MARTES Ť 12 Ť JUNIO Ť 2001
Ť Exigían castigo al homicida de su compañero
Se amotinan 50 reclusos en penal de Tapachula por el asesinato de un reo
RODOLFO VILLALBA SANCHEZ CORRESPONSAL
Tapachula, chis., 11 de junio. Cincuenta reclusos del penal número tres se amotinaron en protesta por el asesinato de uno de sus compañeros durante una riña con otro interno.
El problema inició alrededor de las 10:45 horas, cuando Adín Rodríguez Guillén, recluido por el delito de violación, intentó asaltar a Samuel Flores Ochoa, preso por el delito de privación ilegal de la libertad y sentenciado a 26 años de prisión.
La noche anterior Flores Ochoa había sido despojado por Rodríguez Guillén de 600 pesos, dos anillos, una cadena y un pulsera de oro, por lo cual lo buscó y con una punta lo mató.
Flores Ochoa, quien fungía como encargado del área, señaló que Rodríguez Guillén obedecía órdenes de Roberto Rodríguez Ramírez, quien pretende implantarse como el jefe de internos y mantener un control absoluto en el reclusorio.
Indicó que le ocasionó a su rival dos heridas y que los celadores lo trasladaron a un hospital de la ciudad pero murió en el trayecto, motivo que originó la molestia de medio centenar de reclusos, quienes se amotinaron.
Durante la revuelta, los reclusos rompieron ventanas con piedras y palos para exigir castigo contra el asesino, pero ante la presencia de los celadores y miembros de Seguridad Pública se controlaron y retornaron a sus celdas.