Ť El PRI busca que el órgano local anule la elección de gobernador

PAN y PRD pedirán al TEPJF declare la "incompetencia del TSEE" en Yucatán

LUIS A. BOFFIL GOMEZ CORRESPONSAL

Merida, Yuc., 17 de junio. El PRI y su candidato perdedor Orlando Paredes Lara se jugarán ante el Tribunal Superior Electoral Estatal (TSEE) la que, quizá, sea su última carta para intentar que proceda su petición de anular las elecciones a gobernador, después de dos reveses que les infringió el Tribunal Electoral del Estado (TEE) al declarar improcedentes todas las impugnaciones del tricolor.

Por su parte, y aún sin confiarse del todo, panistas y perredistas anunciaron que pedirán al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) declarar la incompetencia del TSEE, porque su existencia "no está justificada al contravenir normas jurídicas del país".

Una vez que el pasado fin de semana los cinco magistrados del TEE votaron por unanimidad desechar todos los recursos de impugnación presentados por el PRI, cuyo objetivo era anular los comicios por presuntas irregularidades de Acción Nacional y su abanderado Patricio Patrón Laviada, los representantes jurídicos del tricolor tendrán 48 horas -a partir del anuncio en estrados del resolutivo- para apelar el fallo y pedir se conforme el Tribunal Superior Electoral Estatal, la última instancia local que puede revertir el resultado que acredita como gobernador electo a Patricio Patrón Laviada.

Y es aquí donde radica la preocupación de las directivas panista y perredista, debido a que el TSEE se integra con dos magistrados y un juez del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE), estrechamente vinculados al gobierno de Víctor Cervera Pacheco. Empero, si en ese lapso el PRI no impugna, todo habrá acabado y se descarta, virtualmente, que el tricolor recurra al Trife.

Hace dos meses, la magistrada Amira Hernández Guerra -esposa del gobernante yucateco-  y su correligionario Gonzalo Gutiérrez García obtuvieron su jubilación después de 30 años de servicio, la cual no estuvo exenta de polémica y furibundas discusiones en la tribuna del Congreso local entre diputados priístas y panistas, principalmente; sin embargo, para cubrir los dos vacíos la mayoría del PRI en el Congreso nombró a Ricardo Avila Heredia y Angel Prieto Méndez como los dos nuevos magistrados.

Avila Heredia fue juez civil, procurador general de Justicia en la entidad, secretario de Gobierno y encargado del despacho gubernamental cuando la mandataria interina Dulce María Sauri Riancho renunció en diciembre de 1993, después de sostener una fuerte controversia con el presidente Carlos Salinas de Gortari.

A su vez, Prieto Méndez representó, hasta hace unos meses, al PRI ante el Consejo Electoral del Estado. Además, ha sido diputado local, funcionario de gobierno y director jurídico de la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Yucatán, pero siempre vinculado a los asuntos electorales.

Los dirigentes del PAN, Alfredo Rodríguez Pacheco, y del PRD, Néstor Santín Velázquez, informaron que ante la posibilidad de que los priístas busquen, en el TSEE, una de sus últimas instancias para tratar de revertir su derrota, solicitarán al Trife invalidar a dicho organismo local debido a que contraviene leyes generales del país dispuestas en el Cofipe.

Asimismo, al mismo tiempo que el PRI, interpondrán recursos constitucionales para contrarrestar alguna "jugarreta" que pretendan hacer los magistrados estatales. El dirigente panista manifestó que "no podemos confiarnos todavía", si bien el panorama político luce más despejado y los integrantes del tribunal electoral cumplieron con su trabajo (fueron sumamente criticados por tener presunta relación con el PRI) al desechar las impugnaciones de Paredes Lara. Pero advirtió que no aceptarán se conforme un Tribunal Superior Electoral con magistrados abiertamente priístas y que mantienen una fuerte relación con el gobernador Cervera Pacheco.