VIERNES Ť 8 Ť JUNIO Ť 2001

Ť Jesús Ortega insiste en que se debe suspender precautoriamente la venta de Banamex

Expone PRD pesquisas del Congreso de EU sobre lavado de dinero por parte de Citibank

Ť También los bancos poderosos pueden tener inadecuados controles contra delitos, dice

ANDREA BECERRIL

La fracción del PRD en el Senado de la República tiene nuevos elementos para insistir en que se suspenda precautoriamente la venta de Banamex a Citigroup, advirtió ayer Jesús Ortega. Informó que un día antes recibió del Congreso de Estados Unidos el grueso expediente en torno a las investigaciones que se siguen a Citibank por lavado de dinero, en las que se detalla que durante tres años seguidos ha sido inspeccionado y en la actualidad es nuevamente motivo de seguimiento en torno a su actuación en Argentina.

Se trata, precisó Ortega, de un documento de más de mil hojas que le envió el senador Carl Levin, uno de los más activos integrantes del Subcomité Permanente de Investigaciones sobre Operaciones de Lavado de Dinero en la Banca Privada, en el que se detallan las irregularidades y escándalos en que se ha visto envuelto Citibank, de manera destacada por el "caso Raúl Salinas de Gortari".

Escándalo Salinas

Además de esta investigación sobre el hermano del ex presidente de la República, que por su magnitud e implicaciones políticas es la más importante, el expediente de Citibank da cuenta de muchas otras operaciones de lavado de dinero, algunas referidas a fraudes y otras operaciones irregulares con gobernantes dictatoriales, como el de la república africana de Gabón.

"Nos preocupan mucho los constantes problemas que en la década de los 90 ha tenido Citibank en todo el mundo en relación con el lavado de dinero", precisó el coordinador perredista, e hizo notar que conjuntamente con el equipo de asesores económicos de su fracción -que encabeza Mario di Constanzo- comenzaron un análisis detallado de la documentación que les envió el legislador demócrata estadunidense.

Una primera valoración, agregó, deja ver que la investigación del Congreso estadunidense en torno a las actividades de Citibank fortalecerá la demanda del PRD para que se suspenda precautoriamente la operación de compra de Banamex, hasta que se deje a salvo el interés público.

Tras el primer análisis al legajo de documentos remitidos por el subcomité del Senado de Estados Unidos, que ayer efectuaron la fracción perredista y su asesor Di Constanzo, se encontró que llaman la atención cuatro estudios de caso sobre lavado de dinero en Citibank, el banco más grande de Estados Unidos, con más de 700 mil millones de pesos de dólares en activos.

"Desde el escándalo Salinas en 1995 hasta el fraude de Carlos Gómez en 1998, si algún banco ha tenido motivo para revisar sus controles en la prevención del lavado de dinero es Citibank. Incluso ha sido éste, ente los 49 bancos inspeccionados por la Reserva Federal de Estados Unidos, el que durante tres años seguidos ha sido motivo de inspección, debido a que ha estado en dificultades por problemas relacionados con la prevención del lavado de dinero."

Resaltó que "a pesar de haber puesto en práctica políticas, sistemas internos y programas de capacitación a fin de combatir el lavado de dinero, su trayectoria en la década de los 90 ha estado marcada por dificultades relacionadas con estas prácticas, lo que pone de manifiesto que también los bancos poderosos y con recursos pueden tener inadecuados controles contra operaciones ilegales".

En ese análisis, que realizó de manera inicial el PRD, se advierte que durante los ochentas, Citibank operó con cuatro divisiones: hemisferio occidental, que incluye Estados Unidos y América Latina; EMEA (por sus siglas en inglés), para Europa, Oriente Medio y Africa; la división Japón y la división Asia-Pacífico, que incluía Hong Kong y Singapur. También operó conjuntamente con cuatro compañías fiduciarias llamadas Cititrust, en Bahamas, islas Caimán e isla de Jersey, y Confidas, en Suiza.

Estas firmas ayudaban a crear y administrar fondos de inversiones y corporaciones fantasmas para los clientes de banca privada de Citibank. Incluso, después del escándalo Salinas en 1995 fueron cambiadas a Nueva York con el objeto de centralizar la administración de sus divisiones y aplicar programas para combatir el lavado de dinero.

En la parte dedicada al caso Salinas de Gortari, la investigación del Congreso estadunidense -precisó Ortega- detalla su trayectoria de funcionario público, su relación con Carlos Hank Rhon y con la banquera Amy Elliot para los movimientos de dinero que efectuó.

"Todo se hizo a través del Cititrust en las islas Caimán y se activó una corporación llamada Trocca Ltd., que sirvió como propietaria en el registro de las cuentas bancarias de las que se beneficiaron Raúl Salinas de Gortari y su familia. Trocca Ltd. utilizó otras tres compañías, que funcionaban como su consejo de administración, y por ello el nombre del hermano del ex presidente no figuraba entre los accionistas. En el expediente se incluyen cheques de caja y la forma como se triangulaban las operaciones."

La forma de operar es similar en otros casos, como el de Azif Ali Zardari, ex funcionario paquistaní, y de Omar Bongo, presidente de Gabón desde 1967.

Se destaca asimismo, agregó el perredista, que las auditorías durante los 90 a Citibank mostraron importantes deficiencias en las políticas de combate al lavado de dinero, entre otras, información inadecuada sobre sus clientes, así como un monitoreo inadecuado de sus transacciones. Incluso, en una escala de uno a cinco -donde uno es el peor puntaje- los auditores internacionales calificaron con dos y tres a ese banco.

Los auditores fueron particularmente críticos con la sucursal de Citibank en Suiza, la que en 1995 obtuvo la única calificación de uno dada en una auditoría a un banco privado.

"En el reporte que recibimos ayer, que incluye investigaciones el subcomité hasta el 28 de febrero de este año, se advierte que de nueva cuenta hay seguimiento a las actividades de Citibank, esta vez con respecto a su desempeño en Argentina".

Ortega precisó que además de un estudio exhaustivo del expediente Citibank, seguirán en contacto con Carl Levin e incluso solicitarán un encuentro entre representantes del Senado mexicano y el Congreso estadunidense.

Señaló que se puede acudir a convenios internacionales sobre lavado de dinero para detener la venta de Banamex a una corporación como Citibank, que tiene tal historial en su propio país.