LUNES Ť 4 Ť JUNIO Ť 2001

Internet para invidentes

Promueve el Tecnológico de Monterrey cursos para minusválidos

DAVID CARRIZALES CORRESPONSAL

Monterrey, NL, 27 de mayo. José Ignacio Suárez García es concertista, afinador de pianos y experto en el uso de la computadora. Además es capaz de leer un texto entre cinco y diez veces más rápido que cualquier persona normal. Sus habilidades son asombrosas, más al tomar en cuenta que es casi ciego de nacimiento, pues sólo distingue sombras y no colores ni formas.

José Ignacio ha sacado ventaja de sus limitaciones visuales en un mundo de dura competencia profesional. Por eso se prepara todavía más y hoy es uno de los 25 alumnos del curso especial Navegación por Internet para invidentes, que el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) inició en mayo pasado a través de su programa tec.com.mx, que en el futuro ofrecerá carreras profesionales para ciegos.

De acuerdo con Suárez García, 2 por ciento de la población mexicana tiene algún tipo de discapacidad. De esos casi 2 millones de personas, al menos 200 mil son invidentes. Por desgracia, la mayoría de ellos no puede acceder a los beneficios de la alta tecnología, la computación y la Internet.

Alejandro Cristerna, director general del programa tec.com.mx, señaló la necesidad de que instituciones públicas o privadas apoyen con equipos de cómputo a los invidentes, a fin de brindarles herramientas de capacitación necesarias para su incorporación a la vida productiva que les permitan alcanzar sus metas de desarrollo y realización personal.

Promotores del proyecto

La idea de ofrecer un curso especial de Internet para invidentes, que tiene una duración de ocho horas en su fase de programa piloto, surgió en febrero pasado, cuando Sonia García, presidenta de la Asociación Mexicana de la Retinitis Pigmentosa (AMRP) -de la cual José Ignacio es director-, se acercó al ITESM a plantear que los miembros de la asociación tuvieran acceso a los cursos en línea que imparte la institución educativa.

Cristerna informó que ya se han inscrito 25 alumnos al curso especial y se espera que una vez que se conozca masivamente la noticia, se registren miles de personas de todo México y América Latina. El director general del programa tec.com.mx aseveró que el ITESM es "la primera universidad que está impartiendo este curso en México y quizá en Latinoamérica, pues somos líderes en educación en Internet. El ITESM tiene actualmente tres esquemas educativos: el tradicional; el virtual vía satélite y el de Internet".

En tec.com.mx se manejan tres líneas de "productos": carreras profesionales, maestrías y cursos de educación continua, como el curso para invidentes, que consta de seis módulos: impacto de Internet, componentes de una computadora, sistema operativo windows, Internet, world wide web y correo electrónico.

Para ofrecerlo a los invidentes "el producto sufrió algunas adecuaciones, y se tiene el compromiso con la Asociación Mexicana de Rinitis Pigmentosa de continuar con esta oferta. Queremos hacer extensiva la invitación a todos los invidentes de lengua hispana, tanto de Latinoamérica como de Estados Unidos", señaló Cristerna. Añadió que el modelo educativo tiene mucha flexibilidad, "lo que básicamente ofrecemos es que las personas en cualquier lugar y tiempo puedan capacitarse".

En la primera etapa el curso es gratuito. El único requisito es que se solicite el registro en una asociación. Más adelante tendrá un costo de mil 250 pesos más IVA. Sin embargo, para ingresar a Navegación por Internet para invidentes los solicitantes requieren tener instalado en su computadora un lector de pantalla, que cuesta entre 700 y mil 200 dólares. El aditamento es un programa que permite que la computadora "hable", es decir, que "lea en voz alta" cuanto aparece en la pantalla. De esa forma, los ciegos tienen acceso a todos los programas de uso común de la computadora.

"De ahí se derivó la idea de ver la posibilidad de que personas invidentes pudieran tener acceso a los cursos que se ofrecen en el sistema tec.com.mx, que son ciento por ciento a través de Internet y que son para el público en general, solucionando el problema de transporte y comunicación que tenemos los ciegos, ya que podemos recibir el curso desde nuestras casas por medio de una computadora.", explicó José Ignacio Suárez.

En un futuro, dijo, "podremos llevar una carrera profesional, tomar el curso ciento por ciento en línea, con una computadora común y corriente, sin ninguna adaptación. La única diferencia es que tiene instalado el software especial (jaws for windows), que permite que la computadora hable, y así tenemos acceso auditivo a todo lo que es el sistema operativo, programas de uso común, base de datos, incluyendo Internet y correo electrónico.

"En el momento que la computadora 'hable' nosotros podemos interactuar con ella muy fácilmente, porque nos está leyendo todo lo que está en la pantalla", agregó. José Ignacio hizo una demostración y puso el lector de pantalla a una velocidad con la cual le resultaría imposible descifrar los mensajes a una persona "normal". "La voz que escuchamos es sintética, pero está muy bien hecha, es casi humana", explicó.

Es importante destacar que este lector de pantalla se adapta a las aplicaciones existentes, no las remplaza. "Anteriormente se hacían computadoras y teclados para ciegos, así como programas especiales, pero eso es muy costoso, inaccesible para la mayoría de las personas, sobre todo en países como México y América Latina", refirió José Ignacio.

El lector de pantallas es caro, pero no tanto como otros productos anteriores, entre ellos computadoras y programas especiales. Por ejemplo, una computadora diseñada para ciegos cuesta 5 mil dólares, por lo menos, mientras que el jaws for windows vale de 700 a mil 200 dólares, dependiendo del tipo de licencia.

"El software, en general, es costoso, el programa de lector de pantallas está en el rango de lo que cuestan otros paquetes, pero creo que en la medida que haya mayor conciencia de los fabricantes de este tipo de tecnología de las necesidades que hay en Latinoamérica, pienso que lo pueden hacer más accesible, pues la tecnología que se ha desarrollado para ciegos no es pensando en nuestros países, sino en mercados como los de Estados Unidos y Europa", indicó José Ignacio.

Abundó: "Esta tecnología tiene ya como 15 años, pero últimamente ha habido mayor interés de los usuarios por la facilidad del acceso a Internet. El lector de pantalla viene originalmente en inglés, pero luego se desarrolla la versión castellana en España, ahí colaboramos nosotros, porque implica mucho trabajo la traducción".

La página de la computadora se "lee" a través de comandos en el teclado, sin el mouse. Es una gran ventaja porque hay muchos textos virtuales, se pueden leer libros, "ahorita estoy leyendo la vida de Chopin", afirmó Suárez García.

"Cada vez que oprimo una letra el lector me dice qué letra oprimí, pero tengo la opción de eliminar eso, tengo la suficiente seguridad para saber qué letra oprimí, esto se aprende con cualquier curso de mecanografía, no deben verse las teclas al escribir", añadió.

José Ignacio hizo una demostración de su pericia para leer Internet con la página de La Jornada, a la cual consideró práctica. "La vamos a recomendar para los ciegos, es muy accesible, no hay problema para que el lector de pantalla haga la traducción de todos los gráficos a texto y a voz", dijo.

Por su parte, Alejandro Cristerna, director general del programa tec.com.mx, expuso que en México aún no se cuenta con las facilidades para que personas con capacidades diferentes puedan realizar estudios académicos, y quienes desean lograrlo tienen que ir al extranjero, como fue el caso de José Ignacio Suárez, quien es ciego de nacimiento.

Jose Ignacio debió realizar sus estudios de preparatoria y profesionales en las universidades de Arkansas y Boston, en Estados Unidos, ya que hace algunos años no había programas en línea en donde él pudiera cursar una carrera profesional. Envió un mensaje a quienes sufren de ceguera: "Nunca se den por vencidos, siempre habrá gente que les cierre las puertas. En cualquier parte, ya sea en el trabajo, en la escuela, uno se encuentra con dificultades, no tanto porque no se nos quiera ayudar, sino por no saber cómo, no es mala disposición de la gente, sino que simplemente no saben qué hacer. Si un ciego cuenta con la rehabilitación y las herramientas necesarias, la ceguera no es una minusvalía, es más bien una característica, la persona puede superarse e integrarse a una vida productiva".

Acceden invidentes al mercado laboral

La Asociación Mexicana de Retinitis Pigmentosa (AMRP) tiene sus oficinas en Monterrey, cuenta con 85 miembros activos y 25 no activos. José Ignacio estimó que unos cien invidentes se inscribirán en la primera fase, pues ya están capacitados en el uso de la computadora, y posteriormente se inscribirán de otros países de Latinoamérica.

El objetivo de la AMRP, añadió José Ignacio, es la integración laboral de las personas con discapacidad visual, y ha logrado éxitos en su meta. A través de la computación y el Internet, sus miembros se han integrado a empresas, en dependencias municipales y en otras áreas profesionales.

"Yo estoy a cargo del curso de computación en la AMRP, y soy músico profesional, toco el saxofón en conciertos públicos y privados; he participado en festivales internacionales de jazz, pero no he incursionado en la música comercial; además, soy instructor de tec.com.mx y soy técnico afinador de pianos", refirió.

Asimismo, dijo que casi todos los miembros de la AMPR que concluyeron sus estudios se han integrado a un empleo profesional o como obreros en proyectos de maquila, "porque contamos con una bolsa de trabajo, y cuando la persona se considera capacitada se le canaliza a un empleo".

Aseveró que entre los afiliados a la AMPR hay personas que son asesores jurídicos, "y con el manejo de la computadora amplían mucho sus posibilidades, pueden hacer consultas en Internet de los juzgados, de leyes, jurisprudencia.

"Hay otros que se dedican al área de la mercadotecnia, dan servicio de telemarketing en empresas como Chevrolet, hacen llamadas a los clientes y van capturando en la computadora toda la información, participan en encuestas, avisan de mantenimiento", indicó.

A nivel profesional, todos los miembros de la AMPR usan alguna tecnología relacionada con la computación. "Claro que frente a una persona 'normal' tenemos desventajas, pero siempre tratamos de vencerlas, eliminarlas a través de cuestiones tecnológicas y la capacitación. Pienso que si la persona invidente cuenta con las herramientas y el entrenamiento necesario, la ceguera pasa a ser más una característica que una inconveniencia", sostuvo.

A modo de despedida, José Ignacio señaló: "En otros países hay personas que se desempeñan perfectamente bien en empleos de libre competencia y en todos los niveles. Uno siempre busca desarrollar ventajas competitivas, las personas ciegas en general tienen mayor memoria, más retención de nombres, números y datos, por eso con el apoyo de este tipo de herramientas tecnológicas (la computadora), incluso tienen ventajas competitivas sobre otros compañeros de trabajo que nacieron normales de su vista".