MARTES Ť 5 Ť JUNIO Ť 2001

REPORTAJE

Elba Esther Gordillo, 4 años al frente del sector popular del PRI

Autodestapes y lagunas legales en la disputa por la CNOP

Pretextos para quedarse en la secretaría sobran: Bonilla Robles; los sectores son autónomos: Sauri Riancho; hoy ningún grupo tiene la fuerza para llevar a cabo imposiciones: Ruiz de Teresa

ENRIQUE MENDEZ

Poco antes de las elecciones presidenciales del 2000, el CEN del PRI le "recomendó" a Elba Esther Gordillo que para evitar un jaloneo interno que provocara una caída de votos a favor del candidato del partido, se quedara al frente del sector popular. Era junio. Y ahora, a un año y dos meses de que su periodo estatutario concluyera oficialmente, ella continúa al frente de la CNOP no sólo porque no se ha convocado al proceso de sucesión que obligan los estatutos, sino por una laguna legal que no precisa fecha para llevar a cabo una elección.

De acuerdo con las reglas que la propia Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP) aprobó en marzo de 1997, el dirigente debe permanecer al frente del sector sólo tres años, y la profesora ya cumplió cuatro.

Después de la sesión extraordinaria del Consejo Político Nacional (CPN), en la que se eligió secretario general del partido a Rodolfo Echeverría, en abril pasado, el debate sobre la sucesión en la CNOP se reavivó.

Y es que a finales de 2000, las organizaciones afiliadas a la Coalición Nacional de Agrupaciones Productivas y de Servicios (CNAPS) convocaron a una reunión en el auditorio Plutarco Elías Calles de la sede nacional priísta, que tuvo como único fin presentar como su candidato al senador José Bonilla Robles, ex dirigente de la Confederación Nacional de Propietarios Rurales y hacendado de Zacatecas.

En ese encuentro, por primera vez se hizo público que Gordillo Morales había terminado su periodo estatutario, y que debía irse. Incluso se distribuyó un documento, enviado desde la secretaría general de la CNOP, en el que la directiva del sector afirmaba que no se realizaría dicho evento. El texto fue utilizado por Bonilla como muestra de que la cúpula cenopista intentaba boicotearlo.

Poco después, el ex coordinador de giras de la campaña de Francisco Labastida Ochoa, Guillermo Ruiz de Teresa, fue designado secretario adjunto a la secretaría general de la CNOP, decisión que fue asumida por las organizaciones opositoras a Elba Esther Gordillo como un aviso de una supuesta "imposición" de nuevo dirigente.

De la CNOPC, considerado en los buenos tiempos electorales del PRI uno de los sectores que aportaba el grueso de los votos urbanos a los candidatos priístas, hoy se han retirado y alejado gremios como los de taxistas, boleros, tianguistas, transportistas, locatarios, voceadores, cooperativistas y vendedores de billetes de lotería, que se han afiliado o simpatizan con el PRD y, en pocos casos, con Acción Nacional.

En el sector permanecen sólo los grandes sindicatos corporativos, que por sí mismos no son garantía de voto automático a favor del PRI.

Panorama desastroso

El propio José Bonilla califica de desastroso este panorama, mientras que Ruiz de Teresa admite que la CNOP se olvidó de las clases medias y de los jóvenes, que finalmente le retiraron el voto al tricolor.

No sólo el sector está en decadencia política. A su edificio sede en la calle José María Lafragua, número 3, en la colonia Tabacalera, aunque reforzado en su estructura, le falta mantenimiento.

La mayoría de los 12 pisos del edificio están subutilizados u ocupados con cajas de cartón con archivos; se restringió el uso del teléfono a llamadas locales y, con un protector eléctrico, se eliminaron las de larga distancia y a celulares. La CNOPgordillo1 tiene un presupuesto reducido, y el subsidio que le otorga el PRI es apenas de casi 500 mil pesos mensuales.

Eliminados de otros edificios priístas, el de la CNOP es el único en el que todavía se lucen los carteles con propaganda de Francisco Labastida Ochoa.

Muchas oficinas están vacías, los funcionarios van poco y apenas y funciona "la estructura formal" de la confederación. Después de la derrota electoral del 2 de julio hubo un recorte de personal, y aun así algunas secretarias se dedican a leer revistas de espectáculos y moda, o a pintarse las uñas cuando sus jefes no llegan a trabajar.

Y es que la profesora Gordillo Morales se presenta de vez en cuando a su despacho. Llega en algunas ocasiones "de sorpresa", y desecha todas las solicitudes de entrevista que se le entregan.

El día de su cumpleaños, las secretarias que recibieron las llamadas de felicitación confiaron que la maestra "está en París". Uno de sus colaboradores revela: "no le mentiría si le digo que está más preocupada en este momento por lo que pasa en el SNTE".

El año pasado fue la única integrante del CEN que buscó un cargo en el gabinete foxista, a lo que la directiva del tricolor siempre respondió que si algún militante aceptaba una invitación a trabajar en el gobierno, sería a título personal.

Más allá de ello, ni en la CNOP ni en el CEN del PRI hay un compromiso expreso de convocar a una elección de la secretaría general del sector. En Lafragua dicen que un proceso interno se llevará a cabo cuando lo proponga la cúpula del partido, y en la directiva responden que los sectores son autónomos.

El jueves pasado se le preguntó a la presidenta del PRI, Dulce María Sauri, por qué el cambio democrático que se buscó con el relevo en la secretaría general del partido no ha llegado a los sectores, específicamente a la CNOP.

-La profesora Elba Esther Gordillo ya rebasó el tiempo que marca el estatuto, y además Ƒcómo evalúa sus declaraciones de que o cambia el PRI o se va?

-Los sectores son autónomos. Su vida interna es competencia única y exclusiva de los sectores. Respetamos las determinaciones que tomen, los tiempos que también ellos se den.

"Y en cuanto a esta expresión, creo que es muy claro: muchos compartimos no sólo el deseo, sino la necesidad urgente de cambiar a nuestro partido; (pero) lo que debemos hacer es construir entre todos un acuerdo sobre cuál es la concepción del cambio, porque lo que puede ser cambio para unos, puede ser que para otros no lo sea".

Los aspirantes...

En público y en privado, sólo Ruiz de Teresa y Bonilla Robles afirman que buscan la directiva de la CNOP. Pero también, como es usual en la política priísta, se habla del ex gobernador de Sinaloa, Manlio Fabio Beltrones, y del secretario regional del Centro Occidente del PRI, Juan Salgado Brito.

Bonilla Robles sonríe: "šY hay muchos más! Más ahora, que después de la derrota hay muchos compañeros en la Renata (reserva nacional de talentos, en el argot político priísta), cuántos no se van a anotar".

Para Ruiz de Teresa, la prioridad en el sector popular no es plantear si Gordillo Morales debe convocar a una elección y retirarse, sino esperar a que en la 18 asamblea de delegados, convocada para noviembre, la CNOP también se plantee una reforma general.

"Aquí la pregunta es -dice- si la salida de la maestra contribuye al fortalecimiento del PRI y del sector, o lo deteriora. Mi opinión es que primero debemos redefinir el perfil del sector, reforzar la presencia de las clases medias, de los jóvenes, de los profesionistas, que tengan un lugar adónde volverse cuando se desencanten de las acciones de este gobierno, que será rápido. Tenemos que discutirlo en la asamblea, porque no podemos poner la carreta delante de los bueyes".

Rechaza las versiones de una imposición. "Es imposible. Hoy nadie, ningún grupo tiene la fuerza para hacerlo. La CNOP ya no es el botín de nadie. No hay dinero, y de ninguna manera alguien puede buscarlo, sino hacer mucho trabajo y buscar fuentes de financiamiento".

-Si no hay relevo antes de la asamblea, Ƒes válido que se quede Elba Esther Gordillo?

-Puede quedarse, si la profesora ve condiciones. Créeme, ella está haciendo un esfuerzo por quedarse, cumpliendo con su compromiso de líder, pero no está en una fiesta, incluso hasta hace un sacrificio. Su salida no asegura, en este momento, la unificación de la CNOP.

Por su parte, José Bonilla Robles asegura que es el único aspirante que reúne los requisitos exigidos en el estatuto de la confederación para participar en un proceso interno.

Sus colaboradores buscan un acuerdo con la cúpula cenopista para que el candidato sea él, así que elude las declaraciones personales con Elba Esther Gordillo.

Sin embargo, cuestiona la pérdida de capacidad de gestión de la actual secretaría general de la CNOP, y el que las organizaciones populares y de barrio hayan abandonado al PRI para irse a otros partidos, como el PRD, y que el CEN no se preocupe por influir en un cambio democrático en el sector.

Refiere que él y otros dirigentes de agrupaciones de servicios se entrevistaron recientemente con Sauri Riancho para solicitarle que, con base en los estatutos del sector, el CEN promoviera un cambio de directiva, pero ella insistió en la autonomía de la confederación. "Al PRI no le interesa reactivar a los tres sectores. Yo no busco enfrentamientos con nadie ni comprar pleitos, pero me gusta que las cosas se pongan en su lugar. Pretextos para quedarse en la secretaría sobran", afirmó.