LUNES Ť 4 Ť JUNIO Ť 2001

Ť Aquí vota la gente, no las encuestas: líder de IATSE

Sindicatos, dispuestos a hacer el milagro de que un latino gane la alcaldía

JIM CASON Y DAVID BROOKS ENVIADOS

Los Angeles, 3 de junio. "Favor de darle la bienvenida al próximo primer alcalde sindicalista de Los Angeles, Antonio Villaraigosa", dice Miguel Contreras, líder de la central obrera de esta ciudad, al encender el entusiasmo de cientos de trabajadores reunidos aquí con el propósito de lograr un milagro.

"Estamos a unos pocos días de hacer historia. Esto demostrará qué sucede cuando los trabajadores se ponen de pie", afirmó el líder de la central obrera de 800 mil agremiados.

Una alianza sin precedente entre sindicatos y latinos es, de cierta manera, el arma secreta de la campaña electoral de Villaraigosa, cuyo triunfo marcaría un cambio dramático en el mundo político de Los Angeles con implicaciones nacionales.

En el centro de Los Angeles, un ejército de trabajadores de limpieza (janitors), lavaplatos, recamareras, y bellboys se reunieron hoy en la sede de la Sección 11 del sindicato de trabajadores de hoteles y restaurantes (HERE). "ƑEstán listos? ƑListos para caminar?", preguntó María Elena Durazo, secretaria general de ese sindicato a cientos de trabajadores que estaban por iniciar un día más para promover el voto, casa por casa, colonia por colonia, a favor de Villaraigosa.

Durante el último año y medio, HERE y otros sindicatos han construido una campaña de base -la "guerra por tierra"- para esta candidatura. Para ello establecieron la Organización de Trabajadores de Los Angeles (OLAW), que ha contactado a aproximadamente a 75 mil nuevos votantes a quienes instaron a participar en las eleccions de este martes.

Esta iniciativa, afirman simpatizantes de Villaraigosa, demostrará que las encuestas están equivocadas, ya que este esfuerzo intersindical generará el voto no sólo de los que siempre acuden a las urnas, sino las decenas de miles que jamás han votado anteriormente.

"Les digo que las encuestas no votan, la gente lo hace, y si sacamos a nuestra gente, Antonio triunfará", afirmó Tom Short, secretario general del sindicato de trabajadores técnicos de teatro, cine y televisión, (IATSE).

Sus agremiados son los que operan el equipo para "la fábrica de sueños" de Hollywood, y que hoy forman parte de los que buscan fabricar un cambio político real en esta ciudad.

En una reunión en el campo de batalla clave conocido como "el valle" (el Valle de San Fernando representa una tercera parte de esta ciudad), Short y Contreras animaron a cientos de miembros de los sindicatos de electricistas, de alimentos, del magisterio, servicios y del sector público, así como el de jornaleros (el histórico UFW fundado por César Chávez) poco antes de que éstos salieran en equipos de promoción del voto.

"Vengan a votar por el futuro de Los Angeles, voten por la candidatura de la esperanza", gritó Contreras ante los reunidos aquí, quienes respondieron con el famoso coro de la lucha de los jornaleros, "Sí se puede, sí se puede".

Poco después, explicó a La Jornada que los sindicatos están construyendo una alianza "histórica" entre los sindicatos y los latinos en este cuidad.

Agregó que Villaraigosa "representa parte del nuevo Los Angeles que todos queremos. Tanta gente ha cruzado las fronteras para buscar una vida mejor aquí. Nunca en la historia se ha tenido un alcalde aquí que representa las esperanzas de estos". En entrevista con La Jornada añadió que ese movimiento que apoya a este candidato es el mismo que lucha por la amnistía, un salario digno, por acceso a la salud y para una educación mejor para sus hijos.

"Ustedes que están detrás de la cámaras (de cine y televisión), las recamareras de los hoteles, ustedes que limpian los edificios y lavan los baños, ustedes desean un salario digno, salud, jubilación, y educación para que sus hijos pueden superar donde ustedes han llegado, para ser doctores, abogados y, sí, para ser alcalde", declaró Villaraigosa ante sindicalistas, gran parte de ellos inmigrantes, que ya han transformado esta ciudad y que ahora buscan expresar su nuevo poder social en el ámbito político.