DOMINGO Ť 10 Ť JUNIO Ť 2001
PAGINA 9
Ť Lourdes Galaz
Ť Bush y Fox se juntan por quinta vez este año en Shanghai
Ť Cambalache diplomático: voto en la OMC por la ONU
Ť México va por la membresía que usan Jamaica o Mali
Las pretensiones de la cancillería
Si alguien piensa que el Presidente mexicano se fue al Lejano Oriente sólo de turista, seguramente es amnésico o un famoso alemán (Alzheimer) lo hace perder la cabeza. Como lo hicieron los tres priístas que lo antecedieron en Palacio Nacional, Vicente Fox llegó a Corea, Japón y China a promover, personalmente, el comercio y las inversiones. "Quien no invierta hoy en México es un tonto", diría el mandatario visitante ante funcionarios de Beijing y empresarios chinos enriquecidos a fuerza de usar el poder del partido o con la apertura mundial del comercio lícito o al margen de la ley. Pareciera que frente a la recesión económica de su principal socio (quien compra más de 80 por ciento de las exportaciones mexicanas) la administración foxista se obligó a apretar el paso y buscar nuevos mercados. La recesión se globalizó, aunque el jefe de la Reserva Federal de Estados Unidos ya advierte que, para el segundo trimestre del 2002, repuntarán las ganancias, igual en las naciones ricas que en los países empobrecidos con el neoliberalismo y la globalización de los mercados.
Fox, como primer Ejecutivo de un "gobierno de empresarios dispuestos a hacer negocios", anda en busca de inversiones, cueste lo que costare, hasta la entrega al capital extranjero de sectores estratégicos como el energético y las telecomunicaciones, tal cual lo comentó frente a capitalistas japoneses. Además, Fox es un convencido de la globalización y del libre mercado. Aunque en su viaje a países asiáticos el Presidente se aplicó en la búsqueda de capitales, también se sumó a las acciones de cabildeo que encabeza el canciller Jorge Castañeda. Sí, ciertamente, la cancillería tiene su atención puesta en un asiento en el máximo órgano de decisión de las Naciones Unidas. Alguien convenció (Ƒserás tú, Porfirio?) al señor Fox que "es de mucho mundo" y "da estatus en la sociedad" de las naciones el tener una membresía en el Consejo de Seguridad de la ONU.
Pareciera que el Presidente no ha tenido tiempo de enterarse bien a bien de qué se trata. Tal vez ni sepa que aquel consejo se integra con 15 miembros, cinco de ellos han sido y son permanentes (Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, China y la unión de naciones soviéticas, hoy la disminuida Rusia) desde la conformación de la ONU, al fin de la Segunda Guerra Mundial. Ninguna decisión de trascendencia para el mundo se toma sin el voto afirmativo de los cinco miembros permanentes. Además tienen derecho a veto de cualquier iniciativa. Sólo las "cuestiones de procedimiento" las decide el coto de nueve de los 15 consejeros... En realidad, la apertura del Consejo de Seguridad a otras naciones por un periodo de dos años fue una graciosa concesión de los cinco países que deciden el futuro del mundo, prueba de sus afanes por dar una apariencia democrática a la organización.
Y bien lo sabe Jorge Castañeda, tanto como el embajador Porfirio Muñoz Ledo, que en el gobierno de López Portillo representó a México en la ONU. Eran los tiempos del canciller Jorge Castañeda senior. Más aun, en abril de 1980 y en junio de 1981, Muñoz Ledo presidió el Consejo de Seguridad de la ONU. Aún recuerdo los télex que
escribía y "picaba" Muñoz Ledo en persona, para informar al mundo (su mundo en la prensa nacional) de este o aquel "triunfo (discursivo) del embajador mexicano" frente a una "disminuída y titubeante" señora (Jane) Kirkpatrick, casualmente la representante del gobierno de Washington en la ONU y su máximo consejo... Créalo o no, el intenso cabildeo del canciller Castañeda y su equipo por todo el mundo pretende ganar el voto de la asamblea general para que, a partir del 1Ɔ de enero del 2002, México sustituya en el Consejo de Seguridad a Mali o a Jamaica. Podría ser a Bangladesh, Ucrania o Túnez. Los cinco representantes de esos países dejan la silla que ocuparon por dos años. Y es que los lugares en el Consejo de Seguridad son rotatorios y puede ocuparlos -24 meses- cualquiera de los países miembros de la ONU, obviamente con el voto de la asamblea general de la ONU. También podrían acceder a la presidencia que se rota mensualmente, como en 1980 y 1981 la ocupó Muñoz Ledo.
Es tanto el interés de la cancillería por el asiento en el Consejo de Seguridad, que ya trascendió de la gira del presidente Fox por el Lejano Oriente que la diplomacia foxista habría ofrecido el voto de México (y de algunos aliados) a favor del ingreso de China en la Organización Mundial de Comercio (OMC), que se reúne en Qatar (allá por el mundo árabe) el mes de noviembre. Claro, a cambio del valiosísimo voto chino a favor de la membresía de dos años en el máximo consejo. Por lo menos así se hizo evidente en la reunión que esta semana celebraron en Shanghai los ministros de Comercio de las 21 naciones que conforman el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC). Se trata de Australia, Brunei, Canadá, Corea del Sur, Chile, China, Estados Unidos, Filipinas, Hong Kong, Indonesia, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Papua Nueva Guinea, Perú, Rusia, Singapur, Taiwán, Tailandia y Vietnam. El secretario de Economía mexicano, Luis Ernesto Derbez, suscribió el acuerdo de la APEC para impulsar una nueva ronda de la Organización Mundial de Comercio y, por supuesto, el ingreso de China.
Vale decir que el ministro chino de Comercio Exterior, Shi Guangsheng, confirmó que previa a la reunión de la OMC en Qatar, habrá en Shanghai una cumbre de los jefes de Estado y de gobierno de las 21 naciones de la APEC. El encuentro sería en octubre. Por supuesto llegarán los de este lado del Pacífico, desde el presidente George Bush hasta el primer ministro de Canadá, Jean Chrétien; Ricardo Lagos, de Chile, y también -claro- Vicente Fox. El presidente Bush confía en que para entonces ya tendrá en sus manos la potestad que solicitó al Congreso de Estados Unidos para negociar por la vía del fast track los acuerdos comerciales para garantizar el libre comercio a nivel mundial. El Congreso cierra su periodo legislativo la primera semana de octubre.
Si los negociadores de la Casa Blanca, que coordina el habilidoso Bob Zoellick (representante comercial de Bush en el exterior), no logran los votos suficientes en el Senado -con una exigua y frágil mayoría demócrata desde el martes pasado- y unos 220 votos afirmativos en la Cámara de Representantes, la autoridad del presidente de EU para negociar acuerdos comerciales será prácticamente nula. Bush senior tuvo la potestad hasta firmar el TLC de Norteamérica. Bill Clinton buscó sin éxito la garantía del Congreso para el fast track. Hace un mes, el 10 de mayo, Bush solicitó plena autoridad para negociar libremente acuerdos comerciales. La tiene difícil. Su partido perdió la mayoría en el Senado, tras la deserción del senador republicano James Jefford, que considera "demasiado conservadora" a la administración Bush... Ese es otro asunto. Vicente Fox, por lo pronto, consiguió en Oriente los votos de China, Japón y Corea para la membresía del Consejo de Seguridad de la ONU. También disfrutó unas merecidas vacaciones con su equipo de Los Pinos, y algunos amigos... Para muestra, las fotos en Xián con los guerreros de terracota, que ordenaron imprimir Jorge Castañeda, Emilio Azcárraga Jean (el de Televisa), Jorge Mendoza (de Tv Azteca) y Francisco Ortiz (el que cuida la imagen presidencial).
EN 3 TIEMPOS
Los ricos en eu pagan mas impuestos... ganan mas
Oficial: blanqueo de 5 billones de dolares
Una campaña de imagen bien vale $150 mil
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, promulgó ya su ley de reducción de impuestos por 1.35 billones de dólares. Y aunque la reducción fiscal se llevará hasta diez años, vale traer a cuento que allá los ricos pagan ahora más impuestos, y no precisamente por un alza en las tasas fiscales. Es que crecieron los ingresos de los más acaudalados. Obvio, los más liberales opinan que creció -también- la disparidad entre ricos y pobres, y los conservadores dicen que hay cambios demográficos...Y todo viene a cuento porque, acá entre nos, el Congreso anunció el viernes que la reforma fiscal se va hasta fin de año, mientras en Los Pinos se afirma que "hay disposición para negociar" con los legisladores, gobernadores y demás líderes políticos y empresariales...hasta con el mismísimo Carlos Slim.
La lucha contra la evasión fiscal y el blanqueo de dinero se complica. La administración Bush pretende desentenderse del combate contra los paraísos fiscales, según advierten expertos de la OCDE, que agrupa a una treintena de países, entre ellos México. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico hizo una lista negra de 35 zonas que son verdaderos paraísos fiscales. Se estima que en esas zonas se esconden unos cinco billones de dólares, 3 por ciento de la riqueza del planeta. Del total de esos capitales, entre 500 mil y 800 mil millones provienen de actividades ilícitas. Y resulta que la Casa Blanca no ve con buenos ojos una ofensiva internacional para "perseguir el secretismo que permite la evasión fiscal"...también allá se dan casos.
El pasado 7 de junio se puso en evidencia el estilo del nuevo gobierno. Santiago Creel anunció que se "ciudadaniza" el Premio Nacional de Periodismo. Lo mismo propuso Ernesto Zedillo, y hasta sugirió una reforma legal impulsada desde los medios y sus profesionales. Y como se publicó, el cuestionado coeditor del semanario Zeta, Jesús Blancornelas, "vio pasar" el estímulo de 150 mil pesos. Lo recibió y dijo que lo donará. Su postura incomodó a los colegas que con todo merecimiento aceptaron el premio. Lo mismo ocurrió con la conductora Carmen Aristegui, que a sugerencia de Gobernación habló a nombre de los galardonados, sin consultarlos. Y en el gremio se comenta que una campaña de imagen bien vale 150 mil pesos de la hacienda pública, y es barata... total, bisnesarebisnes.
Ilustración: Luis Fernando / Serie: Emparejador de conciencias
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