Ť Obtuvo 77 por ciento de los votos y gobernará un nuevo periodo de cuatro años
Fue relecto el presidente reformista iraní Mohammad Jatami con arrolladora votación
Ť La oposición conservadora reconoció su revés Ť Alemania, primer país en felicitarlo
AFP, DPA Y REUTERS
Teheran, 9 de junio. El presidente reformista de Irán, Mohammad Jatami, fue relecto hoy para un nuevo periodo de cuatro años por mayoría absoluta de 77 por ciento de los votos, 21.6 millones de sufragios, al darse a conocer esta noche resultados oficiales a través del Ministerio del Interior.
Mientras los opositores, en su mayoría conservadores, reconocían su revés, Jatami, de 57 años, saludó su triunfo abrumador al calificar lo sucedido en las urnas como una "victoria de la democracia y de la libertad", y subrayó que "el pueblo intentó ofrecer un modelo adecuado de una sociedad fundada en la moral y los valores religiosos, conjugados con la democracia y la libertad".
En lo que muchos consideraron como un referéndum sobre la política reformista de Jatami, en su declaración "felicitó" al guía de la república islámica, ayatola Ali Jamenei, así como a "los intelectuales responsables y cada persona de este pueblo, en particular a los adolescentes y a los jóvenes", además de los nueve rivales en los comicios.
Cientos de estudiantes expresaron su júbilo en las calles en esta capital al grito de "Jatami, te queremos" y "viva la democracia". A su vez, la radio y televisión estatal anunciaron que el presidente resultó relecto por mayoría absoluta y le desearon "mucho éxito en su trabajo", en tanto que la prensa reformadora lo interpretó como "la triunfal victoria de las reformas".
Poco antes de que resultara relecto, Jatami había señalado que un segundo triunfo electoral sería una indudable confirmación de su política de reafirmar la democracia islámica en el país, todo esto sin perder de vista que el presidente reformista ahora deberá en-frentar nuevamente la cerrada resistencia del clero conservador.
Jatami salió avante en este desafío, que era obtener al menos el mismo resultado de 1997, cuando fue electo por primera vez con 70 por ciento de los sufragios, a fin de reforzar su posición frente a los conservadores, cuyos poderes siguen siendo más importantes que los del mismo presidente.
Esto es porque a pesar de que los reformistas controlan el Ejecutivo y el Legislativo, el verdadero poder sigue en manos de los conservadores, quienes de ese modo lograron frenar el ritmo de las reformas durante el primer mandato del presidente.
De hecho, los políticos conservadores siguen dominando numerosas instituciones del régimen, como la justicia. Además, el presidente tiene menos poderes que el ayatola Jamenei, la única referencia de los conservadores y quien es el jefe de las fuerzas armadas, con autoridad en política exterior y decisión para destituir al presidente del país por "incompetencia".
Con todo, en estos comicios presidenciales el principal rival de Jatami, el conservador Ahmad Tavakoli, obtuvo 16.5 por ciento de los votos, mientras los otros ocho candidatos quedaron bastante lejos con resultados inferiores a 3 por ciento, de acuerdo con la agencia oficial Irna.
Los medios de prensa en su mayoría destacaron la alta tasa de participación, con 83 por ciento, que fue muy similar a la de 1997. Incluso esto llevó a que el horario de votación se ampliara a entre 10 y 15 horas, e incluyendo los votos de los iraníes que viven en el extranjero.
Justamente Jatami, acusado por los conservadores de minar al régimen islámico otorgando una libertad sin precedentes, logró también cerca de 90 por ciento de los votos de unos 4 millones de iraníes en el exterior. Asimismo, el presidente relecto se adjudicó entre 80 y 90 por ciento de los votos en 10 de las 28 provincias del país.
Su política liberal-cultural, de libertad de prensa y libertades sociales, estimuló a Occidente y a los países árabes a terminar el aislamiento político del régimen de los mulás iraníes, y el mandatario calificó esta era como de "diálogo de las civilizaciones".
Alemania fue el primer país en felicitar a Jatami por su triunfo, al considerar que con ello sale fortalecida la democracia y el estado de derecho, en tanto que el ayatola Jamenei anunció una amnistía para 409 prisioneros condenados por tribunales civiles, revolucionarios o militares.