MARTES Ť 12 Ť JUNIO Ť 2001
Ť Seguros popular, social y privados, clave para ascender en clasificación de OMS, dice
Frenk anticipa que en el 2006 todo mexicano tendrá servicios de salud
Ť El único cambio al IMSS será que se "elevará la calidad de la atención para evitar las fugas de usuarios"
CAROLINA GOMEZ MENA
Con la puesta en marcha del seguro popular, el fortalecimiento del seguro social y el incentivo a los seguros privados, al concluir el presente sexenio la totalidad de los mexicanos contará con acceso a los servicios de salud, auguró Julio Frenk Mora, titular de la secretaría del ramo (Ssa), quien subrayó que la "justicia en el financiamiento" de salud que traerá consigo el seguro popular, permitirá al país ascender del lugar 144 al 26, "uno mucho más digno" en la clasificación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) respecto del desempeño de los sistemas de salud.
Al participar en la quinta reunión consultiva de la Comisión sobre Macroeconomía y Salud (CMS), de la OMS, con la ponencia Hacia una protección financiera universal en México, Frenk detalló que la "estrategia es movilizar las tres grandes modalidades de protección económica" en salud antes mencionadas.
Dejó entrever que no se espera que alguno de los dos ejes de la seguridad social nacional, IMSS e ISSSTE, sufran alguna modificación que los prive de la función para la cual fueron concebidos.
Afirmó que el seguro social "seguirá creciendo conforme lo haga la economía, porque está vinculado a la expansión del empleo formal", y agregó que la única modificación sustancial en él será que se "elevará la calidad del servicio para evitar las fugas de usuarios" y con ello disminuir el pago de bolsillo.
Privatización silenciosa
Sugirió que el gasto de bolsillo es el único enemigo de la seguridad social como es entendida actualmente, ya que es éste la "verdadera privatización silenciosa de los sistemas de salud" y adelantó que la meta para fines de la presente administración es reducir 60 por ciento el gasto de bolsillo.
Explicó que los casi 3 millones de hogares con gastos catastróficos en salud (que invierten 30 por ciento o más de sus ingresos en urgencias médicas) hoy representan 3.4 por ciento, pero que al concluir el sexenio sólo representarán 1 por ciento, es decir, menos de un millón.
Reveló que 75 por ciento de los hogares mexicanos carecen de seguridad social y que por ello, 5.2 por ciento de ellos se empobrecen cada trimestre, a causa de los gastos en salud que hacen.
Del restante 25 por ciento, es decir, los hogares de asegurados, pese a que aparentemente no deberían tener gastos de bolsillo en salud, 3.1 por ciento ven mermada su capacidad económica en el mismo lapso. Ello evidencia, según Frenk, "una gran falla en el esquema de seguridad social", pues a causa de la "baja calidad" de los servicios de salud pública se obliga a la población derechohabiente a pagar más de una vez por la atención médica, primero mediante los descuentos por IMSS o ISSSTE y cuando se recurre a servicios particulares.
En cuanto a los seguros privados, indicó que además de "estimular" su adquisición el gobierno prevé que esta compra se realice dentro de un marco regulatorio nuevo que permita que las primas sean deducibles de impuesto, ello si se aprueba la reforma fiscal.
El secretario reconoció que para enganchar a la población en el esquema del seguro popular, además de "identificar colectividades naturales para hacer una afiliación colectiva", el gobierno tendrá que desplegar una gran campaña de "mercadotecnia social" para convencer a los mexicanos del sector informal que "en vez de pagar de sus bolsillos, prepaguen en un sistema como el seguro popular".
Ejemplo a seguir
Por la mañana, Paul Gertler, director del Programa de Posgrado en Administración de Servicios de Salud de la Universidad de California, durante la presentación de Estrategias Integrales para la Reducción de la Pobreza alabó los logros alcanzados por el programa social mexicano Progresa, el cual fue presentado a la audiencia internacional presente como un ejemplo a seguir; tanto así que Argentina, Nicaragua y Brasil, entre otros países, desean importar el modelo.
Tras exponer que la CMS está convencida de que la relación entre pobreza y salud pueden ser ancla o impulso para que un país arribe o no al desarrollo, señaló que "una de las peores tragedias de la pobreza, no sólo es ella misma, sino su transmisión intergeneracional" y la imposibilidad de romper su herencia. De ahí -prosiguió- la importancia de que se generen programas sociales que produzcan la ruptura intergeneracional de la pobreza, y especificó que sólo aquellos que buscan desarrollar recursos en capital humano atendiendo a la salud, alimentación y educación son los más efectivos.
Sostuvo que el Progresa "ha tenido un impacto indudable en las más de 2 millones de familias enroladas", y expuso las cifras de un estudio: 70 por ciento de las familias Progresa mejoraron su alimentación y la atención prenatal; los niños de cero a 24 meses de edad tuvieron en promedio un crecimiento de talla de 4.1 por ciento y hubo aumentos sustanciales de la hemoglobina de los menores de entre cuatro y ocho años, con lo que la anemia estaría en retirada. También en los infantes de cero a cinco años se redujo la morbilidad en 0.5 por ciento, mientras que la mortalidad cayó 25 por ciento. Asimismo, el uso de clínicas en las comunidades Progresa habría experimentado 9.5 por ciento de incremento y entre los adultos la permanencia en hospitales por padecimientos eventuales habría disminuido entre 15 y 20 por ciento. No obstante los logros mencionados, para el especialista la "transferencia de recursos" de Progresa es aún insuficiente ante el enorme reto que tiene por delante.
Fondo internacional, propone OMS
Horas antes, Gro Harlem Brundtland, directora general de la OMS, en su discurso inaugural se pronunció por crear un fondo mundial para el combate a las enfermedades ligadas a la pobreza, como tuberculosis, malaria y VIH/sida.
Detalló que este fondo debe tener la capacidad de transferir los recursos acumulados de manera rápida y eficiente, particularmente hacia los países con mayores carencias económicas.
Tras aclarar que este fondo internacional "será un apoyo para las economías débiles, pero nunca un remplazo" de la inversión que debe ejercer cada nación en el abatimiento de sus problemáticas de salud, resaltó que las aportaciones a él tendrían que provenir de países ricos, del sector privado, así como de los bancos mundiales ligados al desarrollo.
En conferencia de prensa posterior, declinó especificar cuál podría ser la estrategia para que un país determinado pueda aspirar a recibir recursos provenientes del fondo, pues dijo que se trata sólo de una propuesta. Sin embargo, el estadunidense Jeffrey Sachs, presidente de la CMS, deslizó que el fondo mundial será una de las principales sugerencias que emitirá en mayo próximo la CMS, una vez que concluya la labor que le dio origen, es decir, hacer de la salud el eje de las políticas de desarrollo en cada país.
Sachs, pese a ser defensor de la globalización económica, admitió que ésta ha tenido pros y contras en cuanto a permitir disminuir las brechas sanitarias entre los países desarrollados y los que no lo son. Citó como uno de los principales puntos oscuros de la mundialización financiera que además de la transferencia rápida de recursos favorece el intercambio de enfermedades entre las naciones, particularmente por el abatimiento de fronteras y la migración que trae aparejada; "socava la parte cultural", lo que puede llevar a los adolescentes -de manera especial- a incurrir en comportamientos "erráticos" que incrementan el consumo de alcohol, tabaco; comportamientos que favorecen la propagación de enfermedades infecciosas, e incentiva la fuga de cerebros.