LUNES Ť 18 Ť JUNIO Ť 2001
Ť Documentan múltiples casos en Guerrero
Continúa la represión en México: defensores de derechos humanos
Ť América Latina, líder en violaciones, señalan
VICTOR BALLINAS
El Informe anual 2000. Los defensores de los derechos humanos en primera línea, destaca que América Latina posee "el triste récord del número de activistas amenazados de muerte, víctimas de desapariciones forzadas y ejecuciones sumarias". Y México, subraya dicha publicación, no es ajeno "a que se siga padeciendo la represión".
Las estrategias de represión establecidas en todo el mundo para neutralizar a los defensores de los derechos humanos "son cada vez más complejas, perniciosas y sofisticadas e involucran directa o indirectamente al Estado incluyendo a los grupos paramilitares, individuos y grupos privados, y grupos de oposición armada", agrega el documento.
Al referirse al caso México, señala que en este país continúan "los asesinatos, la desaparición forzada, amenazas directas o indirectas, hostigamientos, malos tratos, difamaciones, robo de archivos y materiales, allanamientos, violaciones sexuales, entre otros".
El informe da cuenta de varios casos: el asesinato del dirigente de la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS), Misael Ascencio Domínguez, quien fue ejecutado a machetazos el 7 de octubre del 2000. "Misael era hermano de José Ascencio, uno de los dirigentes y fundadores de la OCSS. En esa región habían sido asesinados ya 48 integrantes de ese grupo, y en el sexenio del presidente Ernesto Zedillo ocurrieron 4 asesinatos más: José Luis Rodríguez, el 15 de abril; José Martínez Ramón y Felipe Nava Gómez, el 20 de abril, y Misael el 7 de octubre, los cuatro el año pasado".
El otro intento de asesinato contra el dirigente de la OCSS, Marco Antonio Abadicio Mayo, fue el 19 de julio del 2000. "Sufrió el atentado al volver a su domicilio. Recibió un disparo en el pecho, y consiguió refugiarse en casa de su hermana antes de desmayarse. Fue trasladado al hospital de Acapulco, donde se recuperó de sus heridas".
Al ser interrogado por las autoridades y organismos defensores de los derechos humanos dijo: "mi único delito ha sido luchar para que sean escuchadas las peticiones de la comunidad".
Durante su interrogatorio en el Ministerio Público dijo que "como el lugar del atentado estaba muy oscuro no pudo reconocer a sus agresores, pero cree que podrían ser miembros de grupos paramilitares que desarrollan sus actividades en la zona".
Se recuerda en el Informe anual 2000. Los defensores de los derechos humanos en primera línea que "el 12 de enero, del 2000, Abadicio Mayo fue detenido y torturado durante 12 días por miembros del Ejército, quienes por medio de golpes y amenazas lo acusaban del secuestro del joven Erasmo Ponciano y de llevar comida a los grupos guerrilleros de la región. De acuerdo con su versión y la de sus familiares, desde ese momento no han cejado las amenazas y el hostigamiento en su contra".
En dicho informe se hace referencia a la desaparición forzada de Plácido Camargo Ruiz, profesor de primaria y activista educativo, integrante de la sección 10 del SNTE, ocurrida el 16 de junio del 2000, cuando se dirigía a su trabajo en el Distrito Federal.
"Hasta ahora se desconoce su paradero, a pesar de que se realizó una intensa búsqueda en hospitales y cárceles. Se cree que la desaparición forzada de Camargo Ruiz pudo ser realizada por un grupo paramilitar o de agentes de la Policía Judicial Federal en represalia por sus actividades durante el paro laboral efectuado por los educadores en mayo y junio del 2000".
Otros casos de maestros son los de Víctor Pineda Enestrosa, Gregorio Alfonso Alvarado López y Modesto Patolzin, detenidos y desaparecidos por motivos políticos.
También señala el documento "las graves amenazas recibidas por el abogado del área jurídica del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas, Juan López Villanueva, en San Cristóbal de las Casas, Chiapas. "Recibió amenaza de muerte por correo electrónico. El mensaje recibido fue: si te sigue pasando de cabrón te mato. Espero que pienses bien lo que vas a mandar antes de enviar un correo o te va a cargar la verga".
Larga lista de acosos
Otros casos de los que da cuenta dicho documento son los del director del Centro de Estudios Fronterizos y Promoción de los Derechos Humanos (CEF-PDH), en Ciudad Reynosa, Tamaulipas, Arturo Solís, quien recibió un recado anónimo afuera de su domicilio. "En dicho mensaje se hallaba dibujada un águila muerta, con sangre en el pico y un pincel entre sus garras en donde aparece dibujado un diablo".
Refiere además el caso de amenazas a defensores de los pueblos indígenas, recibidas por el abogado Maurilio Santiago Reyes, el 10 de mayo del 2000. "Recibió varias llamadas y al descolgar nadie respondía. Finalmente, una llamada que recibió su secretaria, María del Pilar Marroquín, dijo: vamos por tu cabeza".
Los defensores de derechos humanos manifestaron que "las amenazas pueden estar relacionadas con las denuncias penales presentadas en contra de servidores públicos por las violaciones a los derechos humanos de los indígenas chatinos ocurridas el 12 y el 13 de abril. Esos días, narran, varios indígenas fueron confundidos con centroamericanos indocumentados y fueron vejados, detenidos y maltratados".
Da cuenta dicho informe de las amenazas contra el historiador Andrés Rubio Saldívar y el periodista Rey Miguel Hernández, en la costa chica de Guerrero. Se hace mención que en septiembre del 2000 el comandante local de la policía judicial de Guerrero les expresó: "si suben a la Concordia se van a atener a las consecuencias".
En los casos de hostigamiento que fueron documentados, cita los de la Unión de Pueblos contra la Represión de la región Loxicha, ocurrida el 11 de octubre del 2000, donde policías judiciales del estado amedrentaron a indígenas; el de Isaías Martínez Gervasio, en Guerrero; el acoso a la Red Todos los Derechos para Todos; el de Eufracia Altamirano Hernández, de la Asociación de Familiares y Desaparecidos, del estado de Guerrero; el caso de Adrián Ramírez López, entre otros.