Ť Comenzó su gira mundial The Dorwned
Madonna hizo vibrar a 18 mil fans en el Papau Sant Jordi de Barcelona
DPA
Barcelona, 9 de junio. Con un chou caracterizado por un impresionante despliegue escénico, la estrella pop estadunidense Madonna comenzó esta noche su gira mundial The Dorwned World Tour ante 18 mil delirantes espectadores en el Papau Sant Jordi de Barcelona.
La diva repasó a lo largo de una hora y media gran parte de las canciones de sus dos últimos discos, Music y Ray of light, y ofreció además versiones nuevas de algunos de sus grandes éxitos, como Holiday y La isla bonita.
Acompañada de seis músicos y diez bailarines, la cantante de 42 años se mostró en su mejor forma y conectó fuertemente con el público, que coreó cada una de sus canciones. Comenzó vestida de roquera punk y sorprendió tocando la guitarra eléctrica en Candy perfume girl.
Contra el mal trato a las mujeres
En la segunda de las cuatro partes en las que estuvo dividido el espectáculo, la cantante apareció vestida de geisha y, entre coreografías inspiradas en las artes marciales y videos que proyectaban imágenes de su rostro herido, representó un alegato contra los malos tratos a las mujeres, con canciones como Paradise not for me, Nobody's perfect y Sky fits Heaven.
La estrella despertó alaridos entre sus seguidores cuando saltó desde una plataforma móvil suspendida sólo de unos cables.
Reapareció vestida con jeans y sombrero de cowboy, el look con que se presentó en su último disco y con el que buena parte de los espectadores acudió al concierto. Sola con una guitarra acústica cantó I deserve it y Secret y desató una de las mayores ovaciones de la noche con Don't tell me. Luego se subió a un toro mecánico y cantó Human nature al ritmo de movimientos sensuales.
El escenario, de 24 por 24 metros, volvió a cambiar para presentar un ambiente español, con velas y toreros bailando, mientras sonaba una versión instrumental de Don't cry for me Argentina. Madonna apareció con peinado "a lo Evita" y un vestido negro, e interpretó en español What it feels like for a girl.
Con La isla bonita, para la que otra vez tomó la guitarra, el público volvió a entregarse por completo y no paraba de cantar, al tiempo que un bailarín hacía pasos de flamenco al ritmo de las castañuelas.
El final de fiesta fue a toda marcha, con todos los espectadores saltando con Holiday y Music, mientras en una pantalla gigante se exhibían a velocidad de vértigo imágenes de toda la carrera de la artista y desde el techo del Palau Sant Jordi caía una lluvia de papelitos dorados.
No hubo encore, aunque el público lo pidió durante al menos quince minutos.
Madonna, que había realizado su última gira mundial en 1993 con The Girlie Show, volverá a actuar en Barcelona mañana, tras lo cual seguirá viaje a Milán, Berlín y Londres. A fines de julio, el Drowned World Tour se trasladará a Estados Unidos, donde finalizará en Los Angeles el 14 de septiembre.