Ť En Ohio nació una niña del legendario guitarrista

Exitoso concierto de Eric Clapton en Texas; lo acompañó Billy Preston

RAFAEL MOLINA ESPECIAL

San Antonio, Texas, 16 de junio. Las tierras del sur texano se colmaron de regocijo por una escala del actual World Tour de Eric Clapton, que sigue marchando con promisorias expectativas.

No solamente ofreció el repertorio de su reciente álbum Reptile, la ceremonia inició con las composiciones realizadas para el álbum Unplugged. El ritmo latino de Reptile -una especie de jazz pop de tono brasileño-, introdujo a más de 20 mil almas al nuevo material producido.

Sin duda, el órgano de Billy Preston (invitado especial) dio al concierto un virtuosismo excepcional a través del diálogo entre su órgano Hammond B-3 y el piano eléctrico, o con las distorsiones bluesísticas de Clapton.

Un ángulo particular del concierto fue la congregación de un público heterogéneo que reunió no solamente a chicanos y angloamericanos, sino también a veteranos, además de sacudir también a las mujeres desde los sesentas.

Verdaderas abuelas y abuelos se dieron cita en este profundo suspiro que visualizó a Eric Clapton de carne y hueso. Pero también atrajo a miles de adolescentes.

El público diverso se mantuvo prácticamente sentado durante la presentación que duró cerca de dos horas. Cuando Clapton y banda instrumentaron Tears in heaven, las dos enormes pantallas colocadas lateralmente cambiaron la proyección en blanco y negro, y los miles de seguidores brindaron un acalorado aplauso.

Clapton dio una muestra de los disímbolos efectos que puede lograr en las cuerdas acústicas y eléctricas; de su voz que puede vibrar bluesísticamente como lo hizo con B B King en Riding with the King, del cual extrajo algunas resonancias.

Armonías cristalinas se desprendieron de su mágica manera de dominar la guitarra como lo hizo con Bell bottom blues, Got you on my mind, I want a little girl, Don't let me belonely tonight, y la fantástica de Willie Dixon I'm your hoochie coochie man. Definitivamente, el momento efusivo imparable llegó cuando ejecutó Layla, de su añejo y memorable álbum Disreali gears, cuando formó parte de Cream (en 67).

Casi al final de la memorable odisea, el público se puso de pie y ovacionó sin restricciones su sonido clásico. Vibraciones sicodélicas, acústicas de terciopelo, requinteos atmosféricos e imaginativos, limpios y con efectos electrónicos, dejaron huella imborrable de un Eric Clapton que sigue sonando como en sus mejores tiempos.

Sólo un encore fue suficiente para despedirlo con un suspiro que alcanzó a tocar el cielo: Sunshine of your love, con la que se desbordó toda la intensidad para aclamar y venerar la ruta del tour mundial de Eric Clapton.

Clapton fue padre de una niña a sus 57 años

El legendario guitarrista Eric Clapton se convirtió, a sus 57 años, en el flamante padre de una niña.

Según informa hoy la prensa británica, la pequeña Julie Rose nació en la ciudad estadunidense de Columbus, Ohio, en la casa de la madre, Melia Mcenry, de 25 años.

El músico, que tiene una hija adolescente, fruto de una breve relación con una asistente de estudio, atravesó hace diez años el momento más duro de su vida con la muerte de su hijo Conor, a los cuatro años, al caerse del piso 53 de un rascacielos en Nueva York. A él le dedicó la canción Tears in Heaven (Lágrimas en el cielo), que lo devolvió de lleno a la escena musical.

Clapton conoció a Mcenry hace dos años en una fiesta en Los Angeles.