SABADO Ť 2 Ť JUNIO Ť 2001
Ť Investigadores de la UNAM apremian a invertir en ese sector para evitar crisis de abasto
Problemas de energía en 5 años, prevén expertos
Ť Juan Ramón de la Fuente hizo un recorrido por el centro de investigación en ese ramo
Ť Demandan más presupuesto para la institución; este año se les asignó sólo $30 millones
ROBERTO GARDUÑO ENVIADO
Temixco, Mor., 1o. de junio. De no invertirse en generación de energía eléctrica, en cinco años habrá dificultades para atender la demanda, advirtió Manuel Martínez Fernández, director del Centro de Investigación en Energía (CIE) de la UNAM.
Durante un recorrido por esa institución, la más importante en América Latina, se dio a conocer que 6 millones de mexicanos carecen de luz eléctrica, y 8 millones continúan utilizando leña para cocinar.
Ubicado en Temixco, Morelos, el CIE es el motor principal de investigación en energía renovable, principalmente de la luz solar y las ventajas que ésta ofrece en los ámbitos industrial y doméstico.
El centro además se ha constituido como el sitio que desarrolla investigación acerca de contaminación ambiental. En él se generó el principal estudio sobre el huso horario, que ha sido determinante para adoptar el de verano.
Al respecto, el doctor Manuel Martínez explicó que las autoridades del país deben reconsiderar el cambio del huso horario adoptado por decreto presidencial en 1948, porque si bien se ahorra desde entonces energía, "si le sumamos más horarios de verano como venimos haciendo ahora, los ahorros no serán muchos".
La explicación del especialista redundó en que México tiene oficialmente tres husos horarios, porque el territorio nacional se ubica en las latitudes de 90, 105 y 120 grados, pero en 1948 esto cambió y por decreto se sumó al país a dos husos horarios: los de las latitudes de 90 y 120 grados. Con el horario de verano se crea un desfasamiento, y entre esos patrones "la propuesta de Vicente Fox es la más conciliadora".
Estudios que se desarrollan
En un recorrido que hizo el rector Juan Ramón de la Fuente por el CIE se dio a conocer que en el terreno de la generación eléctrica, en la actualidad la capacidad instalada tiene un margen adecuado para responder a las necesidades de la población, pero si no se fomentan programas de inversión, los problemas que produzca la demanda podrían ser insalvables.
Además de esas investigaciones, el CIE ha desarrollado importantes líneas de trabajo, entre las que destacan los estudios de repercusión ambiental desde el punto de vista energético, cuyos objetivos son identificar los daños en el medio ambiente y reconocer modificaciones en los ecosistemas; investigaciones de ahorro y uso eficiente de energía, cuya principal virtud es el uso de transformadores térmicos para el ahorro del combustible en los procesos industriales, y la utilización de sistemas avanzados de enfriamiento y calentamiento para el acondicionamiento de espacios y refrigeración.
En las aplicaciones de energía solar, el CIE ha desarrollado instrumentos para dar a pequeños y medianos productores la opción de vender sus mercancías con valor agregado mediante la conservación de alimentos con técnicas innovadoras. Respecto de esto ya se han desarrollado experiencias en el secado de café, frutas, chile y granos básicos.
Entre esos estudios hay uno referente a la desintoxicación de aguas con la energía solar, porque en él se utiliza la radiación para destruir contaminantes orgánicos del líquido. Este descubrimiento de los científicos universitarios puede aportar grandes beneficios en el ámbito doméstico, industrial y agropecuario, porque las descargas a los mantos acuíferos ya no regresarían contaminadas al subsuelo.
Incluso en el CIE se diseñó un refrigerador solar para la producción de hielo, cuyas aplicaciones podrían tener beneficios en las regiones pesqueras del país para el almacenamiento y los traslados de los productos obtenidos en los mares.
Manuel Martínez también se refirió a los estudios que en materia de contaminación se realizan en el centro: "la situación en la ciudad de México está empeorando en términos ambientales, no obstante que se ha reducido la emisión de gases invernadero pero los problemas son por las partículas y los desechos sólidos que van en aumento".
Bajo presupuesto
En el recorrido, el rector Juan Ramón de la Fuente, acompañado de Enrique del Val y René Drucker, escuchó las demandas de los investigadores, porque en ese lugar se han obtenido importantes progresos científicos, pero el presupuesto asignado para el presente año sólo fue de 30 millones de pesos, cuando en las naciones desarrolladas los recursos destinados son mil por ciento más.