolínea a entrar en perdidas este mismo año.
El presidente ejecutivo de la aerolínea, Angle Muller, dijo en una entrevista a Antena 3 que el futuro de Iberia correría peligro si se aceptan los aumentos salariales reclamados por los pilotos.
"El futuro de la compañía correría peligro si aceptásemos una subida obligada en los próximos años de la cuantía que nos piden. Si lo hacemos (la subida solicitada), en los próximos cuatro años la compañía estará otra vez en perdidas. Volveríamos otra vez a la etapa del 95, cuando esta compañía estaba en quiebra", dijo Mullor.
Sepla culpó el lunes a la dirección de Iberia de no buscar solución "al no presentarse el presidente de la empresa a una reunión clave".
La reunión con el sindicato de aviadores se produjo en un clima de máxima tensión, con un amplio desencuentro entre los pilotos y la compañía.